KENSIE ━━ remus lupin

022. 𝘃𝗲𝗶𝗻𝘁𝗶𝗱𝗼𝘀

ANTES QUE NADA:
¡Muchas gracias por las casi 3k de lecturas!
Muchas gracias de verdad, espero que sigáis la historia como estáis haciendo ahora. Muchas gracias de nuevo y ya os dejo para que leáis.
Espero que os guste...

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- ¿Me buscabais?- preguntó la voz de Mackensie detrás de ellos. Cuando los amigos fueron a sacar la cabeza se chocaron entre sí.
- ¡Auch!- se quejó el Hufflepuff. Nheo se acercó a Mackensie.
- ¿Estás bien?- le preguntó. Neveen y Alex nunca lo habían visto tan preocupado. Nheo puso sus manos en los brazos de la chica esperando una respuesta. Mackensie se rió.
- Si, claro. ¿Por qué iba a estar mal? ¿Por qué me han dicho unos cuantos Gryffindor que Remus está jugando conmigo y que está coqueteando con otra? ¿Por eso debo estar mal?- dijo la rubia, con un tono rápido pero claro. Nheo giró su cabeza en busca de la mirada de sus dos amigos. El Hufflepuff y el Ravenclaw se miraban.
- Emm... ¿supongo?- añadió Neveen.
- Deberías de estar mal... Emm... ¡Si fuera real!- intentó arreglar el rubio.
Mackensie movió su cabeza hacia la derecha para poder ver mejor a Alex.
- ¿Qué queréis decir con eso?
- Mack, Remus te quiere mucho- añadió Nheo, cogiendo de los hombros a la rubia para que sus miradas chocasen-. Lo que te han dicho los Gryffindor es todo mentira.
Mackensie miraba a los ojos azules del Slytherin.
- ¿Cómo sabes lo que me han dicho en esa sala?- añadió Mackensie, mirando a los tres amigos.
- Nev ha escuchado a unas Slytherins hablando de una broma sobre un Gryffindor y una rubia- explicó el rubio señalando al chico que tenía a la derecha-. Y no queremos que por culpa de unas tontas dejes una relación tan bonita como la vuestra.
- Sois la mejor pareja del mundo- añadió Nev, haciendo pucheros.
- Neveen, no somos pareja- corrigió la rubia, deshaciendo el agarre que le tenía uno de sus mejores amigos. Antes de que Mackensie siguiera hablando escuchó como el rubio y el Ravenclaw se murmuraban algo, le pareció escuchar «Pero lo seréis...»-. Pero bueno, gracias. Supongo. Me había molestado un poco eso, y vine al...
-...mejor escondite del mundo- le terminó la frase.
- Así es Nheo- dije entre risas.
- ¡Kensie!- se escuchó una persona gritar desde el fondo del pasillo.

🐺

Subí las escaleras con toda la emoción del mundo. Tenía tantas ganas de darle mi regalo a la chica más maravillosa del mundo, Mackensie.
Llevo semanas preparando algo para ella. Se lo merece. Quiero ver como le brillarán los ojos al ver mi sorpresa. Que ganas.

Estuve buscándola durante mucho tiempo. Mackensie estará súper aburrida esperándome. No la encontraba por ninguna parte hasta que... BINGO, aquí estaba. Una preciosa libreta
oscura con algunas tintas de colores. No preguntéis como las conseguí porque ni yo lo sé. Hice todo lo posible para conseguirlo.
Desde hace semanas, llevo escuchando a Mackensie diciendo que quería una libreta y tintas para apuntar sus sentimientos.

Ya estaba bajando las escaleras, tan rápido que casi me caigo, cuando escuché muchas risas en la sala común. ¿Qué ha pasado? ¿Y si le han hecho una broma a Mackensie y la estaban humillando? Al pensar eso, baje con más rapidez que nunca.
Examine todos los rincones de la sala. Todos me empezaron a mirar, pero a mi lo único que me importó fue una sola cosa. ¿Dónde estaba Kensie?
- Amara, ¿dónde está Kensie?- pregunté a una de las chicas de alrededor de la chimenea. Ella no paraba de reír.
- Se acaba de ir- rió-. Se ha enterado de los cuernos- volvió a responder entre risas. Hizo un gesto de «entre comillas» con sus dedos en la última palabra.
- ¿Qué cuer...?- empecé a decir, hasta que me di cuenta de todo-. ¡Agg! ¡Esa maldita Slytherin me lo pagará muy caro por esto!- maldije mientras salí corriendo en busca de la rubia.

Empecé a correr sin rumbo. No podría saber donde se encontraba. Pensé en el bosque, pero era lógico que no estaría allí después de lo que nos dijo Dumbledore. Así que solo me quedaba una opción: buscar a Madison.
No sabía donde estaba pero sabía que estaba con Sirius o James, o incluso con los dos. Siempre está con Sirius y James. Al primer lugar que se me ocurrió ir fue al Gran Comedor, y... Bingo. Allí estaban; Maddie, Peter, James, Sirius y Lily. Hace tiempo que no me cruzaba a Lily Evans, pero se la veía muy feliz agarrada de la mano de Potter. Me acerqué a ellos guardando, como podía, la libreta en la túnica.
- Hola Lupin- me saludó la pelirroja con su característica sonrisa perfecta.
- Eh, hola- tartamudeé-. Esto... eh...- me puse muy nervioso sin saber por qué.
- Estas más raro de lo normal Remus, ¿estás bien?- me pregunto la mejor amiga de la rubia.
- Eh, no. O sea, sí. No. Bueno, da igual. ¿Sabéis donde está Kensie?
- ¿Mackensie? ¿No estaba contigo?- respondió Maddie.
- No. O sea, si. Pero, ya no la encuentro, no se donde está- seguía tartamudeando.
- Como le haya pasado algo te juro que...- soltó Sirius levantándose del banco y señalándome con el dedo. No siguió la frase. Madison lo paró.
- Tranquilo, Black. Mackensie se sabe cuidar sola- opinó llevándolo otra vez al banco.
- Eso espero- añadió James-. Como no sea así me junto con Sirius, ¿vale Remus?
¿Mis propios amigos contra mí por perder de vista a una chica? Parece que sí. Pero bueno, si pensara que le estuviera pasando algo a ella también me pondría así. No permitiré que le pase nada a ella. Nunca.
- Bueno, tranquilos fieras- tranquilizó la morena. Como siempre-. Estará con Nheo y los chicos. Prueba a ver en el hueco de la escalera de al final del último pasillo a la izquierda. Al principio, ella y él se escondían allí.
- Vale. Gracias. No me matéis-. Y salí corriendo.

Me dirigí a donde me había dicho Madison y, como siempre, tenía razón. Mackensie estaba de espaldas, en frente del Slytherin y detrás de ellos estaban Nev y Alex. Empecé a correr (lo más rápido que pude) hacia ellos.
- ¡Kensie!
Mackensie se giró. Pude observar como reía. Me encanta verla sonreír.

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