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¿Por qué no le puedo dejar de dar vueltas a todo en mi cabeza?
El cuerpo de Vinnie da calor al mío, estoy medio desnuda y a pesar de que haga frío, es suficiente como para no tener que vestirme.
¿Por qué no puedo simplemente disfrutar de que me gusta lo que tengo con Vinnie y de liarme con el sin ningún tipo de compromiso?
Porque yo nunca he sido así.
Mira que soy estúpida.
Tengo claro que no hace falta estar en una relación, que no está mal besar o acostarte con quien se te apetezca y que puedo disfrutar y experimentar todo lo que quiera, sobretodo mientras soy joven, ya más adelante pensaré en compromisos.
Pero... ¿Por qué me cuesta tanto simplemente almodarme a la situación?
Ayer, tras besarnos en el cubículo, la cosa no acabó ahí, poco a poco nos fuimos quedando sin ropa, y viendo pensé que se nos joderia todo por no tener preservativo, Vinnie sacó uno del bolsillo.
—¿por qué llevabas eso encima?—le pregunté con una risita.
—Pues porque yo ya tengo claro lo que quiero—se acerca a mi oído para susurrar—Follarte, rubita, eso quiero.
Dios.
El ya me lo ha dejado claro, eso quiere, sexo, nada más... Pero....¿Ppr que yo no me parezco conformar con eso? No, no es posible, es totmente imposible el simple hecho de sentir más que atracción física con Vinnie.
Es un idiota. Me trata fatal, siempre aprovecha la más mínima oportunidad para hacerlo, para molestarme y para sacarme de mis casillas. Eso me produce mucha rabia, quiero golpearlo la mayoría del tiempo, o gritarle o insultarle. Si no es por eso, es por la tensión, no aguanto estar mucho tiempo con el.
En mi cabeza recuerdo como nuestros cuerpos encajaban, como nuestros labios se deseaban y se movían sincronizadamente, de una manera tan perfecta que... Es que el y yo somos tan poco compatibles como personas, pero tan compatibles físicamente.
Ese es el problema, que yo no era virgen antes de estar con Vinnie, pero mis experiencias con chicos o chicas, han sido bastante excasas
Al estar siempre moviéndome de un lado a otro, solía llegar a pequeños pueblos a mediados de curso. Ya todos se conocían y yo era simplemente la rarita o la niña rica, que a veces se me acercaba algún idiota por una apuesta o algo así. He ido a fiestas, claro, en las que me he liado con algún chico, pero experiencias muy exporadicas y bueno, cuando van borrachos son tan patéticos en la cama que ni siquiera merecen mención especial.
Pero con Vinnie me ha pasado lo que no me había pasado antes, desear tanto a una persona. Ambos sobrios, hemos disfrutado demasiado juntos estos tres días y ese es el problema, que hoy es nuestra última noche aquí, en las montañas y que no se que pasará con nosotros luego.
