Blue Blood 📌 Kookmin Au

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El castaño se acercó por detrás de su novio para rodearlo con sus brazos, las lágrimas caían por el pálido rostro de Jimin mientras veía la lápida de su hermana. Dos semanas habían pasado desde lo sucedido, y el rubio sin falta cada día traía aquellas flores amarillas que tanto le gustaban a Rose, el dolor seguía allí como el primer día y a veces pensaba que jamás iba a secar.

Jimin se dio la vuelta para encontrarse con el cuerpo de su ex guardaespaldas, y con ambos brazos lo rodeó con fuerza. A pesar de lo ocupado que Jungkook se encontraba esos días, siempre se hacia un lugar en su agenda para acompañar al chico a visitar a su hermana, y Jimin lo agradecía.

Ambos caminaron tomados de la mano hacia el auto, para su suerte podían estar tranquilos ya que en aquel lugar era imposible que hubiera algún paparazzi o algo parecido, por lo que ninguno escondía sus sentimientos cuando estaban allí.

- ¿Qué sucede? ¿Te sientes bien? - Pregunto Jimin al ver que el castaño no ponía en marcha el auto.

- ¿Puedes abrir allí? - Señaló con su dedo la guantera, el rubio frunció su ceño sin entender pero hizo lo que su novio le decía.

Dentro solo había un gran sobre color azul, el cual tomó de inmediato - ¿Qué es esto?

- Ábrelo - Lo alentó.

- ¿Por qué te estas haciendo el misterioso? - Sonrió mientras lo abría con cuidado - ¿Qué es esto? ¿Documentos? - Giró su cabeza hacia él, sin entender.

- Namjoon firmó esta mañana esos papeles, solo faltas tú - Jungkook sacó de su saco una birome y se la entregó - Es tu divorcio, Jimin.

- ¿Estas bromeando...? - Jimin miró nuevamente los papeles, no podía ser cierto... esto... - Jungkook ¿Esto es real? No bromees conmigo - Su novio asintió con una sonrisa-

Las manos de Jimin temblaron a medida que firmaba donde el chico le decía.

- Jimin - Tomo su mentón al ver que no parecía creer lo que sucedía - Eres libre, ya no tienes nada que ver con la realeza - Los papeles cayeron de sus manos, y acto seguido Jimin se abalanzó a los brazos del nuevo rey.

- ¡Gracias!

- No tienes que agradecerme nada - Dijo acariciando su cabello con delicadeza, el perfume de Jimin era tan dulce como el - Pero - Lo aparto un poco de su cuerpo - Hay algo más dentro del sobre.

- ¿Algo más...? - Jimin tenía una gran sonrisa en sus labios, una que no veía hace bastantes días y se sentía feliz de poder ver que sus ojos podían iluminarse de nuevo - ¿Que puede ser mejor que esto? - Dijo tomando nuevamente el sobre que había dejado caer.

- Ya lo veras.

Al tomar entre sus manos lo que había dentro del sobre, Jimin quedó más confundido que antes ¿Un pasaje...? Lo primero que pensó es que irían a unas vacaciones o algo por el estilo, pero solo había uno.

- Es un pasaje a Suecia - Jungkook estaba evitando su mirada - Hay una casa a tu nombre, al igual que un auto, me encargue personalmente que tengas todo lo que necesitas, es un muy buen lugar para vivir, además estoy mas que seguro que Seol crecerá feliz allí....

- Espera, espera ¡Jungkook! - Levantó su voz al ver que el chico no dejaba de hablar - ¿De qué diablos estás hablando?

- Quiero que seas feliz - Fue lo único que salió de sus labios, Jimin vio como mostraba una sonrisa en sus labios pero podía ver que no era genuina, Jungkook estaba triste.

- Soy feliz - Tomo sus manos con fuerza.

- Jimin, sabes en qué cargo estoy ahora... - Mordió su labios - Cada día que pase nos veremos menos porque no tendré tiempo, tu te quedaras dentro del palacio casi todos los días... Seol crecerá como alguien de la realeza, tendremos que esconder nuestra relación y también tendrás que verme tener citas para calmar los rumores que puedan inventar... Jamás podremos casarnos y tú habrás perdido tu libertad que tanto deseabas - Le dolía decirlo, pero eso era la realidad.

Había estado pensado cada noche durante los últimos días que es lo que sería mejor para ellos, ambos estaban exhaustos y por mas que se amaran tenían que pensar más a futuro, seguir arriesgando todo para estar juntos o vivir sus vidas como quisieran hasta que llegara su momento.

- Jungkook... - Jimin corrió una lágrima que caía por el rostro de Jungkook.

- Una vez me dijiste que las mejores vacaciones que tuviste fueron en Suecia, y que algun dia te gustaría vivir allí - Sonrió al recordar una de sus tantas charlas - Y creo que el mejor lugar para que empieces de cero después de todo lo que te sucedió.

- Jeon Jungkook eres tan perfecto que no puedo creer que existas - Lloriqueo para volver a abrazarlo - Gracias por esto, gracias por todo lo que has hecho por mi - El castaño beso su mejilla.

- Gracias a ti por enseñarme lo que es el amor - Dijo llevando una de sus manos a su pecho - Puede que no haya sido tu primer beso, pero todavía tengo esperanzas de ser el último.

- ¿De qué hablas? - Jimin acercó sus rostros, haciendo que sus narices se rozaran - Tu fuiste mi primer beso en aquel bosque, yo tenía los ojos vendados y Namjoon iba a jugarme una broma... pero tu no lo dejaste - Sonrió, esa era la primera vez que le contaba la verdad detrás de ese primer beso - ¿Lo recuerdas?

- Espera ¿Eras tú? - Jungkook abrió sus ojos con sorpresa, aquel momento era algo borroso gracias a que había sido hacía bastante tiempo ¿Pero ese niño había sido Jimin?

- Si, fui yo - Beso lentamente los labios del chico, quería disfrutar cada parte de ellos - Asi que estare esperando a que seas el último, no importa cuánto tiempo tarde.

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