PSYCHO ━━ park jimin

diecinueve

psycho     capítulo diecinueve

          —¿ÉL EN SERIO te dijo eso? —HaNa preguntó incrédula para luego cambiar su expresión a una enojada—. Pero, qué hijo de perra, no puedo creerlo. —La castaña de mechas blancas delanteras se contuvo de levantarse de su lugar e ir en busca de cierto pelinegro de labios gruesos para golpearlo.

           ChaeYoung estuvo de acuerdo con HaNa internamente, algo muy poco usual en ella.

          —Es un poco hipócrita de su parte, teniendo en cuenta que a él le viven haciendo la vida un infierno por haber sido acusado de violación. —ChaeYoung comentó, reflexionando sobre la actitud de JiMin desde su punto de vista de la situación.

         HeeSook resopló, estando lo suficientemente orgullosa, sintiéndose humillada por haber sido claramente rechazada, como para admitir que el tema le afectaba.

          Era una jodida antisocial, se suponía que nada le importaba o afectaba en su vida. Entonces, ¿por qué Park JiMin lograba colarse bajo su piel y tocar todos sus nervios para hacerla sentir de esa manera?

          Era ridículo.

          —Lo peor que pude hacer fue fijarme en un chico con problemas de ira que claramente intenta salvarse de cualquier crítica de la sociedad hacia él por una jodida acusación que claramente no era cierta. —HeeSook escupió enojada, sintiéndose decepcionada de ella misma por permitir que un chico como JiMin lograra tenerla de esa forma.

          —Eso, y sus problemas de personalidad múltiple. —El comentario de HaNa hizo que HeeSook levantara su mirada del juego de jenga en la mesa para fijarla en la castaña de mechas blancas.

          —¿A qué te refieres? —HeeSook preguntó frunciendo su ceño, intentando no demostrar lo confundida que estaba en ese momento.

           —¿El trastorno de personalidad de Park? TaeHyung me lo comentó en una cita que tuvimos hace unos días. —HaNa respondió sin mucha importancia, concentrada en sacar la pieza del jenga sin dejar caer la torre.

           Entonces, HeeSook no pudo evitar enmascarar la mueca de confusión en su rostro.

           —Sí, JungKook también me comentó; dijo que Park pasó por un par de situaciones traumantes en ese centro juvenil en el que lo encerraron por la acusación de violación, y que cuando salió su mente fue creando otra personalidad derivada de la original para protegerse de las pesadillas y secuelas del trauma que vivió. —ChaeYoung respondió sin darse cuenta de la sorpresa que su respuesta generó en HeeSook, la pelirosa concentrada en no dejar caer la torre.

           —¿Otra personalidad? —HeeSook siguió indagando.

          —Ajá. Básicamente de día es el chico bueno, de perfecta moral y perfecta actitud frente a todos, y de noche es el chico malo, al que no le importa si rompe la ley o no, hace lo que quiera en venganza de lo que le hicieron en el centro juvenil. —ChaeYoung volvió a responder.

          —Hablando de chicos malos, HeeSook-unnie, ¿usted no dijo que JiMin había actuado diferente cuando se le acercó en el club? —HaNa miró curiosa a la rubia mayor, dejando de lado el juego de mesa, la castaña comenzando a atar los cabos en su mente.

          —Sí, parecía más confiado y menos reservado... Incluso cuando tuvimos sexo fue particularmente duro. —HeeSook respondió, recordando lo anteriormente mencionado.

          —Esperen —ChaeYoung llamó la atención de sus mejores amigas—, ¿y si el Park malo fue quien se acostó contigo y el bueno no recuerda nada y por eso te rechaza constantemente?

          HeeSook hizo caer la torre de jenga sin darse cuenta.

          —No había pensado en eso.

          TAEHYUNG Y JUNGKOOK se miraron nerviosos entre ellos, para luego ambos mirar a su mejor amigo mayor, el cual había llegado al apartamento que compartían echando chispas por los ojos y humo por las orejas, metafóricamente, de lo enojado que estaba sobre la humillación que le hizo cierta rubia alta de la cual gustaba.

          —¿Pueden creer que gritó eso en pleno consultorio? Técnicamente me humilló frente a todos los que estaban ahí. —JiMin siguió despotricando sobre HeeSook incluso una hora después de que llegara de su cita con su psicóloga, llevando a su boca una mano llena de flips de chocolates para masticarlos con furia.

           —¿Dices que la rechazaste? ¿Por qué? —JungKook preguntó de manera cautelosa.

           —¿Por qué no? HeeSook es una chica linda, pero tiene serios problemas de actitud y yo sinceramente no me quiero involucrar con nadie más desde lo sucedido con HyeMin. —JiMin respondió de manera pesada.

          TaeHyung y JungKook volvieron a intercambiar miradas entre ellos y esta vez JiMin sí lo notó, mirando a sus amigos sospechosamente.

          »¿Qué sucede? —JiMin se detuvo de despotricar para preguntar confundida.

          —B-Bueno, es que —TaeHyung vaciló, relamiendo sus labios nervioso—, puede que hayas tenido sexo con HeeSook.

          JiMin se ahogó con los flips que se estaba comiendo ese momento.

          —¿Q-Qué? Pero ustedes dijeron que yo me había venido directo al apartamento después de salir del club. —JiMin tartamudeó.

          —Sí, bueno, eso creímos hasta que llegamos al apartamento al día siguiente y vimos a HeeSook salir. —JungKook se sintió culpable cuando JiMin se puso pálido.

          —Oh, wow. —JiMin quedó sin palabras ante la nueva revelación—. Eso explica porqué parecía tan confiada conmigo cuando nos encontramos en la cafetería.

          —Sí... —TaeHyung también se sintió un poco avergonzado.

          JiMin dejó la caja de flips a un lado y dejó caer su rostro contra el mesón de la cocina.

          —Oh, dios, ¿qué hice? —JiMin soltó un quejido lastimero.

          —Bueno, técnicamente no fuiste tú sino tu otra personalidad. —JungKook intentó que su mayor no se sintiera tan mal.

          —Eso es cierto. —TaeHyung apoyó a JungKook—. Además, ¿qué tan mal puede ser? No es como si HeeSook gustara de ti o tú de ella.

          JiMin recordó entonces que la rubia le había confesado que él le agradaba, que le gustaba.

           Oh, estaba tan jodido.

           Muy jodido.

          Por la puta mierda, ¿no se pudo fijar en una chica normal?

          —Mi vida es un puto chiste; me gusta una chica con trastorno antisocial la cual se enamoró de mi personalidad diabólica, increíble. —JiMin casi se pone a llorar ahí mismo por la suerte que tenía en su vida.

           Sinceramente, no le vendría mal tirarse de un puente en ese momento.