Anhelo y Deseo.

CAPITULO 4.

*Alex*

 Emocionada como nunca antes, conduzco a casa de Benny. Estoy emocionada por la posibilidad de voltear este juego a mi favor. Nick me traiciono y ahora yo puedo vengarme de él al quitarle todo su dinero y regresarlo a su verdadero dueño, además de que al fin me liberare de ser la mensajera personal de Benny. Si esto funciona, finalmente, seré libre.

― ¿Por qué vamos a casa de Benny? ―pregunta Jared a mi lado.

 Por la emoción y la concentración al idear este maravilloso plan, olvide por completo que Jared va a mi lado. Él está mirando por la ventana, tal vez así reconoció el camino hacia donde nos dirigimos. Y ahora que lo pienso, Jared, puede ser de ayuda o un estorbo en este plan. ¿Debería decirle mis intenciones antes de hablar con Benny? Creo que sí. Es obvio que Jared es de la confianza de Benny, así que tal vez sí me sea de ayuda.

 Sin embargo, todo esto implica cierta confianza, y aun no conozco del todo a Jared. Además, ¿y si me pregunta por qué quiero hacer esto? No puedo ni quiero contarle lo sucedido con Nick. Eso es algo que me gustaría tener en secreto, pero si le pido que me ayude estoy muy segura de que Jared me pedirá una razón por la que hare lo que planeo hacer. Mierda, ¿por qué la vida es tan complicada?

―Quiero hablar con él, por eso vamos a su casa―explico sin dejar de ver el camino.

― ¿Y por qué tan de repente quiere hablar con él?

―Porque se me acaba de ocurrir algo que a él le interesara y le beneficiara.

― ¿Y qué es?

― ¿Por qué haces tantas preguntas? ―exclamo irritada.

―Tranquila preciosa, solo tengo curiosidad―me dice con expresión inocente.

― ¿Quisieras dejar de llamarme preciosa? ―le pido con el ceño fruncido.

― ¿Por qué? ¿Te molesta? ―me pregunta con una sonrisa ladeada.

―Sí, y mucho.

―Entonces te seguiré llamando así―. Su sonrisa se hace más grande.

 «Eres un idiota», pienso poniendo los ojos en blanco. De todos los hombres que trabajan para Benny, ¿por qué me habrá puesto a él como compañero?

―Entonces… ¿qué es lo que le quieres decir a Benny? ―insiste Jared.

 Me agrade o no, necesito a Jared ya que no puedo hacer este trabajo yo sola. Se siente tan mal reconocer esto, pero es la verdad. Debo exponerle mi plan a Jared y obtener su apoyo para que así sea más fácil convencer a Benny.

― ¿Has oído hablar de Nick Anderson? ―le pregunto con expresión indiferente.

 Jared se queda callado por unos segundos, así que volteo a verlo. Jared me mira extremadamente serio y con una mirada extraña, como si estuviera analizando el por qué de mi pregunta. El chico arrogante y casanova que define a Jared ha desaparecido.

―Es quien le robo a Benny, ¿no? ―se limita a decir Jared.

 Por alguna extraña razón, siento que Jared tiene algo más que decir pero se abstiene de decirlo. Me pregunto qué será.

―Sí, el mismo. Y debido a lo que nos conto el señor Nelson, se me ocurrió que tal vez Nick pudo haber hecho lo mismo. A pesar de todo, no lo creo tan estúpido como para haber huido con todo el dinero―le digo―. Hay que reconocer que Nick es lo suficiente inteligente como para, al menos, haber guardado el dinero en un lugar seguro, como si fuera una póliza.

―Creo que tienes razón―dice Jared después de varios segundos de silencio―. Pero, ¿qué lugares son esos?

―Seria cuestión de investigarlo. Sé que Benny querrá hacerlo, le interesa mucho tener su dinero de vuelta.