Inocencia criminal

9: Sentimientos

El lugar era lúgubre, pero bueno, ¿Qué más esperarías de una prisión? Como era obvio era un lugar oscuro y frio, el sol no brillaba y el viento era grácil, por esa misma razón Naruto se preguntaba cómo era posible que su hermano pudiera seguir sonriendo tan alegremente a pesar de estar en un lugar tan horrible.

-Bueno, deja de verme como si me tuvieras lástima que eso si me hace sentir mal – le regaño Deidara dejando caer su mano sobre la cabeza de su hermano.

-P-perdón, es que, siempre te ves tan alegre y todo cuando sé que estas sufriendo, eso me hace sentir un poco…

-Hay no, ¡voy a llorar! – Actuó dramáticamente el rubio mayor – hermano si solo me enfoco en cosas malas, me moriré de miedo, desesperación y muchas otras cosas.

-Lo sé pero… - empezó el más joven.

-¡No! Nada de peros – comenzó de nuevo su regaño – más bien dime, ¿ha pasado algo bueno últimamente? porque veo cierto brillo en tus ojos que me tiene curioso.

-¡Ah! ¿Qué? ¿Yo? No sé de qué hablas – comento el rubio haciéndose el tonto.

-No te me hagas el pendejo, eso lo hizo más obvio, ¿tienes novio? – pregunto con los ojos muy abiertos.

-¿Cómo lo supis…? ¡No, pss! Ni siquiera sé cómo se te puede ocurrir tal cosa – dijo Naruto excusándose de un modo tonto.

-Oh Dios, mi hermanito ya tiene novio – dijo Deidara con sus ahora típicos toques dramáticos mientras se limpiaba una lagrima invisible – Ahora cuéntamelo todo.

-Está bien – comento por lo bajo – la verdad no es mi novio solo salimos, hoy tendremos una cita formal y eso, él trabaja mucho y casi no tiene tiempo libre.

-Oh, y ¿Cómo es? ¿En que trabaja? Espero que sea un buen hombre, si no, sería capaz de escaparme de prisión y alargar mi condena solo para golpearle la cara – le conto Deidara.

-¡No digas eso! Él es una buena persona – le afirmo Naruto.

-¿Ya se besaron? – la pregunta del hermano mayor logro que el otro se sonrojara – así que ya lo hicieron.

-Si…

Naruto se avergonzaba, lo hacía hasta sonrojarse violentamente cada vez que recordaba sus labios uniéndose en pos de los latidos de sus corazones. Había pasado un mes, desde que se había visto con Sasuke, la verdad si se sintió algo mal con eso, pero la noche anterior había recibido un mensaje de Sasuke diciéndole que quería que se vieran, cosa que lo dejo fantaseando al pensar que podía volver a verse con el abogado de nuevo, pero también temía que el moreno le dijera algo como que se arrepentía de haberlo besado y todo se viniera abajo.

-Namikaze, el tiempo de visita termino.

La voz del guardia alarmo a los dos rubios que al escucharlos le hicieron un puchero enfadados porque les aguara el momento.

-Está bien, espero que disfrutes los libros que te traje y ya quiero volver a verte hermano, te quiero – la voz de Naruto sonó tan suave y hasta tierna que Deidara no pudo evitar lanzarse a sus brazos y abrazarlo.

-Yo también te quiero hermanito…

-¡Oigan suéltense!

-No moleste Pain ¡deje que abrace a mi hermano! – le grito Deidara mientras se negaba a soltar al menor.

-¡Deidara!

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-Joder Deidara aprende a seguir las reglas o no dejare que recibas más visitas de tu hermano – le regaño Yahiko – y ya deja de llamarme Pain.