Shield: Haruko Ishikawa (Todoroki y Bakugo x Oc)

Un mal día lo tiene cualquiera.

Tras el ataque a las instalaciones, dieron a los alumnos de la clase 1-A dos días para descansar y tranquilizarse. Dos días que Haruko paso en su habitación leyendo, de vez en cuanto su mano temblaba con el recuerdo de aquellos gritos desgarradores. Ella quería convencerse que lo hacía para defenderse pero en realidad no estaba tan segura.

Luchó contra los villanos, partió sus huesos como si fueran pequeñas varillas de madera, aquel crujir de huesos... no podía olvidarlo. Una parte de ella disfruto aquel sufrimiento, en realidad, disfrutaba cada vez que usaba sus habilidades. Pero en esta ocasión sentía que no estaba bien, no debía gustarle, no debía sentirse bien o aliviada. 

-¡Haru! -gritó Fuyuka asomada desde la puerta, la había llamado en repetidas ocasiones, pero su hermana pequeña parecía perdida en su mente, en algo oscuro que cambio su expresión. Haruko la miro desde la cama con un libro en sus manos.- Deja de pensar en cosas innecesarias... Te decía que voy a salir a comprar algo para cenar, ¿vienes conmigo?  

Mañana debían ir a clase y no quería ver a su hermana así. Fuyuka sospechaba que tenía a su Haruko en ese estado, pero si ella no hablaba, sino le explicaba como se sentía, no podía ayudarla. 

-Prefiero quedarme. -dijo Haruko un poco desanimada.

-¿Cuanto tiempo piensas quedarte así? ¿Esto es por que unos villanos os atacaron? Por que si vas a ser héroe será tu pan de cada día...

-No es eso...

Era verdad. No era el hecho de que unas personas, unos villanos, la atacaran. Eso le daba igual, podía defenderse, no necesitaba ayuda de nadie. El problema era que ella había atacado a villanos que ni siquiera le habían atacado, o que su respuesta a sus ataques había sido desmesurada. ¿Partir huesos era cosa de héroes? Por que ella lo dudaba. Había perdido el control de sus actos y había hecho justo lo que temía. Pero eran villanos... ¿aquello justificaba su comportamiento?

Por otro lado, nadie había ido buscándola por dejar a unos villanos heridos. ¿Se habrían dado cuenta de aquello?

Fuyuka estaba  esperando que su hermana dijese algo más, como si lo deseará. Últimamente, Fuyuka sentía que ella se estaba distanciando, ya no eran tan unidas como lo eran de niñas y lo extraña. Esperaba que al estudiar en la academia juntas, pudieran retomar el contacto. No sabía en que momento había pasado, simplemente un día se dio cuenta que habían crecido, que cada una seguía su camino... Ahora tenía miedo de que no hubiera vuelta atrás, que no pudiera recuperar a su hermana pequeña. 

El silencio se prolongo hasta el punto que pensó que la conversación había terminado. 

-Es solo... creo que me deje llevar y no se si... actué correctamente. -dijo Haruko dejando el libro que leía a un lado. Había decidido abrirse, contarle a sus hermana parte de sus preocupaciones. Fuyuka suspiró y se acercó hasta sentarse en el borde de la cama, sus alas descansaron sobre el colchón mientras pensaba que decir para animarla.

-Un héroe no siempre sabe lo que es correcto, pero el hecho de dudar y planteárselo marca la diferencia. No todo es o blanco o negro, hay matices y estos no te hacen menos héroe o mala persona. Tú quieres ayudar a las personas del peligro que suponen otras. Ese simple hecho ya te hace un héroe.

-Pero... 

-¿Crees que los vigilantes son menos que los héroes profesionales? -interrumpió Fuyuka.- Son ilegales, si. ¿Para el estado esta mal?, si. Pero su objetivo sigue siendo el mismo que el nuestro. Incluso cuando sus métodos no son convencionales. Tan solo estas en el primer año, tienes aún mucho que aprender, ya lo veras. Es normal. 

Haruko sonrió un poco. Sus palabras la consolaban un poco, la animaban, saber que era normal tener esas dudas la calmaban, aunque aún no tuviera respuestas. Entendía lo que su hermana quería decir. Aún tenía mucho que aprender y darse cuenta de los errores era un paso muy importante. Lo fundamental era que era una heroína, había salvado una vida, la de su profesor Aizawa y la sensación había sido increíble.