San había perdido su vuelo a casa, él parecía no estar preocupado en lo absoluto pero Dean estaba bastante nervioso pues sabía que sus padres le reclamarían por no llevarlo a tiempo al aeropuerto.
-No puedo llevarte a clases.-Dean decía mientras metía libros a su mochila.-Tienes que quedarte aquí y no sé... ver una película pero no salgas para nada y no...
-No abrirle la puerta a extraños.-Sam lo interrumpió.-Lo sé Dean, lo has repetido tres veces en las últimas dos horas.
El profesor Johnson había decidido dar clases en domingo, así que no le quedaba de otra más que asistir y dejar a su hermano solo en casa con Castiel.
Dean soltó un suspiro y levantó el brazo alcanzando el cabello de Sam para revolverlo.-No tardaré, lo prometo.-Dean tomó su mochila y salió del departamento. Sam tomó asiento en el sofá y revisó su móvil sin prestar mucha atención a lo que leía en la pantalla.
Castiel apareció detrás de Sam hablando con alguien en el móvil, sonaba cortante y parecía que hablaba con su hermana.-No he tenido tiempo Hannah.-Castiel se dirigió a la cocina mientras hablaba.-No soy tu único hermano, no vengas a reclamarme.
El menor de los Winchester intentó ignorar la conversación de Castiel y mantuvo la vista fija en su móvil, minutos después Castiel terminó la llamada y salió de la cocina con una taza de café.
-Así que Dean te abandonó.-Dijo Castiel tomando asiento en el sofá de al lado, traía una botella de agua que dejó sobre la pequeña mesa de centro junto con su móvil.
-Solo por unas horas.-Sam se encogió de hombros.-Eso nos da más tiempo para conocernos.
-¿Conocernos?
-Si, ayer pude ver que son pareja, eso nos hace casi familia ¿no?-Sam se estaba haciendo el tonto pero sabía que Castiel no lo conocía la suficiente para saber eso. El mayor se atragantó con el café que tomaba, comenzó a toser y después miró a Sam.
-No, no, no tú hermano y yo no somos nada.-Castiel se aclaró la garganta.-Lo de ayer solo fue algo de una vez.
-Pero yo los vi juntos ayer, en la mañana...-Sam fingió confusión. Castiel miró a Sam por unos segundos esa misma expresión eran tan parecida a la de Dean.
-Vivimos en el mismo lugar niño.-Castiel frunció el ceño cruzando los brazos.
-No, me refiero a que yo los vi, ya sabes...-Sam se encogió de hombros.-Besándose.
-Eso...
-¿También fue algo de una vez?-Sam alzó las cejas y Castiel no pudo evitar pensar en que Sam estaba jugando con su mente.
Se había quedado sin palabras, afortunadamente llamaron a la puerta y Castiel agradeció internamente esa interrupción, se puso de pie sin decir nada y corrió hacia la puerta para abrir. Balthazar estaba frente a él sonriente y en cuanto terminó de abrir la puerta su amigo se abalanzó a abrazarlo, Castiel sorprendido por la visita de su amigo no le correspondió el abrazo, jamás lo hacía, no le gustaban.
-Pensé que seguías en Londres.-Castiel se mantuvo inmóvil, Balthazar se alejó sonriente.
-Llegué ayer, el intercambio me aburrió un poco y decidí volver.-Se encogió de hombros.
-¿Qué haces aquí?-Castiel cerró la puerta y miró a su amigo, Sam los observaba indiscretamente desde el sofá.
-Vine a saludar.
-Ni siquiera te gusta mi vecindario.
-Hoy tenía ganas de venir.-Balthazar puso una mano en su pecho haciéndose el ofendido.-También vine a conocer a Dean.
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𝙋 𝙍 𝙀 𝙔
FanfictionEl sueño de Dean está por hacerse realidad, ha entrado a la universidad de sus sueños, en su ciudad favorita, todo parece excitante ante sus ojos. Pero no todo podía ser perfecto, su obstáculo es Castiel, su compañero de piso que se empeña en ser in...