Enamorada del Rubio (Luke Hemmings)

50.Oportunidad.

Chapter 50.

Gire sobre mis talones, para ver mejor de frente al señor Hemmings, en este caso su padre, que ni padre merece ser llamado.
El padre de Luke venia hacia nosotros, debido a que aprecio a su detestable hermano; iba a acercarme hacia él para terminar esto de una vez por todas.

-Espera, ¿Adonde vas?.-Me cogió del antebrazo y me apretó frenando mi paso.

-Iré ha hablar con el padre de Luke, le diré que le deje en paz de una jodida vez.-Le dije al tío de Luke de quien me solté de su agarre violentamente.

-No. Lo estropearas todo.

-¿De qué habla?.

-El aun no sabe que Luke está aquí… -Me informo bajando el tono de su voz en respuesta ya que el padre de Luke estaba a escasos centímetros de nosotros.

-Buen día hermano, ¿Quién es esta adorable jovencita?.-Me miro el señor Hemmings y yo solo trababa de que mi rostro no reflejase un desprecio incontrolable pues quería decirle tantas cosas en ese momento, pues su hijo estaba sufriendo al igual que su madre por su culpa.

-Hermano, ella es la hija del señor Somerhalder, con quien haremos el contrato en este país. -Respondió Bob, por mí.

De inmediato el padre de Luke agarro mi mano implantando un delicado beso en ella haciendo lo mismo que su hermano vaya que hermanos tenian que ser.

-Mucho gusto mi nombre es Andrew Hemmings, pero puedes decirme Andy si se te apetece.-Me dijo y yo solo sonreí forzosamente.

-Bueno mucho gusto de conocerle en persona.-Le salude y él me sonrió ampliamente.

-Eres muy adorable pequeña, bueno me gustaría quedarme a tener una conversación agradable contigo, pero el deber llama, vámonos Bob.

El padre de Luke se despidió de mí para dirigirse a la oficina de mi padre, pero por una extraña razón su tío se quedo junto a mí un momento más.

-Por favor, no quiero que le digas nada a mi hermano, el aun no sabe que Luke y Liz están aquí, aunque parezca malo quiero ayudar a Luke tanto como tú quieres, toma.

Me entrego una tarjeta blanca de presentación con su nombre y números de teléfono. Podia decir que hasta tenia un buen aroma.

-Puedes llamarme a cualquiera de estos números cuando sea necesario, hablaremos luego.-Me dijo el tío elegantemente vestido, mientras se iba tras su hermano para desaparecer por la puerta de la oficina de papá.

Observe la tarjeta que Bob me había dado y sus palabras recorrieron mi mente, ¿Era verdad que no le había dicho nada a su hermano sobre Luke?, No lo sabía, o tal vez era una trampa, pero tendría que decirle a Luke cuanto antes pues puede que después de todo no tendría que irse lejos.

Llegue a mi casa, no había dormido bien desde… ni siquiera lo recuerdo, pues pensar en problemas le quita la cabeza a cualquiera.

Sentí que mis parpados comenzaron a pesar demasiado, no quería cerrarlos pues me sumergiría en un necesario sueño del que probablemente no podría despertar, y era más tenía que regresar al instituto pues estaba en mi hora libre.

No pude mas subí a mi habitación tirándome violentamente a mi cama, quede profundamente dormida hasta ya no ver más la luz que se filtraba por mi ventana.

Desperté debido a unos fuertes ruidos que provenían de afuera, parecía que había una pelea de camiones monstros invadiendo la calle de enfrente. Me asome por la ventana y observe un gran camión que escasamente llegue a lo conclusión que era de mudanza, estaba enfrente de la casa del alado, era la casa de Luke, divise el reloj y ya eran poco mas de las 16:00, no puede ser, falte a las clases que me restaban en el instituto, me quede dormida, no está bien; pero lo que aun es peor es que esos camiones de mudanza estaban frente a la casa de Luke, seguramente para llevar sus pertenecías y dirigirlas a un lugar desconocido para mí.