Enamorada del Rubio (Luke Hemmings)

41.La Verdad Siempre Sale a La Luz.

Chapter 41.

Luke corrió lo más rápido que pudo hacia la casa de la abuela de Rebecca.

-¡Alice!, ¡Alice!.-Pude escuchar como Luke gritaba mi nombre.

¿Estaba alucinando?, Juro que sentí que mi cuerpo comenzó a temblar sin poder yo controlarle, escuchar su voz, ya de por si causaba ese efecto en mí, pero escucharle fuera de la casa de Rebecca incremento mi ansiedad.

-¡Luke!.-Grite a más no poder.

En unos breves instantes escuche un fuerte golpe que provenía de la cocina, aun sin saber cómo abrir la puerta me dirigí a ver qué era lo que había pasado.

-¡Alice, abre!.-Escuche gritar a Luke desesperado nuevamente mientras golpeaba la puerta como si no hubiese mañana.

Me dirigí a la cocina a buscar a Rebecca para que de una vez por todas me dejase salir de allí. No me importaba si tendría que coger sus extensiones y arrancárselas del pelo, pero iba a salir de allí cuanto antes.

En segundos cuando cruce la puerta de la cocina pude observar a Rebecca quien estaba tirada en el suelo, rápidamente detecte un eminente olor a gas, la cocina estaba inundado de él y por obvias razones Rebecca se había desmayado.

El olor era muy fuerte y penetrante, hace unos momentos detecte ese olor pero no creí que fuese tan fuerte, solo bastaría una pequeña llama para que todo el lugar se volara en pedazos.

Pude divisar el pollo que Rebecca había puesto hace unos instantes antes de caer inconsciente, y si no nos apresurábamos a salir de allí este generaría una explosión debido a la llama que estaba prendida, estaba de lo mas asustada en esos momentos sentía como todos los músculos de mi cuerpo comenzarían a paralizarse.

Sin más, cogí a Rebecca de los brazos halándola hacia el comedor y finalmente hasta la entrada de la puerta principal.

-¡Rebecca!, ¡Despierta!.-Comencé a sacudirla levemente dándole unas suaves palmadas en el rostro, pero nada.-¡Luke ayuda!, No podemos abrir la puerta.-Le grite haciendo a Rebecca a un lado.

-Aléjense de allí lo mas que puedan, tratare de abrirla.-Me respondió Luke e hice caso a su petición.

Hale a Rebecca con todas mis fuerzas apartándola de la puerta, podría decir que ella pesaba mucho para lo que se veía o yo era una debilucha.

En escasos segundos aprecie el sonido de los vidrios cayendo por los suelos, Luke había tirado lo que parecía  una roca enorme, haciendo que la ventana junto a la puerta quedase destruida en mil pedazos.

Levante mi mirada y pude observar a Luke, mis ojos se iluminaron al verle y sentí que mi corazón comenzó a latir más de lo debido.
Él trato de entrar por la ventana rota con cuidado pero pude ver que esta era un poco más pequeña de lo usual haciendo que Luke se incrustase algunos vidrios en su brazo derecho.

Luke de inmediato se acerco hacia nosotros, sentí que en ese momento solo estábamos él y yo, me pare del suelo y ni bien entro lo abrace, lo abrace como nunca antes lo había hecho jamás desde que lo conocí, no quería soltarle de mis brazos no quería que se despegara de mi ni por un segundo, pero tenía que hacerlo, teníamos que salir de allí.

Lo bese rápidamente, y le explique que no podíamos abrir la puerta, el podía coger a Rebecca y sacarla de allí, pero no podía por la ventana ya que esta estaba muy estrecha y había un suministro de vidrios rotos.

-Luke, tenemos que salir ahora, este lugar va a explotar.-Asegure.

Él asintió, voltee a ver hacia la puerta y divise a John quien había abierto esta, ¿Cómo podían abrir puertas los dos tan rápido sin forzarlas?. Deje mis preguntas para después y Luke cogió a Rebecca cargándola para luego sacarla de la allí, y así todos salimos de esa casa del terror.