¿ Dónde quedó mi corazón ?

Empieza la cuenta atrás.

Un mes,

eso es lo que queda para enfrentarme

cara a cara con

Claudia.

Yo sé que estoy preparada, pero aún así no me puedo confiar, ver a esa chica me puede joder en muchos aspectos, y no puedo dejar que eso ocurra.

Queda un mes , solo un mes, y ya estoy nerviosa.

No la veo desde el juicio, y lo único que sé de ella, es que sigue yendo detrás de Dylan todos los días, de verdad , esa chica no se da por vencida con nada.

Por otro lado está el tema universidad, con respecto a eso sigo teniendo un lío en la cabeza bastante grande, cada vez que intento hablar de ello con Dylan me dice lo mismo; que si lo quiero dejar solo, que no va a funcionar, que eso está muy lejos, que no merece la pena, que en España hay muchas universidades geniales, etc.

Yo sé que las relaciones a distancia son complicadas, y más aún con tanta distancia, pero tampoco hace el esfuerzo de entender, y eso me frustra , y mucho.

Andrew me ha aconsejado que haga lo que yo vea que es mejor para mí, porque nunca sabremos si nuestra relación es para siempre o no, y no puedo dejar a un lado mi sueño por algo que no es seguro, y por ese lado tiene razón, pero ¿ y si la razón de que no sea para siempre es que yo me vaya? Entonces yo tendría la culpa y no me lo podría perdonar en la vida.

Los días van pasando y yo lo único que hago es estudiar, pero no solo yo, mi grupo entero está así, apenas nos hemos visto desde que queda un mes justo para EBAU, siempre nos han dicho que es muy difícil y en mi opinión, todos tenemos miedo de que llegue el día, pero a la vez queremos quitarnos eso de encima.

Son demasiadas cosas para hacer en muy poco tiempo, solo de pensarlo ya me agobio, el único momento que tengo para descansar, es cuando Andrew viene a casa, él es la única persona que veo además de mi madre y para que mentir, es una amargación no poder ver a nadie por estar estudiando.

Necesito obtener una buena nota y eso no parece ser fácil, pero yo sé que si me lo propongo puedo conseguirlo, solo no tengo que dejar que los nervios me consuman.

Conforme se va acercando el día, mis nervios aumentan , intento controlarlos pero realmente es difícil, no solo llevo la presión de los exámenes, si no también que Claudia va a estar allí .

Ójala supierais las ganas que tengo de que este mes pase, hacer los exámenes y quedar libre de todo, siento que me estoy volviendo loca con esta cuenta atrás.

Este finde, vienen los chicos a casa y estaremos en el salón de cine viendo películas y desconectando un poco.

La semana, pasa muy lenta, demasiado, pero al fin es viernes, estoy con mi madre preparando palomitas, golosinas y bebidas para esta tarde, creo que es la primera tarde desde que empezó mayo que no cojo un libro y joder, que bien sienta.

Quince minutos más tarde, estamos todos en la sala decidiendo qué película ver.

- No vamos a ver una de amor. - dice Alan.

- Tampoco una de miedo. - añade Iris.

- Entonces, ¿ Qué vemos? Tendremos que ponernos de acuerdo, si no, no veremos nada. - interrumpe Alex.

- Coincido con él. - dice Dani.

- Podemos ver las dos, total, al final siempre terminamos haciendo eso. - señala Dylan.

Finalmente, hacemos caso a Dylan, primero vemos una de miedo, por lo que estoy toda la película escondiendo la cabeza en el pecho de Dylan, gritando y cagada de miedo, aunque Iris no se queda atrás, está igual o incluso podría decir que está peor que yo.

Menos mal que después, vimos una de amor, aunque tampoco lo pasamos mucho mejor, Iris y yo hemos estado toda la película llorando sin parar, yo creo que ya no me quedan más lágrimas de verdad, algún día entenderé como puedo llorar tanto con una simple película, aunque claro, no me habéis visto con los libros, con eso si que lloro, me meto tanto en la historia, que siento que yo estoy en ella.

El resto de la tarde y de la noche la pasamos jugando a cartas y hablando un poco de todo, menos estudios claro, lo primero que dijimos es que hoy no se hablaba de los estudios.

Alex nos ha contado que ya habla algo más con Laura, y que ella parece empezar a mostrar interés, es decir que perfecto, me alegro mucho por él.

Ya solo falta mi querido Alan por encontrar pareja, pero no le veo con muchas ganas de conseguir algo, parece estar genial solo.

En un momento, todos se van a por algo y nos dejan a Dylan y a mi solos.

- Bueno princesa, al final ¿ Qué piensas hacer ?

- hemos dicho que nada de hablar de eso.

- ¿ Te vas a ir?

- Posiblemente.

- Es decir, que no has pensado ni un poco en nosotros. - lo dice con un tono algo elevado.

- Venga ya Dylan, tú tampoco lo haces, solo te quedas aquí por el fútbol, no puedes intentar cumplir tu sueño e impedir que yo cumpla el mío.

- Yo no te estoy impidiendo nada Bella, no te equivoques.

- Dylan, me estás reprochando porque me quiero ir, ¿ eso no es impedirlo? Intentas manipularme para que me quede.

- Venga ya Bella, no digas tonterías. - Dylan cada vez eleva más la voz, parece que este tema lo pone algo tenso.

- No digo tonterías Dylan y no me eleves la voz porque te recuerdo que estamos en mi casa.

- Tranquila que si quieres me puedo ir de TU casa.

- Yo no he dicho eso Dylan. - veo como se aleja para irse y corro hacia él.

- Venga ya Dylan, en ningún momento he dicho que te tengas que ir, solo que no me levantes la voz.

- Bella joder, te quieres ir, y dejarme aquí como si nada, no puedes pretender que me quede contigo sabiendo que me vas a terminar dejando.

- Todavía no es seguro que me vaya, pero ¿ en serio prefieres pasar el posible tiempo que nos quede para estar juntos estando separados?

- Necesito pensar Bella.

¡ JODER !

La he cagado, lo sé, tendría que haber evitado el tema.

Cuando los demás vienen y ven que no está, les explico lo ocurrido y decidimos que es hora de que cada uno vuelva a casa, bueno, menos Iris, ella pasa la noche conmigo.

- Entonces ¿ qué hago?

- Mira Bella, si tienes la oportunidad, no la desaproveches, llevas años diciéndome que quieres ir allí, si Dylan te quiere realmente, te va a entender y te va a apoyar al igual que tu lo apoyas a él, a fin de cuentas tu pierdes lo mismo que él y a ambos os duele igual el hecho de tener que alejaros.

- Ya , el problema es que no lo entienda.

- Entonces amiga, quizás él no sea para ti, porque tú , mereces a alguien que quiera lo mejor para ti.

Tras una larga conversación, nos quedamos dormidas.