Dama verde: Lo conseguiste Clyde.
Dama roja: Estás realmente con quien debes estar.
Dama naranja: Solo falta una cosa para completar tu viaje.
Dama turquesa: es algo que devolverá la luz a tu caballero oscuro.
Dama rosa: Debes encontrar a la persona que creíais fallecida.
Dama azul: Y regresársela. Está viva y la puedes encontrar.
¿Qué? ¿de qué estaban hablando? ¿Dónde me encontraba? Miré a mi alrededor. No había nada. ¿qué demonios estaba pasando? ¿Quién es esa persona que tengo que encontrar?
¡LA HERMANA DE CRAIG!
¿Está viva? Tendré que preguntarlo.
Clyde: Oh damas que lo sabéis todo, reinas de los sueños, - ok, tal vez haya exagerado un poco, pero por si acaso - ¿Habláis de la hermana de Craig?¿Está viva?
Dama Roja: Puedo oír sus latidos del corazón.
Dama Turquesa: Yo puedo ver sus ojos.
Dama Rosa: Está atrapada y no le queda mucho tiempo.
Dama Verde: Busca en cada rincón de Granjas Tegridad.
Dama Amarilla: Una última cosa antes de que te vayas.
Dama azul: Llámanos Winx, ¿De acuerdo?
Y con un destello desaparecieron. No quedaba rastro de ellas, solo estaba yo, volando en un espacio inmenso y oscuro. Intenté llamar varias veces sobre si podía despertarme ya, pero por mucho que lo intentara, tampoco podía conseguirlo. ¿Me quedaría allí para siempre?
Poco a poco, de entre todo lo negro, una luz brillante apareció por el horizonte. No era el sol, más bien era mi sol. Craig, con unas alas de ángel se acercó a mí. Un suave roce de nuestras manos. Él la agarró y me empujo cerca de su cuerpo. Con su otra mano y a modo de sujetarme, me abrazó. Entonces él alzó el vuelo.
Un paisaje de fantasía se hacía camino a nuestro alrededor y montones de criaturas se acercaban a ver al ángel volar. Me sentía libre. Solo estábamos él y yo. No hacía falta ninguna palabra, estábamos conectados y era maravilloso.
.
.
.
¡PIIIIIIIIIIIII! (Alarma)
Clyde: ¡Ah!
Craig: ¡¿Qué pasa?!
Me encontraba en mi habitación con Craig. El sonido de la alarma seguía sonando y yo, después de un suspiro, la apagué. Craig se me quedó viendo extraño, pero al menos ya se le notaba mejor que ayer.
Craig: Buenos días amor, ¿cómo has dormido?
Clyde: Buenos días. La verdad, genial. Sienta bien estar en mi casa de nuevo.
Los dos nos miramos mientras la luz anaranjada de la mañana entraba por la ventana, en su frente se podía notar un tono colorado, así que pronto apartó la mirada.
Clyde: Te parece bien si nos vestimos y vamos a tomar un café. Yo no tengo nada aquí que pueda servir como desayuno.
Craig: ¡Trato hecho! Si tu invitas, claro, yo no tengo ni un céntimo.
Clyde: De acuerdo. - dije mientras notaba una mirada enérgica en sus ojos.
Mientras nos empezábamos a vestir, pensé que tendría vergüenza de cambiarse junto a mí, pero no fue así. Le presté ropa limpia mía, que le cabía perfectamente, y se puso todo elegante. Tengo que admitir que, aunque estuviese todo el rato girado de espaldas, en un momento ojeé y pude ver a Craig con uno de mis boxers azules, los cuales le sentaban de maravilla.
Una vez estuvimos cambiados, nos fuimos a tomar ese café que tanto estábamos deseando. Yo sin café por la mañana no soy persona. Las calles estaban tranquilas y se notaba que casi éramos primavera. Las montañas, casi sin nieve, se veían a lo lejos mientras nosotros llegamos a una plaza central.
