Anhelo y Deseo.

CAPITULO 13.

*Alex*

He de admitir que la actitud de Jared, después de encontrar el maletín con dinero en la casa de Nick, me desconcertó de muchas maneras, sobre todo porque no sabía la razón... y aún no la sé. Pero cuando lo seguí hasta el parque en el que se detuvo después de caminar como un niño perdido, me di cuenta de que en realidad Jared es un niño perdido. Su mirada, su expresión, su actitud..., todo él está extraviado y sin saber qué hacer. Y la verdad es que yo lo entiendo a la perfección.

Desde que conozco a Jared siempre lo he visto alto y fuerte, erguido y orgulloso, seguro de sí mismo y de su lugar en el mundo. Pero ahora..., ahora parece como si un gran peso lo estuviese oprimiendo. Muero de ganas por preguntarle de qué se trata, pero la cobarde que llevo dentro no se atreve. Además, ni siquiera me incumbe, pero me interesa tanto saberlo para así hacerme una idea de cómo ayudarlo. Estoy por ponerme en pie y pedirle que nos vayamos, cuando Jared comienza a hablar.

―La fecha en que su madre murió―dice como si le doliera pronunciar cada palabra.

― ¿Qué? ¿De qué hablas? ―pregunto confundida.

―La combinación del maletín de Nick, es la fecha en que su madre murió.

De acuerdo, si lo que Jared pretendía era desconcertarme, lo logró. No entiendo como Nick puede ser tan insensible como para querer recordar aquella fecha que debió ser tan trágica para él. Pero lo que no puedo comprender es cómo lo sabe Jared.

― ¿Cómo lo sabes? ¿Cómo es que conoces la fecha en que murió la madre de Nick? ―le pregunto alarmada, sin saber por qué.

―Porque yo estuve ahí ese día―responde mirando a todos lados menos a mí―. Nicholas enloqueció y se fue sin decir a dónde. Su madre estaba preocupada y asustada de lo que Nick podría hacer. Ella iba en el auto... estaba histérica porque Nick la llamó amenazando con irse de casa, incluso menciono el suicidio... Iba más rápido de lo que debía para tratar de llegar a tiempo, el transito era ligero pero... el conductor de un tráiler iba en sentido contrario y en estado de ebriedad... los frenos no respondieron... Ese día alguien murió, pero no fue ni el conductor del tráiler y mucho menos Nick. Ese día todo se fue a la mierda.

Para ser sincera, no me habría sorprendido si hubiese visto a Jared llorar, pues en su voz se reflejaba una tristeza enorme. Sin embargo, su mirada estaba llena de ira. Una ira que trataba de controlar con toda su fuerza, lo supe por la forma en que le resaltaba y latía la vena de su sien y por como apretaba tanto los puños que sus nudillos estaban demasiado blancos.

―Por un estúpido, estúpido berrinche su madre pagó las consecuencias―continua Jared―. Él siempre decía que la amaba más que a nadie, pero si la amaba... Si de verdad Nick amaba a su madre porque la obligo a ir a buscarlo. Además, era su auto. Era el auto de Nick y los frenos no servían, él debía saberlo y aún así... Fue como si... Él prácticamente...

―La arrastro a su muerte―digo completando su frase pues a Jared se le quebró la voz.

«Esto es increíble.» Pienso mientras reprimo una risa amarga. Nick decía que amaba a su madre, pero la arrastro a su muerte. Nick traiciono el cariño y la confianza de su propia madre. La verdad es que no sé si sentirme aliviada de no haber sido la primera, o si sentir compasión por aquella pobre mujer. Pero... no. No puedo sentir ni lo uno ni lo otro. No puedo sentir alivio si Nick aún no recibe su merecido y tampoco puedo sentir la compasión que no quiero que nadie sienta por mí. Sigo como al principio: vacía. El vacio que llevo dentro se ha hecho más grande y extrañamente, también se ha reducido un poco.

―Y ¿por qué te afecta tanto? ―las palabras apenas salen de mi boca cuando ya me he arrepentido. Definitivamente eso no es de mi incumbencia.