La Maldición del Anillo

294 37 1
                                    

-En una tranquila tarde en donde los sirvientes de la casa Phantomhive se encontraban realizando sus labores, un carruaje se acercaba a la mansión en donde se transportaba Elizabeth y paula (su dama de compañía). Al frenar el carruaje Elizabeth se bajó y entró corriendo hasta donde se encontraba su prometido, el cual se encontraba subiendo las escaleras para dirigirse a su despacho.

~Cie-ruu!!~gritaba la rubia mientras se acercaba a su prometido para abrazarlo y hacerlo girar en el aire.~te daré esto~dice entregándole una caja roja con un listón color vino. ~Vamos, ábrelo.~En el momento que se disponía a hacerlo, la chica se da cuenta que él tenía el anillo que había roto hace un tiempo y lo detiene de abrir la caja~por qué? A pesar de que yo lo rompí.

~Sebastian lo arregló.

~Pero estaba echo pedazos, y ni siquiera tiene rasguños.

~Sí, un mayordomo al servicio de la casa Phantomhive...~dice Sebastián con una mano en el pecho, pero es interrumpido por el conde y Sophie que terminaron la oración.

~¿... cómo no podría hacer algo tan simple?~dicen al mismo tiempo, a lo que el sonríe.

~Exactamente~dice haciendo una reverencia.

~Ya veo... Sebastián lo hizo~dice lizzy algo desilusionada.

~Señorita~dice Paula con el mismo tono que el de su ama.

~Lady Elizabeth... Y esa cajita?~ pregunta Sebastián.

~Ah, esto...esto es... Un secreto!!~ dice arrebatándole la caja de sus manos y lo escondía entre sus ropas.

~No dijiste que me lo darías??

~Jaja ¡te en-ga-ñe!

~Engaño??

~El atraer a un caballero con regalos no es propio de una dama, sería vulgar. Vamos Paula, toca las campanas.~dice muy alegre.

~Sí, señorita.~saca unas campanas y las agita para que suenen mientras dice "chan chan chan".

~Bueno, nos vemos!!~dice mientras se despedía con la mano y desaparece tan rápido como llegó.

~Al final de cuentas, a qué vino?~ se cuestiona el conde.

~Mañana es el cumpleaños de Bocchan.~comenta Sebastián.

~Y por lo que entendí, ella deseaba darle un obsequio~ explica Sophie.

~Acaso no es por eso?~pregunta Sebastián.~Que le parece, Bocchan?? Podríamos hacer una celebración. Además hay otras personas que quieren festejar a Bocchan.~dice viendo a los sirvientes que se ocultaban de tras de una columna, atentos a la conversación.

~Mi cumpleaños... ~dice mientras se acordaba uno de sus cumpleaños que celebró con sus padres~En mi cumpleaños...~ ahora recordaba el día que murieron sus padres y la mansión se incendió. Se gira y se dirige a su habitación sin decir palabra alguna.

~Bocchan~lo llama Sebastián.

~Que ridículo. Tráeme té a mi habitación.

~Entendido.

   >>>Más tarde en la habitación                 del Conde<<<

~Que Elizabeth desapareció??~ pregunta Ciel sorprendido.

~Sí, la sirvienta que la acompañaba dijo que la perdió de vista en cerca de East Line.~ explica Sebastián con una bandeja en mano.

~Vamos enseguida. Rayos! Pero en que estaba pensando?

~Antes de eso, mire esto...~dice enseñándole la carta que estaba en la bandeja, la cuál era de la reina que le informaba sobre el nuevo caso de secuestros a jóvenes damas de la alta sociedad, las cuales eran elegidas por haber portado el diamante de Hope. Una vez dentro del carruaje en dirección de la escena del crimen, el conde ordena al demonio investigar a los involucrados con las víctimas y hacer una lista de sospechosos. Una vez en la escena, baja del carruaje con Sophie.

~Dijo que la perdió de vista por aquí~aclara la joven.

~Por que tengo que traer esto?!~ se queja Ciel con una soga en la mano que amarraba a Pluto.

~Supongo que puede rastrear~ dice subiendo los hombros, a lo que el conde saca el listón que estaba en el regalo que le iba a dar lizzy y se lo da a Pluto para que olfatee, que al hacerlo estornuda y se rasca el cuello con su pie. De un momento a otro sale corriendo y jalando a su vez al conde, el cuál era seguido por la joven, al darse cuenta Pluto estaba siguiendo a una perrita.

~No te pongas cachondo en un momento así!!~dice el conde jalando de la cuerda para que se detuviera.

~Oh!! El que un caballero diga algo así hace que lata mi corazón~dice una voz afeminada.~soy un cazador del amor. Frente a un trofeo atractivo, mi corazón chispea centellas Rojas.

~El!!~dice el conde con sorpresa y enojo.

~Encontré un hombre guapo!!

~Tu!!

~Incluso así, soy un mayordomo de la muerte!~dice haciendo una pose.

~Si realmente eres un cazador, de seguro es temporada baja ¿ no lo crees Grell Sutcliff?~dice Sophie con una sonrisa burlona.

~Tu!! Mocosa!!~dice bajando del tejado en el que se encontraba en un salto y aterrizando en frente de ellos~si sigues con esa actitud nunca encontrarás el amor.

~No me importa, no es mi estilo~ dice subiendo los hombros restándole importancia. En ese momento el conde mira al shinigami con desprecio.

~Eh? Acaso piensas vengar a tu querida tía?

~Cállate~dice enojado

~Además, Sebastián no está. Que podría hacer solo un par de mocosos??

~Yo podría darte una paliza si es lo que quieres. Ya sabes como los viejos tiempos~dice burlonamente.

~Tsk. Tu me debes una!~en ese momento Pluto empieza a gruñir y sale corriendo, Grell creyendo que era a él mueve de forma exagerada las caderas y abre los brazos para recibirlo con mucho amor, ya que decía que era un hombre guapo. Pero pasó por una lado de él y siguió corriendo hasta detenerse en frente a una tienda de cachivaches, el cual en la vitrina tenía una muñeca idéntica a Elizabeth.

~Lizzy!~grita el conde al ver a la muñeca.

~Lista de los que van a fallecer.~ empieza a leer Grell su cuaderno ~NA-493. Titiritero, Drocell Kains.

-Dicho esto, se adentran a la tienda en donde se encontraba Pluto mordiendo la muñeca de lizzy, y se la entrega al conde.

~Esto es...~en ese momento siente una corriente de aire percatándose de que había una puerta abierta en la parte trasera de la tienda, la cual llevaba a los jardines de una pequeña mansión.

~Eh?! No te parece una mansión muy apropiada?~comenta Grell

~Grell, protégeme.

~Qué??~tanto Grell como Sophie quedan impresionados por lo dicho.

~Cumpliré cualquier pedido.

~No creas que soy tan tonto, yo no soy una mujer barata que se mueve por dinero.

~Bocchan, eso no es necesario. Yo puedo hacerlo.

~Lo harás, pero también lo necesito a él. Si lo haces te daré el derecho de hacer lo que quieras con Sebastián por un día.~le dice a Grell.

~Hacer lo que quiera con Sebastián??~se queda pensando un poco~Puedo besarlo?!~ pregunta muy emocionado.

~Haz lo que quieras.

~Puedo meter la lengua?

~Eso depende de cómo lo manejes.

~Muy bien!! Tengo tantas ganas de ayudar que podría morir!!

~Esto no le gustará para nada a Sebastián~dice Sophie para sí misma.

Rosa Con Espinas (Kuroshitsuji) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora