Capitulo 9 " el día después del sexo"

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Desperté y vi la hora, eran las 12:00pm ¡Joder! Perdí una clase y la próxima es en dos horas, un brazo impedía levantarme y sonreí al saber que era Daniel, su respiración la sentía en la nuca. ¡Oh! La noche anterior la calificó como la mejor noche de mi vida, me moví con cuidado y me apretó mas como no queriéndose separar de mí, me di la vuelta y mi cara está frente a la de él, observe cada detalle de su cara, sus pestañas eran largas y su cabello se encontraba despeinado su boca estaba entre abierta, no pude evitarlo y lo bese, él se despertó poco a poco, me miró con una sonrisa.

- Buenos Días nena - Su mirada transmitía dulzura algo que no transmitía la noche anterior él me miraba con lujuria.

- Buenos días Daniel - Le sonreí y recordé que no debía encariñarme, si él no podía ser nada mío entonces terminaría sufriendo si me encariñaba.

- ¿Quieres que desayunemos algo rico? - Me beso.

Me despegué de él levantándome rápidamente, él frunció el ceño y se sentó en la cama.

- Yo emm... Ya es hora del almuerzo y pues perdí una clase... Así que tengo que irme porque la próxima clase será dentro de dos horas y me tengo que arreglar - Hablaba mientras recogía todo.

- ¿Te vas? - Me miró con cara dura.

- Tengo que...- Me mordí el labio.

- Entonces, ¿Cuando nos veremos de nuevo? - Me pregunto.

- Bueno...- Dude pensando en que decirle - Tú eres el jefe de mi padre, el nunca me permitiría estar contigo, yo amo a mi padre, él nunca se ha decepcionado de mi y este no será el motivo. - Hice una pausa y sus ojos miraban los míos. - La pase muy bien anoche, de verdad te agradezco la hermosa cena, pero es mejor si lo dejamos hasta eso.

- No tienes que agradecerme nada - Dijo en tono duro. - ¿Estás segura de lo que quieres es eso? - ¡No! ¡No! Quiero estar contigo, amanecer abrazados. Pero no podía esto no se podía. Pensé.

- Si es lo que quiero - Hable decidida ya con la ropa puesta.

- Bien - Frunció el ceño. – Te llevaré.

Nos montamos en su camioneta, el camino fue muy tenso, no sonaba ni la música y su cara ni la vi, llegamos al departamento, me baje de la camioneta sin mirar a Daniel, muy en el fondo sabía que era mejor así, pero por otra parte me sentía como una idiota.

- Adiós Daniel. - Me despedí.

- Hasta luego Señorita Moretti - Su voz sonaba dura.

Arrancó su camioneta y lo vi alejarse, mis lagrimas no tardaron en salir, no fue un llanto, ni lloraba dolida, eran lágrimas de enojo.

Entre al departamento y no había nadie, tome una larga ducha me lave el cabello, salí con mi bata de baño y mi cabello castaño oscuro desenredado, mis amigos estaban en la sala viendo la tele y al verme se pararon.

- ¡Oh nena! ¿Qué tal te fue anoche? - Alzó las cejas Franco y ahora si llore, me lleve las manos a la cara, María, Franco y Alejandra se levantaron a abrazarme.

- No vayas a clases- Dijo Alejandra.

- ¿Que paso? - Pregunto María.

- Nos acostamos, luego desperté y caí en la realidad. - Volví a llorar.

- Corazón no llores - Fran me consoló, odiaba que me consolaran. - ¿Sabes qué? Comprare helado, palomitas, dos doritos XXL y dos Coca-Colas eso te hará sentir mejor. - Salió del departamento.

Horas más tarde estábamos todos en mi habitación comiendo y viendo películas de terror, eso nos ayudaba a olvidar, el timbre sonó y todos nos asustamos.

- ¡Jesucristo! - Exclamó Alejandra, llevándose una mano al pecho.

-Yo ni loca abro la puerta. – Hable y Fran detuvo la película.

- ¡Yo tampoco! – Todos mirábamos a la puerta asustados.

- Maldición, ¿Quién llama a la puerta a esta hora? – Se quejo Fran. Seguíamos viendo a la puerta y hablando.

- Quizás es Daniel. – Me miro Alejandra. Pues si podría ser el, pero lo dudo después de todo lo que le dije.

- No creo... - Nos levantamos del sofá.

Todos fuimos a abrir la puerta mirando poco a poco no vaya a ser un fantasma, ya que quien más tocaría la puerta las 12:00 a.m.

Abrimos la puerta lentamente y vimos a un chico.

- ¡José! – Exclame mirándolo sorprendida.

toda+Ti


El Socio De Mi Padre ©️ Mapu Olivieri Donde viven las historias. Descúbrelo ahora