Nos sentamos en una cafetería y pedimos los cafés, que no tardaron mucho en llegar. Hablamos un poco. Yo le conté todo lo que él se había perdido mientras había estado... en fin, ya sabéis. De hecho, donde nos encontrábamos ahora mismo, era donde solía estar el Whole Foods. Esa zona de la ciudad se había urbanizado hacía poco con edificios bastante bonitos de colores otoñales.
?:¿Clyde? - dijo una voz por detrás. Yo me giré y pude reconocer la figura de Kyle y, más a lo lejos, la de Stan.
Clyde: ¡Kyle! ¿Cómo estás? - les dije, ofreciéndoles una silla. Los dos se sentaron, pero Stan parecía enfadado.
Kyle: ¿Cómo estoy yo? Perdona, pero yo no he estado desaparecido durante décadas. - ¡Exagerado! - Nos dejaste preocupados, ¿qué te pasó?
Clyde: ¿Qué creeis que me pasó? Estuve capturado, conocí a Craig, me escapé y salvé a Craig y a los Estados Unidos.
Kyle: ¿Por qué has destacado la parte de Crai... ¡Craig! ¿Eres tú de verdad?
Craig: Llevo aquí todo el tiempo. - pude notar que Kyle lo estaba flipando, pero Stan aún estaba raro.
Clyde: Por cierto Stan, no hubiera conseguido escapar si no hubiera sido por la ayuda de tu madre. Le debo la vida.
Stan abrió los ojos como unas naranjas. Su faz inexpresiva se rompió y pude notar lágrimas que le empezaban a gotear por la sien. Yo, sintiéndome responsable, me aproximé a él y lo abracé. Pronto Kyle hizo lo mismo y Craig nos hizo una foto con mi móvil antes de que nos diéramos cuenta.
Clyde: Tu madre te quiere mucho y sigue pensando en tí. Supongo que ahora que los planes de Randy han fracasado, podrás volver a verla y abrazarla.
Craig: Sharon también fue muy dulce cuando yo estaba allí. Se mostraba distante con la mayoría, pero para mí, era como un ángel de la guarda en esa cárcel en la que estaba por mi amante.
Stan: Gracias chicos, pero no quiero llorar. - dijo secándose las lágrimas que, por mucho que intentara cortar el flujo, seguían saliendo cada vez con más intensidad.
Nos quedamos allí un buen rato, hasta que fue tarde y decidimos ir a hacer algo productivo: la compra. Ellos también se fueron por su camino. Craig y yo todavía no lo habíamos oficializado, por lo que tal vez fue un poco incómodo para ellos.
Llegamos a uno de los supermercados más grandes de toda la ciudad. Yo empecé a hacer la compra mientras veía que Craig lo flipaba. Compré bastante comida y ropa nueva para Craig. También aproveché y le compré un móvil a Craig. Le compre un Samsung A51, ya que supuestamente nos darían alguna especie de subvención por todo el secuestro y tal...
Él estaba entusiasmado y estaba deseando abrir la caja. Yo, por mi parte, estaba feliz de que a partir de ahora me pudiera comunicar con mi "novio" (sin confirmar todavía).
Aprovechamos y también comimos fuera, después de dejar las compras en casa. Fuimos a un restaurante de comida ráìda, ya que tanto él como yo añorábamos el sabor de una hamburguesa.
Al terminar, dimos un paseo por el parque. No fue lo más romántico del mundo, pero por algo se empieza. El sol tocaba fuerte y el calor se volvía agotador, así que nos sentamos a la sombra de un árbol. Yo propuse a Craig que pusiera su cabeza sobre mi regazo para que así le pudiera acariciar su melena oscura, a lo que él aceptó.
Su pelo era suave como el de una cobaya y realmente me gustaba esa sensación: era como si el tiempo se hubiera parado a nuestro alrededor. Craig y yo, solos, sin prisiones ni marihuana. Menudo descanso.
ESTÁS LEYENDO
South Park: Mi futuro junto a ti (Cryde/gay)
FanfictionClyde, un oficial de policía, es mandado en una missión para encontrar una nueva clase de droga fabricada supuestamente en Granjas Tegridad llamada Dreamix. Lo que no espera, es encontrarse a su crush de la infancia en esos pasillos. Esta historia c...