Ocho: Presa.

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Se escucha un grito ahogado que hace eco en la lúgubre habitación, una bombilla de luz amarillenta es la única que alumbra el lugar. El rubio ríe ante la vulnerable y patética imagen del hombre atado a la silla bajo la luz.

― ¿Te duele? ― Pregunta con un tono irónico.

Con el alicate en mano tuerce un cuarto dedo hasta el punto en que se rompe.

― ¡Claro que te duele! ― Rie al escuchar un nuevo grito del hombre atado en la silla.

Jungkook es sanguinario, le rompió la nariz, el labio, y la sangre se derrama por su boca y ahoga su voz. Gguk hace una mueca desde la esquina de la habitación, él no disfruta mucho de la tortura, para eso tiene a su hermano quien hace el trabajo sucio mientras él negocia con el dinero y la mercancía

― Déjame ver el tatuaje en su tobillo.

La autoritaria voz de Woong se hace presente en el lugar, él está cerca de Jungkook y su presa mientras sus ojos púrpuras observan la escena, con cuidado de que la sangre no salpique su costoso traje.

― Claro. ― Jungkook accede.

Toma una toalla vieja de la mesa a su lado donde tiene sus herramientas y limpia sus manos de la sangre. Se agacha y afloja las cuerdas que someten los pies del hombre tembloroso. Levanta su pie y sube la basta de su pantalón hasta que se pueda ver el tatuaje ahí. Una clara "M".

― Es la "M" del apellido Manoban, ¿Estoy en lo cierto? ― Woong se inclina levemente hacia el hombre. ― Trabajas para ellos. Dinos lo que sabes, todo lo que sabes.

Su mandíbula tiembla y apesar del dolor en su cuerpo sonríe burlón. ― Están asustados, ¿verdad?

Un golpe en su mejilla corta sus palabras, y lo escuchan toser sangre. Jungkook fija su intensa mirada en él. ― Si vas a hablar, será mejor que lo hagas con respeto. Los que tenemos el control aquí somos nosotros. La seriedad en su rostro logra intimidar al hombre.

― De todas formas morirás, ¿Porqué no hablas simplemente?

El hombre pasa saliva con dificultad y trata de regular su respiración. Mira a los ojos de su enemigo. ― Trabajo para ellos, pero realmente no sé mucho...

Jungkook asiente en silencio, camina bajo la atenta mirada de todos hasta la mesa de herramientas y vuelve hacia su presa con una navaja afilada en manos. Saca uno de sus brazos de la soga que lo tiene atado, y lo clava con fuerza en su brazo sin avisar, atravesando el tendón. El brazo cae como un trapo y la sangre brota rápidamente a la vez que el hombre grita del dolor. Trata de mover su brazo inútilmente.

― Te corté el tendón del brazo, no podrás volver a moverlo. ― Con la toalla vieja limpia su navaja. ― ¿Hablarás o prosigo con tus demás extremidades?

El hombre niega y le escupe sangre en su rostro.

― Yo no les tengo miedo, mis jefes acabarán con ustedes, ¡Morirás tú y tu esposo!

Pobre idiota. El reflejo rojizo en sus ojos grises se hace más intenso y la ira lo llena, el agarre en la navaja se hace más potente. La sangre se salpica por todo el piso alrededor de la silla de madera, los gritos y maldiciones podrían asustar a cualquiera. Jungkook utiliza la navaja para cortar casi todos los tendones en su cuerpo dejándolo como un trapo viejo sobre la silla.

Sin su plena movilidad está a la completa merced de sus captores. ― ¡Habla!

Jungkook tiene sangre en su rostro y cuello, las manos llenas del líquido rojo. Esa mirada en sus ojos solo pasa cuando roza los límites que estableció en su mente para no perder la cabeza. Suelta la navaja y esta cae al suelo, puede sentir la mirada de Woong y su hermano sobre él.

― E-está bien... Ha-hablaré...

Acomoda su corbata ya arruinada por la sangre. ― Encargate, Gguk. Ya está débil así que hablará.

Gguk sale de la oscuridad de la esquina y llega debajo de la luz amarilla del foco. ― Toma un respiro. ― Palmea su hombro cuando pasa por su lado.

Jungkook se apoya en la mesa de madera donde están sus herramientas. Gguk procede a interrogar al hombre que apenas y puede hablar. Luego de minutos el hombre accede, sin aparente energía en su cuerpo.

― ¿Qué sabes sobre la fiesta de máscaras? ¿Cuándo será?

― S-si, lo único... Lo juro, l-lo juro.  este martes, mis jefes invitarán a sus aliados p-por su aniversario...―Toma una respiración y tose.―P-pero solo puedes entrar su eres empleado o a-aliado...

― ¿Tú estás invitado?

― S-si.

― Entonces danos tu nombre, uno de nosotros puede sustituirte.

― Soy... s-soy Min Hyun.

― Bien, Min Hyun, ya no nos sirves... ¿O tienes algo más que decir? ― Alza la comisura de su boca en una sonrisa sarcástica.

― N-no... solo fui guardia en la casa y luego infiltrado pero n-no sé más.

― Perfecto.

A los pocos segundos se puede escuchar un disparo, Woong fue quien tiró del gatillo directo a su cabeza, dejando sin vida al hombre atado a la silla.

― Tenemos la información que necesitábamos, ahora solo falta decidir quién lo sustituirá. ― Guarda su pistola en su cinturón.

― Usted no confía en mí.

Alza una ceja. ― No confío en ambos, Gguk. Quizás lo mejor es que envié a Amy o contrate a alguien.

Jungkook aleja sus manos y cuerpo de la mesa vieja, gira hacia los dos hombres y niega.

― Dejamelo a mí, yo puedo con esto.

Si te cortan los tendones de tu brazo o pierna no podrás mover esa extremidad por completo, dato desagradable pero cierto

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Si te cortan los tendones de tu brazo o pierna no podrás mover esa extremidad por completo, dato desagradable pero cierto.

- Mgg.

(EDITADO: 18/07/2022)

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