Carta de Silki a Boston

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De: Silki

Para: Boston

Entregar en la central de Escocia, al hijo del Monarca Berna.

Las primeras impresiones son lo que cuentan y sin dudas fuiste el primer lobo en quien me fije, el primer lobo que no me vio como una presa o una loba indefensa. Aún recuerdo lo cabreado que estabas al derramar tu café encima, pero como te dije aquella vez observo aquello  que quiero casar y te observe por mucho tiempo. En los pasillos corrían rumores de quien era aquel lobo que no abandonaba sus aposentos, que nunca se quitaba se quitaba esos lentes y me asustaba estar tan cerca del consejo, del dijo  de Berna.

Me había jurado que solo era atracción, que mi parte humanos jugaban en mi  contra y mi parte animal te quería lejos, en la distancia te observaba, pero aquella mañana con los cachorros encontré una oportunidad para molestarlos. No sabia a donde me dirigía, no sabia por que parte de la casa me encontraba hasta que chocamos y vi lo que con tanto esfuerzo te esforzabas en esconder, mis esmeraldas favoritas. Creo que les debo mucho a aquellos cachorros, a Golden incluso.

Siento que le debo mucho, a muchos y que mi escaso tiempo en este mundo se quedara con las deudas que no pague. Admiro a Golden por entenderme, bien en realidad entiendo el apego que tiene hacia mí y lo use a nuestro favor. Recuerdo la primera vez que vi a Golden, había dejado mi clan para ser libre, era mi primera luna llena sola y sin problemas su padre me acogió, Golden paso la noche conmigo éramos lobos contemplando la luna y cazando bajo su brillo.

Jamás lo vi como algo mas, era un amigo al que siempre podía acudir cuando tenia problemas, había intentado mas de una vez estar conmigo, pero éramos de mundos diferentes, no  podía atarme a un lobo que vivía en grupo cuando quería la libertad que tenían los humanos. Pero contigo Boston, desde el minuto uno en que te vi todo fue explosivo, extraño ver esas esmeraldas que tenias de ojos, dijiste que seria tu perdición, lamento decirte que te equivocaste porque fuiste la mía.

Con Golden nunca fue atracción, era comunicación podía hablar sin emitir palabra, y contigo, seamos honestos éramos atracción, explosión, bestias, animales, la pregunta real seria ¿Hubiera funcionado? Sabes, miles de veces dije si, aunque fuera imposible, nos imaginaba en una casa gigante, siendo libres, ajenos a los clanes, al consejo, a ser lobos, nos imaginé siendo humanos. Criando una hija, la primera de muchos, como siempre me dijiste, tu madre fue un soporte para ti, la loba blanca, cuyo pelaje no brillaba con la luna resplandecía.

Le pondría Kuvasz en su honor, me hubiera gustado conocer a la loba que crio a semejante gruñón, apestoso y maloliente. Te odio Boston, te odio por ser lobo, por ser el maldito que mataría por la causa, por ser fiel al consejo y su próximo líder... Te odio, te odio por no poder dejar de pensar en ti desde que te vi. Te odio por condenarme a llevar algo de ti que no podre conocer, te odio por que no corriste por mí la última vez que te vi, que nuestras últimas palabras fueran un vete al infierno.

Moría por saltar a tus brazos, darte un último beso y decirte por primera vez te amo, pero bien dicen que la luna y el sol no pueden encontrarse, jamás se ven juntos. Solo espero que encuentres el sol, que protejas nuestro rayo y la ames más de lo que te ame.

No pienso en mi partida, solo en las cosas que no dijimos, en que rasgos tendrá nuestra pequeña loba blanca, si tendrá tus magníficos ojos verdes, mi cabello rubio, tu sonrisa o tu obsesión por pensar para ti. No pienso en mí, solo pienso si ella podrá ser feliz, si la protegerás cuando la conozcas, si llegaras a verla, jamás te culparía si le haces daño, es tu naturaleza, pero las cosas deben cambiar, no son letales, son nuestra salvación.

Es el legado que le dejaremos al mundo, es parte de los dos y no puedes cambiarlo. Ambos cometimos errores en aquel  eclipse, nos dejamos llevar e ignoramos las advertencias, no te castigues por mi partida, demasiado lo  hago por ser una cobarde que no pudo decirte la verdad a la cara.

Te amo mi esmeralda, espero verte al lado de nuestra hija y encontrarte en otra vida.

Con amor Silki.



Cuando pienso en esta pareja me duele el final que tuvieron ¿Podrían haber sido felices? La verdad no lo se porque desde el inicio su historia estuvo destinada a Terranova, la loba blanca que los separo.

Me sentí en la compartir las palabras que le quedaron pendientes a Silki con Boston, palabras que no se dijeron y una de muchas cartas que la loba escribió antes de que naciera la cachorra...

¿Te hubiera gustado que Boston y Silki tuvieran un final como Russel y Cocker? 

¿Te hubiera gustado que Boston y Silki tuvieran un final como Russel y Cocker? 

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