¡La Chica De Los Gatos! [Hitoshi Shinso x Tú]

Parte 37: Un Solitario Yankee

Estados Unidos hace 13 años

Las calles de las grandes ciudades se encontraban muy iluminadas, llenas de vida, las tiendas vendiendo como locos, las personas esforzándose con sus trabajos... Pero en otras partes de la ciudad no todo era oro, ni mucho menos se acercaba.

En cierto distrito, en un callejón, estaba ocurriendo algo que las personas consideraron "normal". Unos delincuentes estaban asaltando a una pareja de jóvenes. Era un paisaje usual para los pobladores, las leyes nunca fueron lo suficientemente estrictas como para que las personas las cumplieran, al final de todo era un distrito al cual los héroes no entraban. Este sitio era llamado "Boca del Lobo" porque a pesar de que había personas civiles y normales, se encontraba el mayor asentamiento de villanos del país, por muy peligroso que fuera las personas no dejaban de entrar a ese sitio poniendo sus vidas en riesgo porque ahí conseguir un trabajo era mas posible, los abandonados, exiliados, y sin posibilidades de tener una vida plena iban a conseguir dinero para luego pasarse a la ciudad, obvio, si salías con vida.

En esta ciudad vivía una familia "normal", pero ellos no eran un problema, un padre trabajador, una madre que buscaba como mantener a dos hijos, lastima que el pequeño nació en esa ciudad, cuando sus padres se vieron obligados a abandonar sus derechos y lujos, ya nada estaba en sus manos.

— ¡TRAIGAN A ESA MALDITA MUJER!— eran los gritos que se escuchaban afuera de la casa de esta familia, ambiente siempre ruidoso nunca en paz.

—Tengo hambre mamá— decía el hijo menor, ese niño de ojos verdes y cabello rubio. La situación estaba mal, los villanos estaban muy activos en estos días.

—Lo sé cariño, pero tenemos que esperar, mientras haya peligro en la zona no podremos salir, no podemos ponerlos en riesgo, ¿entiendes Ellias?— finalizó la señora de cabellos rubios mientras acariciaba la cabeza de su hijo.

—Si mami— el niño se mostraba comprensivo ante la situación pero no su hermano mayor.

— ¡Demonios! Deberíamos de salir a hacer algo, ma no tenemos nada que comer, y posiblemente las calles estén así durante al menos unas semanas, nadie va a venir a rescatarnos— se quejaba el hijo mayor William—. Solo... solo déjame salir a mi, puedo conseguir dinero en cualquier cosa, aunque sena peleas callejeras, pero algo tengo que hacer, no puedo quedarme aquí sentado viendo como la familia muere de hambre— se encontraba impotente.

—Will, si algo te llegara a pasar no sabría como afrontarlo, pero sabes que es peligroso salir así, se que tu quirk es útil pero no puedo dejar que mi hijo de 17 años muera, y no sea directamente puede ser por daño colateral— suspiró—. No te preocupes ya mañana hablaremos de eso, solo ve y descansa— se levantó de su lugar, dejando a sus hijos solos.

—Papá no ha llegado— mencionó Ellias, un niño de 5 años apenas podía entender la situación donde estaban.

—Puede que vuelva hasta mañana, pasado mañana o que nunca vuelva, en esta ciudad nunca se sabe— habló su hermano—. Mira Ellias, entrena tu quirk y se fuerte, mamá no va a poder sola y nosotros tenemos que protegerla porque los héroes no lo harán, no solo nosotros estamos así y ellos no pueden estar en todos lados, protégete a ti mismo porque no siempre habrá alguien quien te cuide— con esas palabras se retiró a la pequeña habitación que compartían. El niño rubio no había quedado confundido, hasta cierto punto esas palabras calaron profundo en él, más de lo que deberían.

[...]

El sonido de las balas a su lado era horroroso, o más bien alguna le había dado pero no podía sentirlo, iba corriendo. Si, el pequeño Ellias de 6 años era arrastrado por su hermano mayor mientras corrían de un grupo de villanos que habían incendiado su casa. Lo bueno de ser de ahí es que al menos conocían bien los callejones de esa zona, escapar no era un problema. Después de despistarlos se escondieron junto a unos botes de basura.