Uno obligado a participar en la mafia de su tío, el otro obligado a ser el perrito de la ley.
¿Qué pasaría si estos se encontraran? ¿Y si se enamoraran?
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-Shipp principal Intenabo
-Todo tipo de contenido +18
-AU
-No lazos sanguíneos
-No se in...
Gustabo despertó solo en la cama, un poco adolorido se rascó los ojos sentándose en esta, rápidamente visualizó una nota en la mesilla, la cogió rápidamente leyéndola.
"Voy a estar todo el día afuera, perdón por no avisar pero estabas muy agusto y no te quería despertar. A las ocho y media vengo, cuídate y cualquier cosa que pase me escribes.
Pd: Te he dejado algo de desayunar en la cocina, si se enfría caliéntalo en el microondas no te lo comas frío"
Gustabo sonrió y dejó la nota en la mesilla, se levantó cansado y fue hacia la cocina, allí había un café con algunas tortitas, agradecido Gustabo comenzó a desayunar, hasta que recibió un mensaje de su tío.
*Tío*
-Ya he visto que te has levantado, en 2 horas te quiero aquí
-Vale tío, buenos días
(....)
Gustabo se aseó y salió a dar un pequeño paseo antes de ir a casa de su tío, también le mandó un par de mensajes a John agradeciéndole el desayuno y dándole los buenos días.
Pasaron las dos horas y el rubio cogió como siempre sus cosas, y salió de casa, no sin antes avisar a John.
Llegó y esta vez le llevaron a una habitación. Dónde se encontraba Johnny junto otro hombre. Los guardias tiraron al rubio a la habitación y cerraron
-Quién es él? Este no era el acuerdo, no me dijiste que otros también lo harían. -Johnny rio
-Ya bueno, parece que ese detallito se me olvidó... Trae las pastillas.
-Las de ayer? -Preguntó el rubio, Johnny asintió y el otro hombre le obligó al rubio a tragarse la pastilla
-Antes de nada sobrinito, quiero que hoy folles con John. -Gustabo no dijo nada, estaban jodidos, muy jodidos. -Si no, tendré que poner cámaras.
-Cuándo me quitarás el micro? No me siento cómodo haciéndolo con esto
-Cuando me salga de la polla. Ahora ven aquí, ya sabes como va todo.
Pasó casi una hora, donde ya sabréis que pasó con el rubio.
Ahora este se encontraba medio dormido en el suelo de la habitación, ya que no le habían dejado acostarse en la cama, su tío se había ido pero el otro hombre no.
Este al verlo tumbado bocabajo se puso encima suyo masajeando su culo.
-Ya basta, me tengo que ir. -Pero el hombre no paró, Gustabo intentó levantarse pero el sujeto no le dejó, puso sus manos en las muñecas del menor presionando contra el suelo para que no se levantase.
-Shhh... estate quieto
-No! Tío ayuda! Déjame! -El sujeto bajó los pantalones de Gustabo, quién aprovechando que le había soltado las muñecas, le hizo una llave y le dejó tirado en el suelo.
-Qué coño haces niñato! -Intentó levantarse pero el rubio le dio una patada en la boca, trató de salir de la habitación, pero al estar en la puerta gritó al sentir un miembro introducirse en su entrada de una estocada. -Ya veremos quien se ríe ahora. -Comenzó a dar fuertes estocadas, haciendo que el ano del rubio se enrojeciera y le saliera un poco de sangre
-P-PARA! -Grito el rubio llorando desconsoladamente, ninguno le había dolido tanto como ese.
Con las pocas fuerzas que le quedaban al rubio, le desestabilizó con una pierna, haciéndole caer al suelo, y a partir de ahí darle patadas hasta que quedase inconsciente, se subió los pantalones y cogió su móvil, cojeando abrió la puerta, saliendo y encontrándose con varios guardias
-Me dijo el sujeto q-que podía retirarme. -Mintió. Los guardias le dejaron pasar y salió corriendo hacia la salida. Al llegar le abrieron y se marchó corriendo un poco arrepentido y con miedo de lo que pudiese pasar.
Iba a mitad de camino cuando le sonó el móvil, y sí, era su tío.
*Llamada*
-QUÉ COÑO HAS HECHO PUTO INUTIL DE MIERDA!
-p-perdón tío p-pero me ha echo mu-mucho da-
-ME SUDA LA POLLA, TE VAS A ENTERAR NIÑATO!
-Tío si quieres mañana p-puedo hacer lo que m-me digas pero no con ot-otra gente. -Escuchó al mayor resoplar. -P-Puedo hacerlo co-con John también p-pero no con otras per-personas por favor
-Está bien, pero que sepas que mañana vas a terminar muy muy mal.
*Fin de la llamada*
Gustabo suspiró un poco aliviado, y con un gran dolor en su parte trasera fue caminando apoyándose en las paredes como podía, aún ni si quiera comprendía como había podido salir corriendo los primeros metros, supuso que al miedo no le gana ningún dolor físico.
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