Flicker - Niall Horan [Terminada]

Capítulo 32

Miércoles, Noviembre 29, 2017.

Llegué a casa luego de dejar a Madison en la escuela y lo primero que hice fue dirigirme hacia la cocina a prepararme un café, lo necesitaba. 

En últimas noticias, por fin hace unas semanas había conseguido un trabajo como animadora de eventos. No era para nada fácil y también es bastante agotador. Ahora que lo pienso mejor, creo que necesitaré dos tazas de café para sobrevivir el resto del día. Quizás estoy exagerando un poco y no es tan malo, después de todo, pagaban bien ya que la gran mayoría que organizaba ese tipo de eventos eran personas con bastante dinero y normalmente los eventos a los que me tocaba asistir eran para niños y no duraban tanto tiempo, así que no puedo exigir nada más. Aunque eso no quiera decir que no sea lo suficientemente agotador.

Encendí la laptop que aún estaba sobre el mesón ya que anoche me había dado por escribir y la había dejado ahí. Un click sonó avisándome que el café estaba listo, así que lo serví en una taza y comencé a tomarlo mientras me hacía unas tostadas.

Ya cuando mis tostadas estaban listas, me senté a comer tranquilamente mientras me distraía poniendo algo de música o simplemente leyendo algunas noticias. Como era de esperarse, Niall apareció en ellas. Sonreí al ver su hermosa cara en el sitio web. No dudé en enviarle un mensaje a Niall. Las cosas estaban funcionando nuevamente entre nosotros y ya no teníamos ese problema de distanciamiento, quizás no nos veíamos tanto como quisiéramos porque nuestros horarios de trabajo chocaban, pero al menos hablábamos más seguido y eso era más que suficiente para mí.

Seguí distraída en la laptop cuando ya había terminado de comer. Le di un último sorbo a mi café con la intención de comenzar a arreglarme ya que en dos horas tendría que estar en el lugar del evento, pero me di cuenta de que mi correo tenía un circulito rojo avisando que tenía un correo. Fruncí el ceño. No tenía idea desde cuándo no revisaba el correo, tampoco es como si lo utilizara, realmente. Abrí la bandeja de entrada desinteresada ya que había correos sobre promociones y cosas que sinceramente no me interesaban, pero me fijé en uno en específico que decía IMPORTANTE. Volví a fruncir el ceño una vez más y abrí el correo sin tantos rodeos. Seguramente era otra promoción estúpida.

Comencé a leer, y en medida que iba avanzando, estaba cada vez más y más confundida.

"Estimada Allyson Bennett:

Soy Rebecca Stone, representante de Magic Magazine.

Hace unas semanas recibimos con mucho honor tus increíbles manuscritos referentes a diversos temas. Creo que tienes un don infalible y soy la persona indicada para ayudarte en el tema. Me pregunto si estás a disposición para que hablemos un poco con respecto a lo ya planteado.

Nos complace anunciarte que somos una empresa de medios de comunicación que busca llegar a más personas con la meta de informar diariamente acerca de las celebridades e historias de interés general. Si deseas conocer más sobre nosotros, puedes visitar nuestro sitio web.

Estaré esperando tu respuesta con gusto.

Rebecca.

(24/10/17)"

No entendía qué jodidos había sido eso que acababa de leer. Estaba atónita al frente de la pantalla y no sabía exactamente a qué se refería la chica del correo. ¿Y si realmente era un acosador? Además, ¿de qué manuscritos está hablando?

Mi curiosidad me traicionó un poco y no dudé en buscar la página a la cual hacía referencia. Me llevé con la sorpresa de que sí era real el sitio web y de hecho, era una revista que hablaba un poco de todo, inclusive tenía una sección exclusiva para escritores que al parecer era bastante famosa por hablar sobre temas un poco polémicos. Nunca había escuchado hablar de esta revista, pero sin duda se veía interesante. Me di cuenta del particular nombre de "Rebecca Stone" y al lado un número telefónico. No sabía exactamente por qué esta chica se querría contactar conmigo, es decir, jamás había oído hablar de esa revista hasta hoy. No lo sé, no tengo ni idea y creo que es mejor pensar en esto después ya que tenía que comenzar a darme prisa antes de llegar tarde al trabajo.