20. ¿divorcio?

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Jungkook, una vez hecha su amenaza se acercó al bolso de Halo. Buscó su celular impacientemente hasta que lo encontró.

-¿Fuera de línea? ¡es en serio! Por eso es que el gps no registró mas allá del hotel. Te llamé, te escribí... y estabas ¡¡¡fuera de línea!!!- volvió a enfurecer tirando en dispositivo al piso con tanta fuerza, destruyendolo completamente. Por fortuna, la tarjeta de memoria con la valiosa la información sobre su esposo ya no estaba insertada y la había dejado a buen recaudado con J Hope no sin antes pasar una copia a su abogado y otra copia a Nina.

Halo seguía llorando y cuando vio la acción de Jungkook estrellando su móvil gritó de miedo, dio un sobresalto encogiéndose de hombros y abrazándose a ella misma haciéndose a un lado.

Esa reacción hizo que Jungkook se arrepintiera al siguiente segundo de verla aterrorizada. No quería asustarla ni provocarle alguna clase de temor. Se había dejado llevar por la rabia tanto que no midió sus actos.

Respiró hondo sorprendido de su propio comportamiento. Caminó de un lado a otro intentando calmarse.

Halo se aproximó a la puerta saliendo del lugar espantada; siendo rápidamente alcanzada por Jungkook en el pasillo.

-Halo... Halo... amor. Entiendeme, por favor; solo necesito una explicación- su actitud cambió a una más calmada y rogativa- regresemos a la habitación.

Ella se opuso por un momento y negaba con su cabeza.

-No voy a entrar- dijo temblando- estas como un loco.

-Ya me calmé, amor. Regresemos, por favor- insistía, no exigía ahora suplicaba- Ven y hablemos con calma, por favor.

Nuevamente estaban en la habitación, callados. Halo mirando hacia algún punto muerto llorando en silencio y Jungkook mirándola a ella. Sentados a la orilla de la cama.

-¿No me vas a decir nada?- preguntó Jungkook, sin gritar ni exaltarse.

Halo solo soltaba pequeños sollozos resultado del cansancio de tanto llanto limpiando sus lágrimas de vez en cuando.

Jungkook no la había visto así de mal desde cuando se enteró que estaba embaraza sin saber que hacer.

-Halo, sino me dices que te pasa, y lo que hiciste hoy, iré a buscar a J Hope- repitió la amenaza- y no me haré responsable de mis actos.

El silencio en ella reinaba, ni si quiera sabía que decirle, no tenía inventada ninguna excusa ¿cómo se le puede mentir a una persona con entrenamiento policial? No podía y más aún si él la conocía a la perfección.

-Bien, no me vas a decir. Voy a buscarlo- se levantó, cogió las llaves de su auto haciendo ese característico tintineo que suena al momento de que una llave choca con otra.

Ella solo debía ser más audaz sin necesidad de recurrir al engaño y podría tener todo bajo control.

-Espera- alzó la voz deteniendo a JK en la puerta el cual se giró esperando a que ella dijera algo más- vamos a hablar.

Entonces Jungkook, dejó las llaves en su lugar y regresó a sentarse en el sitio donde estuvo anteriormente .

-Te escucho, dímelo mirándome a los ojos.

Ella respiró hondo, debía escoger bien las palabras que iba a decir. Levantó la cabeza cediendo a la solicitud de verlo a los ojos.

-Sí, fui con Hoseok al Hotel Signal Seoul pero no es lo que tú piensas, Jungkook- suspiró- no soy tan tonta como para engañarte con el riesgo de perder a Suni - volvió a suspirar- Solo una persona estúpida arriesgaría a su familia por una aventura de unas horas- habló con firmeza obviamente esa era una sátira hacia él.

Frenesí II (+18/Jimin, Jungkook y tú) SEGUNDO LIBRO ⚠️EN CURSODonde viven las historias. Descúbrelo ahora