Capítulo 3

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Por fin ha llegado el viernes.

La primera semana de instituto no ha ido tan mal ya que de momento no tenemos muchos deberes. Lo peor será cuando empiecen a mandarnos trabajos o nos pongan un montón de exámenes...

—Tía venga, vuelve a casa con nosotros en coche porfa. ¿Sabes que no vas a poder evitarle toda la vida, no? Somos vecinos y eso... —ruedo los ojos.

Sam lleva insistiéndome toda la semana para que vuelva a ir con ellos en coche. Desde el lunes voy andando al instituto porque no quiero cruzarme con el idiota de Hugo. Pero por desgracia, la última clase de hoy voy a tener que compartirla con él.

—Lo sé Sam, pero cuanto menos tiempo pase con él mejor —suspira. Salgo de mi clase hacía la de arte con Sam a mi lado aunque ella tenga que ir a otra.

—Evii porfaa, que hasta te echa de menos

—Sii, seguro —digo riendo sarcásticamente —ya me ha dejado claro muchas veces lo poco que le importo. Así que no creo que me eche nada de menos, incluso se alegrará de no tener que aguantarme llevándome en su coche —niega.

—Eso no es verdad Eva, claro que le importas. Solo que a él le cuesta mucho más expresar sus sentimientos y así... —suspiro.

—Sam, que no quiero ir y punto, ¿vale?

—Vale vale chica. Bueno, pues me voy ya para mi clase. Nos vemos luego, te quiero Evi —la abrazo.

—Y yo a ti —nos sonreímos y nos separamos para ir cada una a nuestra clase.

Al entrar veo a gente que no conozco de casi nada, solo de verles pasar por los pasillos o así. Menos a un rubio con tatuajes al que conozco perfectamente sentado en la parte de atrás con sus amigos. Sus ojos verdes se posan inmediatamente sobre mí con intensidad haciendo que no pueda sostener su mirada por mucho tiempo, y me siento en la segunda fila al lado de una chica con flequillo.

—Hola, soy Maialen. ¿Y tú? —me dice sonriendo.

—Eva —le sonrío de vuelta.

La profe nos ha pedido que dibujásemos algo con lo que nos identifiquemos y he decidido dibujar una sirena porque me pasaría la vida en el agua. Mi fuerte no es dibujar la verdad, pero bueno, lo he intentado. Sin embargo Maialen que está haciendo bachiller artístico, ha dibujado un brócoli y le ha quedado genial oye... Durante la clase hemos estado hablando más y me ha parecido súper maja.

Termina la clase, me despido de Maialen y salgo rápidamente de allí aunque oiga a Hugo llamarme. No me apetece nada discutir con él ahora mismo.

[...]

Cuando llego a casa, noto a mi madre y a Juanmi súper raros. Pero por mucho que les pregunte sobre qué ha pasado, me dicen que no es nada, que no me preocupe. ¿Cómo no me voy a preocupar? Solo espero que no le haya pasado nada malo a nadie de la familia. Menos mal que mi hermanita Lea nos alegra un poco la comida...

Después de comer, me voy a mi habitación a hacer los deberes de hoy para estar libre el resto del finde. Termino y me tumbo en mi cama poniendo The Walking Dead, una de mis series favoritas.

Al de un rato, mi madre llama a la puerta y le dejo que pase.

—Eva, tengo que hablar contigo de algo... —se sienta a mi lado en la cama y la miro preocupada.

InevitablesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora