En donde Park Jimin siente un fuerte crush por su sunbae de la universidad, un alfa de fuertes rasgos que no sigue el estereotipo de "dominante".
Pues Jeon Jungkook era el gran ejemplo de sencillez, toda su vida tranquilamente planificada, sin sent...
Jungkook se encontraba totalmente estresado y confundido ante sus dotes de enseñanza.
Park Jimin no solo era un tierno omega que parecía coleccionar plumones de todos los colores, pues según el pelinegro Jimin parecía tener un serio problema a la hora de prestar atención y eso parecía estresarlo de alguna manera. Los primeros tres días el rubio había sido un excelente aprendiz, prestaba atención y podía repetir sin problemas las definiciones que Jungkook le enseñaba.
Pero los últimos días un alfa llamado Jongin parecía robarle toda la atención con sus bromas para hacerlo reír, cosa que a Jungkook no le molestaría si no fuera porque había interrumpido la misma explicación tres veces.
— Jimin, por favor concéntrate — murmuró el pelinegro mientras observaba al menor tapar su boca con sus manitos.
— Lo siento, es que... — Jongin hizo bizco detrás de Jeon provocando que nuevamente empezara a reír.
Para su suerte Daehyun regañó al ruidoso alfa y Jungkook pudo proseguir con su explicación, la cual según el estaba siendo escuchada.
Pero no.
Jimin estaba nuevamente embobado con los suaves rasgos del pelinegro, para ser un alfa lo único que el pelinegro demostraba era ser un chico paciente y comprensivo, era muy puntual a la hora de asistir a la biblioteca e irse por igual, por lo que el rubio deducía que tenía muchos más asuntos a parte de dar clases gratis.
— Sunbae!.
Un chillido sobresaltó al rubio, el cual al levantar su vista se encontró con una linda omega que miraba a su Jungkook con ojos soñadores y notorios nervios.
Jeon alzó una ceja en su dirección al ser interrumpido nuevamente y la chica tomó ese gesto como un pase para seguir hablando.
— oh! Pasaba por aquí y me preguntaba si estaba libre para ir a cafetería y...
Tic, ojo, tic
— Me perdí — anunció Jimin refiriéndose a la explicación que le estaba dando el pelinegro.
La chica frunció el ceño ante eso y Jungkook aclaró su garganta para dejar reposar los apuntes sobre la mesa.
— Estoy algo ocupado ahora, estamos en medio de una clase.
La omega alzó una ceja algo molesta mirando al rubio, el cual le regaló una sonrisa algo burlona, provocando que ésta se ofendiera de sobremanera y simplemente se diera media vuelta para salir del lugar.
Jungkook pareció no darle importancia y siguió con su explicación, ahora si teniendo toda la atención de Park en sus palabras.
Pero no duró mucho, ya que los ojos de Park parecieron brillar y su corazón agitarse en el momento en que notó nuevamente la cercanía de ambos, pues ya no estaban sentados de manera enfrentada, ahora solo eran divididos por la esquina de la mesa, por lo tanto si Jimin se acercana unos centimetros sus codos podían chocar "accidentalmente".
— Sunbae — lo llamó el rubio y éste detuvo su explicación para mirarlo.
Muy mal, Jimin ni siquiera recordaba porque lo había llamado e interrumpido todas sus palabras, pero sintió que casi valía la pena cuando los ojos de Jungkook miraron los suyos esperando que siguiera hablando.
— Y-yo... — miró a su alrededor buscando una respuesta y sus ojos chocaron con el reloj de la pared — Oh! Ya es hora de que se vaya.
Jeon alzó una ceja mirando también el reloj y suspiró mientras pasaba todos los apuntes que todavía faltaban por ver, no estaba muy seguro de que terminarían en esos pocos minutos que quedaban y eso lo ponía de mal humor, sin dudas pensaba haber calculado bien el tiempo que le tomaría estudiar toda una materia con Park.
— No creo poder venir mañana — admitió mientras comenzaba a guardar sus cosas — Pero podemos encontrarnos en la tarde, en el lugar que quieras.
Algo vibró en el pecho de Jimin mientras guardaba sus cosas e hizo una mueca mientras buscaba en su cabeza un buen lugar para poder juntarse con Jungkook.
— Podemos ir a mi... a mi casa? — preguntó apretando con fuerza las correas de su mochila.
— Está bien — le entregó un pequeño papel perfectamente doblado — Mándame tu dirección por allí, bien?.
Para cuando el rubio reaccionó ya se encontraba corriendo para alcanzar al pelinegro antes de que le diera un ataque de felicidad y empezara a gritar la veces que renovaría votos con Jungkook una vez que se casaran.
Ya caminando al lado del pelinegro, lo miró de reojo y notó que éste miraba su teléfono mientras tecleaba algo en el.
— Necesitas algo más, Park?.
— Yo... también voy a la salida.
Eso era algo ya matutino para Jungkook, el rubio lo acompañaba por los pasillos hasta llegar a la salida del edifico A, no se quejaba ya que el menor parecía caerle bien y al ser tan parlanchín muchas veces terminaba escuchando pequeños datos que éste tiraba de manera torpe.
Ambos se detuvieron en la gran puerta y observaron como parecía caer la de dios, ya que las gruesas gotas de agua casi no dejaban ver más allá de una cuadra de distancia.
Jimin frunció el ceño viendo como el bus se acercaba a la parada frente a su edificio, ya sabiendo que Jungkook no tomaba eso, sino el metro, suspiró frustrado al no querer dejarlo solo, bajo la lluvia.
— Sunbae — lo llamó abriendo su paraguas y extendiéndoselo — sontengame.
Jungkook, algo desinteresado sostuvo el paraguas celeste con nubes y frunció el ceño cuando Park empezó a correr hacia una parada en la cual se estacionaba un bus.
— Pero...
— Nos vemos mañana, sunbae!.
Jimin se despidió con la mano a lo lejos y subió al bus, mirando por la ventanilla como Jungkook empezaba a caminar bajo la lluvia pero ahora siendo protegido por su magnífico paraguas.
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Perdí algunas anotaciones sobre éste fic y estoy medio confundida acerca de los futuros capítulos, espero que el avance no sea muy tedioso, quiero darles un acercamiento no tan brusco al lov.
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