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Jimin no solo era un buen chico, pues Jeon confirmaba que éste era una ternura cuando quería.

Pues había divisado a Park del otro lado de las ventanas de su salón de contaduría, no entendía que hacía el pequeño omega en el sector universitario, pero le había hecho mucha gracia como éste lo miró como por cinco segundos, para después tratar de enfocarlo mientras fruncía los ojos y cuando se dió cuenta de la presencia de Jeon no dudó en sonreír y agitar su mano en la dirección de éste.

Una escena tonta que solo duró unos segundos.

Pero lo costó casi quince minutos a Seokjin analizar la situación.

El castaño estaba en un debate mental, no era una sorpresa que jóvenes de cualquier edad se le declararan a su mejor amigo, pero éste tenía el leve presentimiento que su mejor amigo estaba llegando a una cierta confianza con el pequeño omega de cabellos rubios.
Hacía casi dos semanas Jimin encontraba cualquier excusa para esperar a Jeon después de sus clases en la biblioteca, todo estaba bien y normal con eso pero... ahora el pelinegro esperaba disimuladamente que el parlanchín de Park lo acompañara hasta la salida del edificio.

Una amistad entre ellos? Muy posiblemente para Jeon no sería una molestía, pero Seokjin no olvidaba el exámen en el que Jimin había escrito sus iniciales junto a las de su mejor amigo en un corazón.

Jk? JungKook?.

Coincidencia? No, eso no existe.

— Oye, Jungkook.

— Mm.

— Que te traes con el rubio enano?.

Jeon alzó rápidamente su vista y acomodó sus gafas, dejando de lado la actividad que el profesor estaba esperando pacientemente hacía unos segundos. Miró a su amigo y señaló detrás de el, en donde justamente había un omega de cabellos rubios que parecía masticar su lapiz, Jin entendiendo la pregunta silenciosa negó con una mueca de asco.

— No ese — miró con disimulo como al pobre lapiz le faltaba poco para morir — Hablo de Jimin.

— oh Park... nada, por qué?.

Jin estaba con el ceño fruncido, pues aunque no parezca ambos chicos solían contarse todo, desde lo que les parecía el clima del día hasta cuales betas u omegas se declaraban antes de siquera intercambiar palabras con uno de ellos. No era malintencionado, pero por más guapos que fueran y lo acostumbrados que podrían llegar a estar, seguía siendo algo raro tanta atención incluso ya en la universidad.

— Son... amigos, no?.

— No lo creo, de lo único que hablamos es de sus exámenes — informó desinteresadamente mientras completaba las actividades como si fueran fáciles.

— Es lindo.

Jeon miró un punto fijo en su hoja y trató de no olvidar la cuenta que estaba haciendo en su cabeza, la guardó en un espacio de su cerebro y procedió en analizar lo que su amigo había dicho.
Pues ese era su don desde que Seokjin era su amigo, el castaño lo interrumpía aunque estuviera en una situación de vida o muerte.

— No lo he mirado mucho, la verdad, pero si es tierno.

— Ya veo, he oído que Jongin de su curso gusta de el, serían una pareja media extraña, no crees?.

Jeon asintió sin siquiera escucharlo y Seokin bufó ante su mal intento de que su amigo tuviera una reacción, pues claramente en sus años de amistad no lo había visto ni una sola vez celoso.

— Pues para mi si es bonito — confirmó el castaño mientras apoyaba su cabeza en el banco — Tiene lindos labios, su cabello brilla mucho, sus mejillas parecen absorber su cara y sus manos parecen de un niño — mostró sus propias palmas y Jungkook solo asentía dándole la razón mientras bebía agua — y tiene un culazo.

Baby's Crush 과즙 KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora