Era temprano, parecía que apenas iba a salir el sol y en mi ventana oía el golpeteo de una lechuza, por un momento pensé que era la de Draco pero aún estaba un poco dormida y fue hasta que me acerque a verla que me di cuenta que era la de Cedric. Venía con un par de libros y una nota.
Ileana, surgió algo con mi mamá, nada grave pero no voy a poder ir a nuestra última clase. Lo siento pero te veo en el colegio y ahí quedamos para ayudarte con lo que falta y si necesitas más tutorías lo vemos.
Cuídate.
Revisé los libros y uno de ellos era la copia de Las fuerzas oscuras: una guía para la autoprotección de Quentin Trimble, de Cedric lo hojeé un poco y tenía varias notas que estaba segura que me servirían para terminar de estudiar. Planeaba responderle a Cedric pero su lechuza ya se había ido, lo haría cuando lo viera en Hogwarts y decidí volver a la cama.
Traté de volver a conciliar el sueño pero me estaba siendo difícil y lo fue a un más cuando desde abajo pude oír mucho ruido, apreté los ojos esperando que no me afectara y pudiese seguir durmiendo pero todo se arruinó cuando abrieron mi puerta de golpe y comenzaron a gritar:
—¡Ochi!— Nikolái entró a todo volumen a mi cuarto.
—¡Hermanita!— Y por lo que pude oír Adrián también estaba aquí.
—¡Buenos días cielo es hora de levantarse!— Niko había ido directo a las cortinas y las abrió de par en par haciendo que los ahora presentes rayos de sol entraran directos hacia mi cara.
—Vamos Ile, es hora de levantarse ya llegó tu favorito—. Adrián se acostó en mi cama y comenzó a moverme para que les hiciera caso.
—¡Ey! Pucey, no toques a mi hermana y menos cuando están acostados en una cama—. Niko tomó a Adrián de los pies y lo comenzó a jalar hacia abajo para quitarlo de mi alrededor.
—¿Quieren callarse?— Les dije con un tono un poco alto. —Todas las vacaciones descansé demasiado bien como para que este último fin de semana vengan a molestar—. Lo dije mientras seguía acostada y subí las cobijas hasta mi cabeza.
—Pensé que me habías extrañado—. Mi hermano dijo con falsa tristeza. Quité las cobijas de encima mío y los miré a ambos de mala gana.
—¿Por qué molestan tan temprano?— Me levanté de mi cama y caminé para cerrar las cortinas que mi hermano había abierto. —Es justo el último viernes antes de volver a la escuela ¿tienen una buena razón?—
—Si—. Adrián dijo sin pensar mis palabras. Me acerque a la cama y me senté en la orilla viéndolos curiosa.
—Tenemos un día ocupado así que alístate cielo y baja porque hay sorpresas para ti—. Niko me sonrió y salieron de mi cuarto para que me apresurara.
Dudé un par de minutos y estuve muy tentada a volver a la cama pero tenía miedo de que volvieran a molestar asi que preferí darme un baño. Niko dice que siempre es aburrido esperarme pero creo que no me tardo tanto, trato de bañarme rápido y puede que si me tarde un poco más en arreglarme pero casi es el mismo tiempo que él se toma.
Traté de imaginarme lo que tenían planeado pero no quería arriesgarme junto a ellos y tendría una buena excusa si me ponía el vestido claro que papá me había regalado, mi cabello lo até en media coleta con un listón.
Cuando estuve lista tomé un chocolate de los que Draco me había regalado y salí de mi habitación para buscar a los dueños de tantos gritos.
—Nikolái, Adrián—. Les iba gritando mientras bajaba las escaleras. En el recibidor no los vi, ni tampoco en la pequeña sala junto a la chimenea, fui hacia la cocina y solo vi a Miha cortando algunas cosas. Iba a preguntarle por mi hermano cuando oí un golpeteo en la puerta, rápido fui a ver que era y fue una gran sorpresa lo que vi justo cuando la iban cerrando.
—¿Qué pasa aquí?— Daphne, Astoria, Pansy, Draco, Blaise, Theo y Terrence estaban junto a los dos chicos que me habían despertado más temprano.
—¡Sorpresa Hermanita!— Adrián corrió a abrasarme.
—¿Qué?—
—Eres un idiota Pucey, arruinas todo— Mi hermano se acercó a quitarlo de mí. —Ochi—. Me rodeó con uno de sus brazos por los hombros y me guio hacia todos mis amigos que seguían sin hablar. —Se nos ocurrió que podríamos tener una pequeña fiesta por tu cumpleaños, aún faltan unos días pero no es lo mismo que sea en Hogwarts a que lo hagamos aquí en casa—. Tardé como dos segundos en reaccionar y fueron esos mismos dos segundos los que ellos tardaron en acercarse a mí.
—¡Feliz cumpleaños Ileana!— Daphne y Pansy se acercaron y me abrazaron juntas.
—¡Felicidades Ileana!— Astoria se acercó poco después y en sus manos llevaba un pequeño frasco que me entregó. —Seguí al pie tu receta y espero que hayan quedado bien—. Eran dulces de leche.
—Gracias Astoria—. Le devolví el abrazo.
—Feliz cumpleaños a la Princesa de Slytherin—. Theo me abrazo fugazmente pues fue empujado por Blaise.
—Emperatriz Nott, recuerda que desciende de una—. Lo miró mal para después abrasarme. —Felicidades Albescu—.
—Gracias Zabini—. Cuando se separó de mi Draco se acercó con una de sus medias sonrisas de autosuficiencia. —Hola Malfoy—.
—Lena, feliz cumpleaños—. Draco era de mis amigos favoritos y que el estuviera aquí hacía que todo esto fuera mejor.
—Gracias Draco, no esperaba nada de esto—. Estaba emocionada y nerviosa, nunca había tenido amigos para que vinieran a casa a festejar un cumpleaños.
—Toma—. Extendió una pequeña caja con un moño encima. —Espero que entiendas el mensaje—. Levante una ceja divertida y no me esperé y abrí la caja, era una cadena y tenía como dije una paleta que ocupan los pintores. Muy gracioso Draco.
—Gracias Draco—. Le sonreí divertida.
—¿Te olvidas de mí?— No me imaginaba que Terrence pudiese haber venido.
—Hola extraño—. Ambos reímos por el comentario y rápido me acerque a abrasarlo, tenía mucho sin saber de él y me alegraba mucho que estuviera aquí.
—Feliz cumpleaños—. Con una de sus manos acariciaba mi cabeza y podía sentirlo sonreír. —Feliz, feliz, feliz cumpleaños—. Repetía una y otra vez y antes de separarse de mi dejo un pequeño beso en mi mejilla.
—Ey, Higgs—. Mi hermano se quejó. —Te dejé que vinieras pero que estuvieras lejos de mi bebé—.
—Cállate Fiara—. Trate te matarlo con la mirada. —Gracias a todos por esto, de verdad que lo aprecio completamente—.
—Díselo a Draco y Terrence, ellos se encargaron de todo—.
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DALTONISMO ; Draco Malfoy
Fantasy"El daltonismo es una afección en la cual no se pueden ver los colores de manera normal. También se conoce como deficiencia de color. En el daltonismo generalmente la persona no puede distinguir entre ciertos colores. Con frecuencia no distinguen lo...