Against My Nature [Taekook]

"No grosería"

Tal vez cierto espíritu burlón de esos “ángeles” a los que se refería Yoongi Hyung, confabulatan para hacer que me arrepienta de lo que estaba a punto de decir.

Pero creía... Ojo, creía, que Taehyung no me odiaba tanto como antes.

—Ya sabes Jeon, si la cagas, prometo asesinarte de forma limpia para que tu madre pueda enterrarte enterito.

¡¿Vieron?! ¡Ya no me quería convencer para que me suicidara y él pudiera practicar necrofilia conmigo!

Estoy seguro de que se enamoró de mí para aquel entonces, aquella misericordia solo podía significar: Amor.

—Sí, jefe.

—Y recuerda —se acercó de esa forma en que caminaba, como si sus largas piernas solo supieran deslizarse por el terreno. Así se inclinó y sus ojos marrones rojizos pusieron énfasis en la posterior frase—: no–grosería.

Eso me hizo sonreír.

—No me enseñes esos dientes de conejo, hablo en serio.

«No sé por qué pero lo quiero besar» pensé

«Deberías sentir vergüenza...» también pensé.

«Pero si solo sería un besito inocente» concluí.

Ja.

—Ahí viene, cerebro de alien, enfócate.

Parpadeé varias veces y mi expresión cambió por completo una vez Taehyung se unió al grupo de trogloditas frente a los casilleros. Se saludaron por medio de choques de puños y palmadas en la espalda.

La relación de Tae con el resto era... Rara. Distante pero cercana a la vez. Sabían que no podían contar con él para nada, pero lo recibían como parte del grupo. Fuera quien fuera, idolatraba a Taehyung; todos lo conocían, lo respetaban y hasta lo admiraban.

Eso no es fácil de lograr.

«¿Pero por qué?»

Avancé agarrando fuerte las asas de la mochila. Me hubiese gustado evitar esto.

—Buenos días, Jeon.

Tragué con fuerza y asentí en dirección a Taehyung, quien es observado por todos con sorpresa.

—B–buenos días.

—Vaya, se despertó educadita la fiera —burló Kai interrumpiendo así la incomodidad de todos, les hizo reír nerviosos—. ¿También a mí me desearás buenos días?

«Puedo desear que ardas en el infierno si quieres, también» me supo la boca a veneno, uno que enloquecía por escupir a los ojos de alguien.

Pero vi de reojo el anillo en el anular de Taehyung dando vueltas en su mano derecha. Extrañamente me relajó

—Siento que soy responsable de ti

Tomé aire y alcé la cabeza en dirección a Kai, literalmente deslumbrándolo con mi sonrisa.

—Buenos días.

Y regresaron los cuchicheos.

«Esto puede ser divertido... Hagámoslo divertido»

—¿Pasaste buena noche?

—... Sí... —. Respondió con desconfianza.

—Pues me alegro, yo por mi parte —relamí mis labios y alzé la voz— quería pedirles perdón por mi actitud hasta ahora... No sé qué me sucedió.

—¿Ah no? —se acercó el atractivo alfa de alfas con su manada de caricatura.

—Quiero pedirles ayuda —Taehyung negó con la cabeza sutil y yo bajé más el tono, recordando sus instrucciones «Estás asustado, desesperado. No muestres seguridad, hazles crees que eres menos que ellos» Por eso y metido en el papel, mis manos temblaron al igual que mi labio inferior—. L–lo siento mucho. Yo no quería... No sé qué hacer.