Eres mío conejito

Bebé

Después de ese día preferí no volver a tocar el tema sobre el espacio, puse manos a la obra y convertí la sala en otro cuarto más con ayuda de los niños.

Estaba acostado durmiendo, los últimos días el bebé había dado mucha lata sin dejarme dormir por las noches.

El dolor, el fuerte dolor me hizo despertar y retorcerme, las contracciones habían llegado, el bebé venía, por más tiempo que pasará y las veces que ya había dado a luz seguí doliendo igual.

<¡Ahhhhh!>

Grite fuertemente, con cuidado me senté y fui desabrochando mi pantalón, ví a Jin entrar, me miró y supo que el bebé venía, salió del cuarto y luego volvió con una toalla.

<Gracias cariño>

Jin: ¿Ya viene?

Asentí, puse la toalla entre mis piernas, Jin me ayudó a bajar el pantalón junto con la ropa interior, abrí las piernas y luego coloqué la toalla debajo.

<¡Ahhhhh!>

Comencé a pujar, Jin en todo el tiempo estuvo conmigo, seguí pujando y cuando la cabecita ya había salido Jin la tomo.

Jin: Ya falta poco padre, tu puedes

Escuchando sus palabras y los leves chillidos del bebé seguí pujando, veía como Jin iba jalando delicadamente el cuerpo del bebé.

<¡Ahhhhh!>

Con el último grito que salió de mis labios, el último esfuerzo, salió el bebé, Jin lo cubrió con la toalla y limpio su cabecita luego me lo entregó.

Jin: Bien hecho papá, es un hermoso niño

<Gracias cariño>

Besé la cabeza de Jin y luego la del bebé, Nam entro con Hwasa que lloraba en sus brazos, debió asustarse con mis gritos, Jin me cubrió con las cobijas mi cuerpo y Nam me entrego a Hwasa.

<Les presento a su nuevo hermano, Hoseok>

Nam: Es muy lindo

Jin: Otro más a la familia

Nam: Lo vamos a cuidar

Sonreí, Jin tomo a Hwasa en sus brazos, Nam se acercó a mi y se recargo en mis piernas, mientras Jin se recargo en mi brazo, un nuevo integrante había llegado a la familia.