Blue Blood 📌 Kookmin Au

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- ¿Qué hace el aqui? - Namjoon miró por detrás de su prometido al chico castaño, que parecía ser su acompañante - ¿Me perdí de algo...? no recuerdo haberlo invitado.

Jimin tomó el brazo de Jungkook e hizo que se acercara más a ellos - Es mi nuevo guardaespaldas, viene conmigo a donde sea que vaya - Sonrió.

Pero el príncipe no parecía estar feliz con eso ¿guardaespaldas? nadie le había notificado que su prometido tenía uno, y menos que era el mismo Jeon Jungkook. Jamás hubiera dejado que eso sucediera...

- ¿Quien te dio ese cargo? - Namjoon se acercó hacia Jungkook con cara de poco amigos, pero el chico se mantuvo recto en su lugar y una media sonrisa se escapó de sus labios.

- Min Yoongi - Contesto, sabia que no diría nada contra su jefe, después de todo no solo era el trabajo de Yoongi, si no que él también era uno de los mejores amigos del príncipe.

Namjoon apretó sus labios, no podía despedirlo por más que quisiera...

- ¿Pueden por favor llevarse bien solo unos días? - Esta vez hablo Jimin, quien ya no aguantaba aquella situación la cual cada vez se ponía más tensa - Namjoon, vine a estar contigo, casi no notarás la presencia de Jungkook - Acarició el rostro de su prometido - Además, Jungkook hay miles de guardaespaldas aqui, asi que no tendrás que estar pendiente de mi, podras hacer lo que quieras.

- Mi trabajo es estar pendiente de ti, no importa si hay un millón de guardaespaldas cubriendote - Cruzó sus brazos, pudo notar como el príncipe rodaba sus ojos.

- Con tu poca experiencia dudo que puedas compararte a cualquiera de mis guardaespaldas, Jimin estará seguro mientras me tenga a mi a su lado - Pasó su mano por la cintura del rubio, quien no pudo evitar ruborizarse por aquel acto. Namjoon jamás hacía eso...

Jungkook podía notar la forma tan fácil en la que el príncipe podía manipular a su amigo, y eso le molestaba demasiado. Era como si Jimin estuviera cegado por amor, cuando el príncipe lo tocaba o solo decía palabras bonitas, Jimin solo mantenía sus ojos en él como si fuera la cosa más perfecta que sus ojos hayan visto.

- Alteza, tiene una llamada de su abuela - Una mujer que parecía su asistente se acercó apresuradamente al príncipe.

- En seguida vuelvo - Susurro en el oído del rubio, el cual asintió.

Jungkook camino hacia un sofá que había en el vestíbulo de aquel lujoso hotel, Jimin lo siguió para colocarse a su lado. Podía notar que el comportamiento del chico había cambiado con aquella conversación con Namjoon, tenía su ceño fruncido y su mente parecía dispersa.

- Oye, no le hagas caso. Eres muy buen guardaespaldas y confío en ti - Apoyó su mano sobre el hombro del castaño.

Jungkook con un leve movimiento hizo que Jimin sacara su mano - No me importa lo que él diga - Giró su cabeza para encontrarse con los ojos oscuros de su amigo - Estoy molesto contigo.

- ¿Conmigo? - Dijo con sus ojos abiertos por la sorpresa.

- Se supone que no soy solo tu guardaespaldas, soy tu amigo. Pero no me defendiste ni un poco frente a Namjoon - No iba negar que le había dolido la indiferencia de Jimin.

El rubio no pudo evitar soltar una carcajada - Jungkook, no te comportes como un niño - Revolvió su cabello café, pero el chico seguía con su ceño fruncido - Siempre te defiendo, no puedes quejarse por eso.

No podía decir algo tan absurdo como aquello, no solo lo defendía, si no que en dos ocasiones lo había salvado con su propio hermano.

- Pero cada vez que está Namjoon enfrente, te callas como si tuvieras miedo a contradecirle en algo ¿eso te parece bien?