38

390 50 5
                                    

Se besaban desesperadamente, las manos de Castiel se encontraban en las caderas de Dean ejerciendo presión contra las suyas, sus erecciones se frotaban rápidamente, Dean no dejaba de soltar pequeños gemidos entre besos. Eran las 10 am y ellos ya estaban el uno contra el otro en la cocina, el último mes había sido intenso entre fines de semana juntos, citas y sexo casi a diario. El semestre estaba por terminar, eso significaba que tenían cada vez más tiempo libre para estar juntos.

Estaban recuperando todos esos meses perdidos pero aún no habían formalizado nada, era evidente que estaban juntos y enamorados, eso era más que suficiente para Castiel, no habían hablado del tema desde aquel sábado y Dean tenía miedo de saber qué sucedía entre los dos, qué tal vez esto no significara lo mismo para Cas que para él.

Castiel fue el primero en venirse sobre su pijama, humedeció su pantalón y el de Dean, el mayor se detuvo y obtuvo quejas del rubio. Se puso de rodillas y bajó su pantalón para descubrir que no llevaba bóxer los dos intercambiaron miradas lujuriosas y sin pensarlo dos veces, Castiel metió la longitud de Dean a su boca y comenzó a succionarlo.

-Caas.-Decía Dean mientras acariciaba el cabello del mayor.

Dean comenzó a mover sus caderas Castiel comenzó a tomarlo más profundo en su boca, llevó sus manos a las nalgas del menor y las apretó para que fuera más rápido, Dean tomó la cabeza Cas con las dos manos y comenzó a follarle lo boca lo más rápido que podía, soltaba gemidos mientras observaba esos ojos azules y esos labios rodeándolo, era hipnótico verse desaparecer entre esos labios.
Sin poder aguantar más Dean se vino con un grito y explotó dentro de la boca de Cas quien tragó hasta la última gota.
Castiel se puso de pie y sonrió satisfecho.

-Creo que deberíamos darnos una ducha.-Dijo al ver a Dean tan agitado e intentando recuperarse.

Iba a ser una simple ducha juntos, pero después de unos besos, Dean se encontraba empotrado contra la pared rodeando la cintura de Castiel con sus piernas y este arremetiendo en su interior sin piedad.



-Dean, tenemos 15 minutos para llegar.-Advirtió Castiel desde el sofá mirando la pantalla de su móvil.

Hoy tendrían su primera cita formal, Dean le había dicho que tenían una reservación en restaurante de comida italiana, usarían trajes y pasarían una agradable velada juntos, si es que Dean se apuraba a vestirse.

Lo que Castiel no sabía, era que Dean estaba ganando tiempo para la sorpresa que le había planeado, cenarían en el roof garden de donde Lee vivía, que se ofreció junto con Sid a hacer todos los preparativos, todo estaba siendo colocado en su lugar mientras Dean se vestía. Le había dicho a Cas que tenían un reservación en un restaurante italiano pero solo había sido para despistarlo. Estaba mensajenadose con sus amigos sobre cómo iba la logística, habían tenido un percance con la decoración del roof garden pero ya todo marchaba de maravilla.

La puerta de la habitación de Dean se abrió y Castiel lo miraba recargado desde el marco de la puerta con los brazos cruzados. El rubio sabía lo mucho que su novio odiaba ser impuntual. ¿Su novio? ¿Desde cuándo le había puesto etiqueta a esto?

-No hay prisa, tenemos toda la noche.-Dijo Dean mientras intentaba hacerse un nudo a su corbata.

-El restaurante no nos va a esperar toda la noche.-Dijo Castiel mirando el reloj en su muñeca.

-Solo confía en mi, ¿si?-Dean se giró y le sonrió. Castiel lo observó en silencio.

-¿Me conoces?-Preguntó Castiel indignado.

-Déjate llevar Cas.-Dean se acercó al mayor y le dio un pequeño beso en la mejilla derecha.-Solo por hoy.

Castiel suspiró derrotado y asintió. Salieron del apartamento casi media hora después.
Dean guió al taxi en dirección contraria al restaurante y Castiel frunció el ceño.

𝙋 𝙍 𝙀 𝙔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora