Bajo la mesa ✓< Jinkook > (Finalizado)

Diez

Gracias por el
apoyo a esta historia💕

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—Esto está delicioso —Jin dijo mientras tomaba un trozo más de su lasaña de espinacas. —Creo que este será mi último plato. 

Yoongi se burló de aquello ya que Seokjin era un tipo que comía demasiado, y más aún lo hacía cuando la comida era realmente buena. 

—Es tu tercer plato, creo que deberías parar —Yoongi se echó para atrás en su silla y luego tocó su abdomen —estoy llenísimo. 

Jungkook observaba la escena con una sonrisa enorme en sus labios y sus ojos arrugados porque estaba realmente complacido que los dos hombres más importantes en su vida estuvieran hablando así de bien de lo que había preparado esa noche para cenar. Y es que había sido extremadamente cuidadoso con los detalles de la receta entregada hace un par de años por la abuela de Seokjin. Esa mujer le había entregado más que una receta familiar que había pasado de generación en generación.

—Me alegro que les haya gustado, pero lamento decirles que les toca lavar y secar todo lo que utilicé. 

—Yo también cociné —Seokjin dejó finalmente su tenedor a un costado de su plato —solo Yoon debería encargarse de eso, después de todo solo miró y no ayudó ni a revolver la olla de salsa. 

—Eso es cierto —Jungkook miró a Seokjin y alcanzó a detener su mano antes de que esta fuera a parar sobre las manos de Seokjin que estaban sobre la mesa. Aclaró su garganta y su ceño se arrugó mientras trataba de procesar lo que iba a hacer justo frente a su hermano.

Seokjin bajó los ojos a su plato, se había dado cuenta de lo que Jungkook iba a hacer y estarían en problemas si Yoongi también lo hubiese visto, pero su amigo era más bien despistado en esos aspectos por lo que el secreto de ambos estaba a salvo. 

—¿Cerveza? —el menor se levantó de la silla y rodeó la isla de la cocina para pararse frente al refrigerador. Cerró sus ojos dos segundos para calmar los latidos de su corazón. 

—Yo no quiero Kook, gracias. Lavaré los platos y me iré a la cama. Mañana trabajo temprano. 

—Tienes razón, en ese caso te ayudaré con los platos. 

—Bien, porque odio lavar loza, aunque me molesta menos que secarla —Yoongi se levantó y comenzó a quitar los platos sucios. 

—Yo no tengo problemas con eso en realidad. Con nada en general, creo que las labores de casa se me dan bien. 

—Estás listo para casarte. 

Seokjin le golpeó la nuca a su amigo mientras este reía. —¿Que dices tonto? 

—No te hagas, siempre has querido casarte y tener hijos. 

Los ojos de Jin viajaron hasta el tercero en la habitación y que estaba en completo silencio mientras se tomaba su cerveza. 

Jungkook le devolvió la mirada y Seokjin no estaba seguro que estaba viendo en los ojos del otro. 

—Soy joven todavía. Puedo esperar —Jin se giró y buscó uno de los delantales que estaban colgados a un costado de la alacena. 

—¿Esperar? —Yoongi se rio entre dientes —¿a quién vas a esperar? Parece que me estás ocultado cosas… No me digas que ya encontraste repuesto para Mark. 

Seokjin volvió a golpearlo y esta vez se aseguró de que doliera —no es un repuesto. No hables así. 

—Jodido Kim, ¿cómo mierda puedes pasar de relación en relación? ¿acaso no te aburres?