¡namjoon, yo no lavo tus cosas! © namjin

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Iron man definitivamente era una película entretenida, pero sin duda no era una que Seokjin y Namjoon pensarían estar viendo tan ensimismados luego de negarse por horas cuando Jungkook les pedía verla con él.

El menor se había dormido casi cuando empezó, exactamente dieciocho minutos luego. Y ahí estaban la pareja viendo la pantalla prestando atención a cada detalle que pasaba en la película y riendo, asustandose y opinando en todas las escenas mientras Namjoon de a ratos daba ciertos mimos en el cabello de su novio en su regazo y éste le daba de comer palomitas en la boca, muy atrapados con cada segundo.

—Mmh... ¿hyungs?- Jungkook murmuró adormilado al abrir los ojos por las fuertes risas de los mayores en el sillón grande a su lado, quiénes no le prestaron absoluta atención y sólo miraban la TV con suma atención comiendo del pote gigante de palomitas.–¿Hyungs?–preguntó de nuevo, despertando un poco más mientras los miraba, sin poder captar un gramo de su atención.–¡Hyungs!

Namjoon y Seokjin dieron un respingo enseguida, las palomitas en el pote que sostenía el mayor saltaron, cayendo en el cabello y ropa de Namjoon y algunas en él.

—Jungkook!– Jin lo miró mal al ver el desastre, el menor rió.

—Los que no querían ver la película, ¿eh?

—No juzgues, la trama es interesante a decir verdad.

—Huh si, sólo la trama.–Namjoon revoleó los ojos, estaba frustrado porque su novio no había parado de elogiar al actor principal sonriendo y suspirando cada que hacía alguna escena de acción o hablaba o aparecía. Básicamente toda la película estuvo así, y había dejado de darle el comestible que sostenía.

—Bien, ¿verás con nosotros Jungkookie?

—No debes pedirlo dos veces.– sonrió y se acomodó mejor en el sillón individual. La verdad era que anoche se quedó hasta tarde preparando un par de cosas para el cumpleaños de Taehyung que era en unas semanas, y quería darle algo especial a su novio así que tendría que esforzarse.

Continuaron viendo el entretenido filme, Jungkook se percató de los suspiros que daba Seokjin cuando el superhéroe aparecía y cómo Namjoon rezongaba, y sólo podía reír por aquello.

—Oh, mira esos músculos.– suspiró sonriendo una vez más.

—Es todo.– Namjoon dijo plantando sus manos a cada lado suyo fuertemente, Jin se bajó de su regazo confundido y junto al menor lo siguieron con la mirada hasta las escaleras y luego al cuarto de Seokjin -porque sí, ahora era más de los dos que sólo suyo-; ambos con el ceño fruncido aún que el pequeño se percató después de unos minutos
Aún así, prefería no decir nada y ver cómo se solucionaba eso.

—Él acaba de...

—No me mires a mí, yo ni idea.– se encogió de hombros y volteó al televisor, la película estaba en sus escenas finales pero ya no importaba demasiado.

Seokjin dejó el pote que comían en la mesita de cristal del medio y corrió donde su novio chasqueando la lengua. No entendía porqué se había ido de repente y enfurecido, ¿sería por sus comentarios? él siempre los decía jugando y bien se sabía que su personalidad era de ese tipo, quizás se había ofendido.

Cuando estuvo frente a la puerta alta cerrada, suspiró y entró, sabía que Namjoon no ponía llave porque por más enojados que estuvieran alguna vez, él lo seguía considerando como el cuarto del mayor y su espacio, a pesar de que hasta su cepillo de dientes estaba en el vasito del baño privado.

—¿Namu?– susurró desde el umbral y avanzó despacio cerrando la puerta tras él; todo estaba oscuro. Avanzó hasta la cama, un cuerpo yacía tirado como queso derretido boca abajo, sus cabellos finos tapaban algo de su rostro y sus labios carnosos se veían más abultados al estar presionados contra el colchón, entreabiertos.

Namjoon soltó un quejido ahogado, Jin rió y se acercó a él, lo dió vuelta con fuerza sacada de no sabía dónde y se tiró encima suyo quedando contra su pecho. Namjoon no lo abrazó.

—¿Estás bien?

—Sip.

—No parece.

—¿Tú crees?

El mayor rió, ocultando sus nervios.—Amorcito, tú sabes que eres mucho mejor que ése superhéroe para mí, ¿lo sabes no? Sólo jugaba, no hay nadie más guapo que tú.

Su corazón latió y sonrió leve, había creado un mini drama incoherente y ahora se arrepentía un poco, pero los comentarios hasta indecentes de su novio hacia la pantalla lo habían tal vez enfurecido sólo un poquitín.

Aún que a quién engañaba, él también daba sus miradas.

Suspiró.—Lo sé amor.– besó su cabeza y ésta vez lo abrazó, al fin. Seokjin sonrió más por aquello.–Sé que sólo juegas, pero no me contuve.

—Celoso.–picó su nariz haciéndolo ruborizar leve.–De todos modos...– subió su rostro hasta quedar frente a frente y pasó sus piernas a cada lado de sus caderas; luego sus manos subieron a los musculosos brazos del menor, fornidos y marcados fuertemente. Los acarició y dió un leve apretoncito en el derecho.– tus músculos son mejores.

Namjoon enrojeció un poco más mientras su corazón latió fuerte.
De repente en un movimiento rápido invirtió posiciones y ahora Seokjin estaba debajo suyo mirandolo confundido pero con cierta picardía al igual que él.—¿Tú crees?

—Uh... lo sé.– sonrió y sin esperar más lo atrajo de las mejillas, uniendo sus labios profundo, prometiendo tal vez más tarde llegar a algo más, pero con mucho amor de por medio como acostumbraban.

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𝘍𝘢𝘪𝘵𝘪𝘯❥︎

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