Necesitar a alguien

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La frase estuvo tanto tiempo en mi cabeza que una vez Taehyung salió del baño fue lo primero que resonó y la entendí por completo. La luz diurna ya había desaparecido para ese entonces y la lámpara sobre la mesa de noche era lo único que me permitía verlo una vez cerró la puerta a sus espaldas.

El cabello castaño cayó sobre su frente y ciertos mechones empapados me interrumpieron la vista a sus ojos; pero el brillo en estos era notable, ojos enteramente verdes. Un pijama demasiado grande para mí y perfecto para él que logró hacerle ver incluso más vulnerable de lo que sus temblorosas manos lo hacían.

¿Por qué?

Porque la verdad no fue robada de sus labios sino de la presente realidad. Su cuerpo regó en mi habitación un delicadísimo aroma a canela.

Taehyung es un omega.

—¿Me puedo... Quedar?

La frase no quiso decir “Si me permites te voy a lastimar” sino “Si me dejas solo, te voy a hacer daño, Jeon”

Y yo, contrario a lo que debería alguien que solo se preocupa por sí mismo y su madre, quise llorar.

—Ven.

Arrastrando los pies descalzos llegó hasta la cama y sin dejar de mirarme se sentó a mi lado, recogiendo las piernas con las rodillas a la altura del pecho.

—¿No te importa? —. Preguntó en voz baja.

—Sí lo hace, pero si la pregunta es si das menos miedo, la respuesta es no.

Sonrió con ligereza y fijó la mirada en sus rodillas.

—Me pongo muy sensible en mis celos... Lloro mucho.

—¿Lloras de dolor?

Negó con la cabeza.

—Me siento solo.

—¿A quién extrañas cuando lloras?

Tragó con fuerza y se abrazó más.

—A mi mamá.

—Mhm... ¿Qué más haces? —cuestioné con algo de sorna, para disimular el peso de sus palabras—. No me digas que te metes cosas por el culo, Taehyungie.

—Tsk, sucio. A mi culo no ha entrado nada, si no te callas entrará algo por el tuyo, ¿sabes?

—En tus sueños.

Tae rió en voz baja hasta que le seriedad visitó nuevamente su rostro.

—Aunque llore, no te asustes. El que estés conmigo es más que suficiente.

—Estaré despierto toda la noche —me deslicé hasta su lado de la cama y con algo de presión logré que soltara sus piernas— y no vas a llorar porque te sientas solo.

—No estés tan seguro y ¿dónde crees que tocas?

—Tus brazos Taehyung, no te comportes como un virgen y déjame abrazarte.

—Mhm...

Dejó ir sus piernas con algo de reserva y me dejó que lo acostara para acomodarme en igual posición, con mi cabeza sobre su pecho.

—¿Es normal que esto sea tan aburrido e incómodo?

—Seh—. Contesté sin detenerme mucho a pensarlo.

Su pecho vibraba bajo mi mejilla—: Eres un tonto, Kook.

Sonreí ligeramente y me permití cerrar los ojos para disfrutar con plenitud el jugueteo de sus dedos en mis hebras.

Against My Nature [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora