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Jeon se levantó, como siempre 7 a.m, o bueno eso pensó.

Al estirar sus brazos de inmediato supo que primero, no estaba solo, y segundo, tampoco estaba en su cama. Manteniendo la calma abrió los ojos frunciendo un poco al ceño al sentir luz chocar contra éstos, cosa que se posicionó en segundo lugar de sus problemas cuando notó una revoltosa cabellera rubia contra su pecho.

Pudo haberse tomado unos minutos para apreciar al omega dormir, o quizás usar ese tiempo para hacerle un desayuno, o algo más importante.

Pero no.

Todo su humor mañanero se vió atropellado por un suave aroma a rosas que inundaba la habitación, claramente no era de Jimin y por ende de el tampoco.

Por lo tanto sin más preámbulos giró su cuello unos ciento ochenta grados para apreciar a la omega de cabello negro, metro sesenta y tez blanca mirarlo con una expresión bastante calmada para ser la mismísima señora Jeon. Jungkook recorrió rápidamente su vista al lugar notando que su madre había ordenado la pequeña "cena romántica".

— Qué... — se calló cuando la mujer apoyó su dedo índice en sus labios, haciéndole una seña de que se callara.

Solo le basto al alfa un cabeceo de su madre para entender que lo estaba obligando a seguirla hasta la cocina, todo para que Jimin siguiera durmiendo. Se safó del agarre del omega, tratando de ignorar la incomodidad de no tenerlo cerca, y entró a la cocina después de la mujer.

— Qué haces aquí tan temprano? — Preguntó el alfa mientras rebuscaba en su heladera algo dulce para preparar, una busqueda difícil por cierto teniendo en cuenta que a los dos alfas de la casa solo les gustaba lo amargo.

— Temprano? — miró su reloj — Hijo, son las doce del mediodía.

— Oh bueno, qué haces aquí? — preguntó tratando de ignorar que había dormido cerca de doce horas.

— Venía a cuestionarte el por qué cancelaste nuestra cena ayer, pero ya ví por qué — sonrió acercándose a su hijo para acomodar su cabello — Quién es el? Es bonito.

— Es Jimin.

— Ah si? Estudia contigo? — empezó a merodear por la cocina.

— Eh... algo así?.

— Me lo estás preguntando? — cuestionó extrañada la mujer ante la actitud perdida de su hijo.

— Mamá, realmente no creo que sea el momento para éste tipo de preguntas puedes...

— No me vengas con eso! Quiero saber!.

— Lo sé, pero...!

Jungkook se calló unos segundos mirando hacia la puerta, la mujer frunció el ceño ante su mudez y lo siguió en el momento en que éste salía de la cocina, encontrandose con el pequeño omega con ambas manos en su teléfono, un poco pálido.

— Tú debes ser Jimin!.

El nombrado rápidamente se recompuso y Jungkook medio sonrió notado lo nervioso que estaba ahora, hizo una rápido reverencia hacia la mujer la cuál sonreía de manera casi escalofriante.

— Soy Jeon Jihye, la madre de Jungkook — miró al omega "disimuladamente" notando casi al instante los rasgos tan aniñados que tenía éste.

— Creo que lo sabe, pero soy Park Jimin, un... amigo se Jungkook.

— Oh ya veo — sonrió e hizo una silla hacia atrás — Ven, siéntate.

Jungkook decidió no abandonar a Jimin, por lo que su madre se dió la libertad de buscar los cafés que había preparado esa mañana.

Baby's Crush 과즙 KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora