Capitulo 4

2.1K 126 6
                                    


Pov Arizona
Anteriormente había dejado mi currículum en el hospital donde trabaja Callie para el puesto de Jefa de Pediatría y por suerte lo obtuve

Sofía un día antes nos había pedido permiso para quedarse en casa de una amiga ese día, así que la mamá de su amiga las recogió y fueron a su pijamada, Sofía vivió un tiempo aquí así que ya conocía a muchos amigos y al momentito de regresar aquí a NY solo la transferimos de escuela, sin necesidad de volver a inscribirla.

El día había sido un tanto lento, no había mucho movimiento en el hospital, cirugías de rutina, nada que me llevara mucho tiempo.
Le mandé un texto a Callie para saber a qué hora saldría y si quería que la esperara

Calliope 🧡
- Holaaaa! A qué hora saldrás? Quieres que te espere?
- Si espérame, ya no tardo, termino una consulta y voy
- Está bien aquí te espero ❤️

La esperé alrededor de 10 minutos, me comenzaba a desesperar, siempre he sido así, pero cuando estaba a punto de volver a llamarla sentí que unos brazos rodearon mi cintura

- Callieeee! Estaba a punto de llamarte de nuevo - dije un poco avergonzada

- Que señorita tan desesperada - me vió y río  -

- Vamos, te espera una gran cena que te prepararé - dije dándole un beso en la mejilla y tomándola de la mano para ir al coche

Subimos al coche y ella manejaba, en  el transcurso no hablamos mucho solo acerca de nuestro día y como nos había ido. Llegamos a casa eran alrededor de las 7:30 pm y me dispuse a mandarle un texto a Sofía ya que sabía que la mamá de su amiga las recogería e irían a pijamada.

Sof 🧸❤️
- Hey nena cómo estás!
- Bien ma, acabamos de salir de la piscina y estamos por  ir a cenar
- Que bien, dudo poder mandarte mensaje más tarde Sof, tuve un día un poco lento que me aburrió y estoy un poco cansada así que ya me iré a dormí descansa princesa, te queremos mucho 🤍
- Gracias mami, igual descansen 💕

Callie me abrió la puerta, entró detrás de mí y la cerró

- Entonces con que me deleitaras? - dijo

- Te haré una rica pasta, se que te encanta la pasta -

- Me conoces muy bien Robbins - dijo emocionada

Comencé a cocinar y platicaba con Callie al momento hablábamos acerca de la excursión del colegio de Sofía, decidíamos si dejarla ir o no

- Arizona yo creo que aún es muy pequeña para eso, no estoy muy de acuerdo en dejarla ir - dijo un poco desanimada

- Callie, lo se solo tiene 12 casi 13, pero mira créeme son experiencias que se viven una vez, dejémosla que disfrute su infancia con todo lo que nosotras le podamos ofrecer, pero siempre cuidándola y no dejando que se vaya por mal camino, es una niña muy buena, dudo que quiera ir para hacer cosas que nosotras no le permitamos - dije en tono explicativo

- Esta bien, me gusta la forma en que me lo planteas, ademas de que su buena conducta y notas me hacen no poder decir que no - dijo

- Mañana que la veamos le decimos que si irá, seguro se pondrá muy contenta - dije un poco emocionada, sabía que si emocionaba a mi hija yo también lo haría

Terminé de preparar la cena y Callie empezó a poner la mesa, serví los platos acompañados de una copa de vino y nos sentamos
Comenzamos a comer en un silencio cómodo, cada quien disfrutaba de su comida

- Callie que somos? - dije mirándola y tomando un sorbo de mi copa

- Mujeres que más - me miró y rió

- Tonta, me refiero a nuestra relación que somos? - dije entre risas - Estos días que he estado aquí que han sido muy pocos, siento que estamos juntas de nuevo, tuvimos sexo, estamos cenando juntas, nos despedimos y saludamos como pareja que somos? -

- Somos lo que quieres que seamos Arizona, la verdad es que soy muy muy feliz a tu lado, siento que no me hace falta nada, te tengo a ti y a Sofía conmigo son todo lo que necesito, aún sigues siendo mi esposa si lo quieres ser - dijo mirándome a los ojos y sonriendo

- Callie es obvio que quiero volver a ser tu esposa, es lo que más deseo, estar siempre contigo, aún que no se si tú ya me hayas perdonado - dije desanimada

- Arizona... eso ya olvídalo por favor, claro que ya te perdone esa herida sano hace mucho, aún te amo eres todo lo que quiero y siempre voy a querer -

Se arrodilló y abrió una caja con un anillo imaginario y  me preguntó - Arizona Robbins quieres volver a ser mi esposa? -

- Si Calliope Si! - dije muy feliz

Me colocó el anillo imaginario y se levantó y me besó, fue un beso lleno de amor, perdón y pasión, es irreal la forma en cómo amo a esta mujer podría casarme ahora mismo sin necesidad de un anillo real, sabía que por siempre quería estar a su lado, ella y Sofía son mi motor de vida por las personas que me levantó todos los días.

Esa noche las dos estábamos demasiado cansadas como para tener sexo como nos gusta, así que recogí los platos, los llevé al fregadero y ahí los dejé, ya mañana los lavaré.
Subimos juntas a la habitación con la tercera ronda de vino, solo queríamos llegar a la cama y acostarnos pero antes yo necesitaba darme una ducha.
Entramos al cuarto, dejé mi copa en una mesita de noche que tenemos y me comencé a desvestir frente a ella, me quité la prótesis y me sostuve de la pared , se recostó en la cama y yo veía como con solo su mirada me comía toda, quedé totalmente desnuda y dispuesta a entrar a la bañera

- Vienes? - le dije en un tono pícaro

Muy apresurada se levantó de la cama, dejó su copa y se quitó la ropa para entrar junto a mi, su cuerpo era una verdadera obra de arte, le tomé la mano y me ayudó para que entráramos juntas el agua ya estaba calientita como nos gustaba, entró y abrió sus piernas, yo quedando de espalda a ella en medio de sus piernas, comenzó a acariciar mi cabeza y cuello, yo acariciaba sus brazos y piernas.
No pensábamos tener sexo solo queríamos estar ahí, tener un momento de paz y tranquilidad juntas, nos duchamos, me ayudó con mi cabello.
Me ayudó a salir, salimos y nos pusimos unos pijamada calientitos, ya que en NY por la tarde hacía calor y en las noches era un verdadero congelador.
Nos acostamos bajo las cobijas y nos acomodamos para quedar en cucharita, ella estaba detrás mío.

- Deberías de traer tus cosas ya a esta habitación, ahora es nuestra - dijo acariciando mi cadera

- Enserio? - en mis ojos claramente se notaba una gran ilusión

- Por supuesto amor, ahora también es tu lugar! - me dijo dándome un beso

- Me llamaste Amor - dije ,eso derritió por completo mi corazón, - extrañaba tanto que me llamaras así -

- Eres el amor de mi vida, acostúmbrate -  cuando dijo eso me derretí aún más, - asegúrate de mañana traer tus cosas acá - dijo cerrando los ojos y tratando de dormir

- Si mañana lo haré - contesté y me dispuse a dormir

- Que descanses te amo - dije

- Tú igual te amo -
Así en cucharita empezamos a conciliar el sueño hasta que nos quedamos dormidas, entramos en un sueño tan profundo que ya no supimos más.

Siempre serás mi universo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora