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NO ONE POV

—Ileana.— La voz de Harry Potter llamó su atención. Estaba en la biblioteca estudiando para sus últimos exámenes en Hogwarts solía hacerlo sola ahí para que cuando llegara a la sala común estuviera preparada para Pansy y Daphne quienes solo le preguntaban lo que les hacía falta. —Hola.— El chico se acercó despacio a ella.

—Potter.— Levantó la vista a verlo y volvió a sus libros. —¿Necesitas algo?—

—¿Cómo estas?— Jaló la silla a lado de la chica y se sentó.

Ileana suspiró, dejó su pluma sobre los pergaminos que tenía en la mesa y se giró sorprendida a lo que el chico iba a decir. —Bien, ahora lo estoy.— Hizo una pausa. —Hace un par de meses no. Digo, Weasley me empujó y jamás se acercó a preguntar como estaba.— Encogió los hombros tratando de minimizar sus palabras.

—Lo siento, de alguna forma también me siento culpable.— La chica no hizo ningún gesto. —Pero Ron quiso acercase a disculparse pero siempre estas con Daphne y Pansy. Y déjame decirte que jamás había visto tan atemorizante a Greengrass.— El comentario hizo reír a Ileana. —Al menos te reíste.—

—Todo bien Potter, ahora si no vas a estudiar te pido de favor si me dejas hacerlo.— Y volvió a sus cosas. Harry sin embargo se quedó ahí. El atardecer comenzaba a hacerse presente y luz naranja comenzaba a entrar por la ventana que los chicos tenían atrás de ellos.

—¿No te agrado?— El chico seguía con la vista en el atardecer.

—Siento que te dan mucha importancia por lo que pasó antes. Deberías de tratar de ser solo tú.— Ileana dejó sus cosas en la mesa y se giró a observar lo mismo que Potter. —No el niño que vivió, cada quien podemos decidir.— La chica se encogió de hombros.

—No tiene ni siquiera un año que me entere que era mago. Y ahora todos esperan que haga algo mágico.—

—Es justo lo que pienso, todos somos estudiantes. Solo que cada uno va a tener sus propios problemas.— Ambos seguían viendo el cielo ya casi negro.

—Entonces ¿Nos disculpas? Digo a mi y a Ron.— Ileana se giró a verlo y sonrió derrotada.

—Si Potter.— Apenas y la chica respondió Ron Weasley apareció junto a Harry.

—Gracias Ileana, no quería hacerte daño.— Su repentina aparición asustó a la chica pues no sabía de donde había salido el pelirrojo.

—Pero que car...— Cerró su boca cuando iba a decir la mala palabra que Adrián le había dicho que dijera cuando algo la sorprendiera. —¿De dónde saliste Weasley? Creo que tu meta antes de que termine el año es terminar conmigo.—

—No, lo siento otra vez Ileana.— Las mejillas de Ron se tiñeron de rojo.

—Es una capa de invisibilidad.— Harry habló. —En navidad me la dejaron, al parecer era de mi padre.—

—Vaya, enserio tu y tus secretitos Potter.—

* * *

—¡Draco!— Ileana corrió por el pasillo hacia el chico al que había llamado fuertemente. —Draco.— Volvió a llamar su nombre y el chico por fin se detuvo y volteó hacia ella.

—Lena.— Solo hizo algún tipo de asentimiento con la cabeza.

—Me llegó una carta de mamá. Tus papás van a hacer una fiesta y nos invitaron.— El chico hizo una mueca.

—Si.— Sacudió el cabello de su nuca. —Creo que muchos Slytherin van a estar ahí. Daphne y Pansy, no estarás sola.—

—Somos amigos Malfoy y va a ser en tu casa, no estaría sola.— Ambos sonrieron. —¿Te sucede algo?— La chica noto un poco fastidiado a Malfoy, si el solía tener cara de pocos amigos pero era aun más notorio en ese momento.

—¿No has visto a tu hermano?

—¿Le pasó algo?— De inmediato se preocupó.

—No.— Rápido la intento calmar. —Lo que pasa es que perdimos el partido contra Gryffindor.— Ahora comenzaba a entender.

—¿Potter?—

—Se tragó la maldita snitch.— Draco dijo alterado. —Eso no puede ser posible, dime ¿Cuántas posibilidades hay para que se trague la maldita snitch.— Ileana se soltó a reír.

—Draco, enserio déjalo.— Le palmeó la espalda y comenzó a caminar. —Ven, acompáñame a la biblioteca tengo que terminar de estudiar.

—No lo entiendes.— Suspiró resignado.

—No, no lo hago pero no dejes que Potter te frustre demasiado, digo, eres un Malfoy, tranquilamente puedes ser parte del equipo el siguiente año.—

—Eres una genio Ileana Albescu.— El chico la sacudió feliz. —Enserio lo eres.

—Ya lo sé, no me lo debes de repetir, le ganaré a Granger en los finales.— La chica dijo con autosuficiencia

DALTONISMO ; Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora