El mismo cielo✅

Mentira

Dolly

—Imbéciles—comentó Sara. Yo trate de disimular lo decepcionada que me encontraba y es que espere todo, menos ver a Maximus besando otra chica en nuestro primer encuentro.

Sabía que él asistía a esta universidad y no era que me convertiría en una acosadora ni nada, solo había decido seguir mi corazón, quería seguir nuestra historia desde donde la habíamos dejado. Tenía mis esperanzas puestas en que Maximus hubiese leído mi carta, quizás lo hizo o quizás no, o tal vez solo ignoró por completo las palabras allí escritas. Porque yo no era la gran cosa para pedirle que me esperara. El alboroto continúo en el fondo del auditorio y mire a Sara para distraerme, pero esta parecía estar molesta.

—Haz cambiado—dije mirándola con atención. Tenía el cabello recogido en un moño al descuido y una playera dos tallas más grandes de la que usaba, pero lo que más me sorprendió fue notar que aquello la molestara—Recuerdo que eras así de ruidosa en la secundaria—comente, mientras esta me regalaba una intensa mirada.

—Uno cambia Dolly Faster—se escuchaba realmente cansada—La universidad es un fastidio y mi compañera de cuarto un dolor en el culo. Si le sumamos que tengo que soportar que todos hablen de la superestrella de natación Maximus Blake, creo que estoy en el mismísimo infierno y no hablemos de su novia nueva Stephanie Brachier—me removí incomoda y tuve la intención de mirar sobre mi hombro, pero no lo hice.

—Ya estoy aquí, te haré la vida mucho mejor—pase mi brazo sobre sus hombros y la atraje hacia mí para consolarme—Y... puedes venir a vivir conmigo, si quieres—Le saltaron los ojos y se lanzó a mis brazos. Y sin querer en aquel momento lleve la mirada donde él se encontraba y me sorprendió darme cuenta de que no me quitaba la mirada.

***

Acompañe a Sara por sus cosas en la residencia y no pude evitar reírme ante lo eufórica que se encontraba. La esperé tranquilamente en el pasillo, mientras la escuchaba restregarle a su compañera que al fin iba a descansar de ella. No sabía si había hecho bien en invitarla a vivir conmigo, pero también le tenía un poco de pánico a la soledad y creo que aquello era lo que al final me había llevado tomar aquella decisión. Aparte los ojos de mi móvil cuando escuche unos murmullos y al levantar la cabeza me encontré de frente con su mirada, la apartó rápidamente y agradecí que Sara saliera justo en aquel momento.

—Tengo que ir a entregar esta llave y a firmar un documento—me mostré neutra ante ella y la seguí pisándole los talones, ni se fijó en el grupo donde se encontraba Maximus y ni siquiera cuestionó el que me encontrara tan callada.

Comenzó a contarme cosas sobre la carrera mientras íbamos de camino. La dos habíamos escogido negocios internacionales y Sara ya tenía un año adelantado así que sabía que aquello me facilitaria algunas cosas. Mi prima pudo ser algo pesada en la escuela, pero siempre fue bastante aplicada y sacaba buenas notas, así que la escuche con mucha atención aunque mi cabeza estaba en otra parte. Y en aquel momento como si lo hubiese invocado lo escuche vociferar mi nombre.

— ¡Dolly Faster!—. El corazón se me aceleró, detuve mis pasos y me giré despacio. Y este era otro momento cliché que sumamos a mi lista con Maximus Blake.

— ¿En serio?—cuestionó Sara fastidiada—Vamos por lo mismo Maximus—rodó los ojos y se cruzó de brazos. Lleve la mirada nuevamente al hombre frente a mí y pude notar la indecisión en sus ojos.

— ¿Cómo estás?—preguntó titubeante y escuchar su voz tan de cerca me puso algo nerviosa. Pero como siempre algo pasaba que me devolvía a la realidad.

—Max—dijo la chica la cual sabía ya que era su novia. Me miró de arriba abajo con poco recato y la sonrisa de zorra me arribo al rostro—Hola soy Stephanie la novia de Maximus—Su voz era la típica chillona de chica fresa y pude notar que se sintió intimidada porque se pegó a Maximus como una cucaracha.

—Estoy bien—dije al fin, dándoles la espalda. Porque sabía que Maximus se daría cuenta de que lo que dije era mentira.