Capítulo 36

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Sofía.

Sofía: Daian, aquí!

Hice un gesto con la mano para que volteara a verme

Daian: Perdón, no te había visto.

Sofía: Vamos?

Daian: Claro! Le avisaste a tu madre que irías conmigo o?

Sofía: Oh no!, me estoy quedando con mi abuela, luego te explico, pero traigo mi coche, si quieres sígueme en el tuyo.

Daian: Si, está bien.

Me monté a mi coche y mis nervios cada vez aumentaban más, que iba a hacer o decir. Y si en ese momento me bloqueaba y nada salía de mi boca? Quiero expresárselo todo, pero no sé si salga como lo planeo o si ella quiera esto.
Antes de arrancar llamé a mi abuela para decirle si podía ir a comer Daian, esperando que me dijera que si, porque vamos en camino.

- Hola! Abuela.
- Hija! Pasa algo? Ya vienes?
- Si, de hecho ya estoy en camino, pero quería preguntarte si puedo invitar a comer a Daian, mi mejor amiga...
- Si, por supuesto, mándame un mensaje antes de que lleguen para recibirlas.
- Esta bien, gracias Abu!.
- De nada cielo, maneja con precaución.
- Seguro. No te preocupes.

Ven? Por eso amo a mi abuela.

Conduje con el coche de Daian justo detrás de mí y llegamos a la entrada. Me pidieron que justificara el coche de detrás ya que como es un carro desconocido mi abuela tenía que autorizar la entrada. En fin, estuvimos ahí como diez minutos en lo que le hablaban y nos dejaban pasar.

Le mandé el texto a mi abuela que estábamos a dos casas de la suya, me dijo ya esperaba por nosotras.

Daian: Y tus madres?

Sofía: Están de vacaciones, ya sabes, querían tiempo a solas antes de que nazca mi hermana.

Daian: Ohhh, si claro. Se debían su tiempo a solas, hacerse cargo de ti no es fácil cariño.

Sofia: Tonta! Ya entremos mejor, mi abuela está esperándonos.

Entramos platicando y riendo hasta que mi abuelita vino hacia nosotras.

Lucía: Hija, que bueno que llegaron, la comida está servida! Tu debes ser Daian

Daian: Así es, mucho gusto señora?

Lucía: Lucía, ese es mi nombre.

Daian: Un placer conocerla señora Lucía.

Lucía: Pero adelante, pasen niñas, siéntense.

Daian: Gracias!

Sofía: Gracias abu!

Deposité un beso en su mejilla y fuimos las tres juntas hacia la mesa.

Mientras comíamos platicábamos un poco y mi abuela conocía un poco más a Daian.

Lucía: Daian cuéntame, de donde se conocen?

Sofía: Abuela, es obvio que de la escuela.

Daian: Si señora, como dice Sofía, en la escuela nos conocimos, aunque yo soy dos años mayor que Sof, pero eso no ha impedido que nuestra amistad florezca.

Lucía: Que bien chicas, me parece genial que a pesar de la diferencia se lleven así de bien.

Terminamos de comer y nos levantamos a dejar los platos. Bien, era el momento de hacer lo que tenía que hacer.

Sofía: Abue, estaremos arriba, cualquier cosa avísanos.

Lucía: Claro, en un rato tengo que salir rápido al bufete, me solicitan ahí, es rápido, firmó unos documentos y regreso. Les aviso cuando me vaya.

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