Capítulo 1: La árdua rutina

355 23 20
                                    

Era un lunes cualquiera, me desperté temprano como siempre y me levanté de la cama. Me fui a duchar y luego me preparé un café con unas tostadas. El día era gris, las nubes anunciaban lluvias.

Al terminar de desayunar, me vestí con el uniforme de policía. Mi piso era pequeño, pero siempre antes de salir, le daba las gracias a mi madre desde el cielo. Si ella estuviera aquí.

Me despedí de mi apartamento y salí a la calle. La comisaría estaba a dos manzanas de mi casa, por lo que siempre iba andando. Al llegar, fiché y empecé a organizar diversos documentos. Mi jefe, el señor Token Black, nos exigía mucho a mí y al resto del cuerpo, pero la mayoría no le hacían ni caso. Él se casó con Nicole hará ya seis años. Los dos se veían muy felices, pero él no paraba de quejarse de su mujer cuando no estaba delante.

Al llegar las diez, me tocaba mi ronda de patrullas. Mi compañera de rondas, Red, era muy simpática, pero a la vez era muy aburrido estar con ella. Como no, en la ronda solo hizo falta poner un par de multas de aparcamiento, unos cuantos avisos a los viandantes de los peligros y poco más.

Este trabajo era más aburrido de lo que me imaginaba cuando tenía dieciséis años. Antes pensaba que había más acción, pero desde la reciente prohibición de la metanfetamina, no había mucha gente que quisiera problemas con la ley.

Ese día, al acabar la ronda y llegar a comisaría, había algo distinto en el aire, todo el mundo estaba distraído y ausente, como si tuvieran preguntas pero nadie las respondiera.

El jefe nos citó a todos a un salón junto con el alcalde Butters, el cual nos dió una charla informativa.

Alcalde Leo: Buenos días policías. Como muchos ya sabéis, en South Park y en todo el estado de Colorado se ha prohibido la metanfetamina. Eso incluye cualquier acción relacionada con eso, ya sea venderlo, consumirlo o meterselo por el... - me voy a saltar esta parte. - Muchos habitantes están descontentos y nos tienen entre las cuerdas porque quieren que la volvamos a legalizar. Gran error sería hacerlo. South Park se ha convertido en una población importante gracias al comercio y a la exportación. Después de Denver somos la población con más población y la mejor económicamente de todo el estado. El problema es que se ha detectado una nueva variante de la metanfetamina, más peligrosa y eficaz, pero menos detectable. A esta droga le hemos puesto el nombre de Dreamix. Hasta que no la estudiemos también está prohibido consumirla.

Compañero: ¿Y qué debemos hacer?

Alcalde Leo: Me da la sensación que alguien está intentando hacer negocio de esta nueva oportunidad de venta y se ha formado una banda de narcos por toda Norte América. La central y el supuesto punto más alto se encuentra en Colorado, en concreto, en South Park y Denver. También hay otras ciudades luchando contra esta amenaza, pero puedo asegurar que los demás gobernadores son unos vendidos que jamás querrían ayudar a la gente. Es por eso que vuestro deber es ayudar a encontrar a esta banda criminal y pararles los pies.

Compañero: ¿Y cómo espera que hagamos esto?

Alcalde Leo: Tengo una ligera sospecha de saber quien nos puede ayudar, pero yo no puedo ir a preguntarle. Un agente de vosotros será escogido por el jefe Black y os dará más datos.

Token: Efectivamente, ya citaré a mi despacho a la persona que vea más preparada. Es importante que el escogido no sea temeroso y no intimide demasiado a nuestro amigo. En fin, hasta aquí la reunión. Volved al trabajo!

Todos nos fuímos a nuestros puestos, pero al cabo de poco, el señor Black se aproximó a mí.

Token: Agente Donovan, a mi despacho! - No me diga que soy el elegido.

Dejé mi monitor apagado y abandoné mi cubículo en el que estaba realizando informes. Al entrar, un fuerte olor de tabaco vino a mi nariz. El señor Black era un fumador bastante fuerte, hecho que provocaba que fumara incluso en su oficina.

Token: Agente Donovan, estoy muy satisfecho con sus servicios, no es solo uno de los mejores agentes sino que también te conozco desde primaria. Nuestro objetivo es el señor Marsh, propietario de fábricas Tegridad, necesito que hables con él y averigues lo que puedes sobre el caso Dreamix, si hay alguien detrás del caso, necesitamos saberlo, si todo es una mentira, también necesitamos saberlo.

Como todo agente, me intenté hacer el serio delante de mi jefe y estar lo más concentrado posible, pero con el tabaco me mareé un poco. Intenté mantener la compostura.

Clyde: ¿Y cuanto más sabemos sobre este caso?

Token: Nada, es muy reciente. Solo ha habido tres personas encarceladas por usar el Dreamix. Las tres están bajo foco y siendo interrogadas. Uno de ellos tenía un recibo de Marihuana de la Granja Tegridad, es por eso que creemos deber investigar a Randy Marsh. ¿Y bien? ¿Te apuntas?

Clyde: Acepto el caso.

Acepté el caso simplemente para poder salir de esa oficina del horror llena de humo y ceniza. Una vez respiré aire fresco, hice lo que toda persona sensata haría. Ir al baño.

South Park: Mi futuro junto a ti (Cryde/gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora