Todo fin tiene un principio.

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Todo fin tiene un principio ,

y el mío está a punto de comenzar.

Iris me está ayudando con las maletas y esas cosas, estoy muy nerviosa, mis padres me han comprado un apartamento allí y por suerte, está cerca del campus.

Es mi último día en Valencia y me da mucha pena, voy a echar de menos todo de esta ciudad, pero un cambio nunca viene mal.

El viaje no va a ser corto, por lo que me preparo muchos libros para leer.

Para pasar el último día, a Iris se le ha ocurrido hacer el último día de chicas, no me puedo negar a ese plan puesto que voy a estar mucho tiempo sin verla.

Nos preparamos y en vez de ir al centro comercial, vamos al centro de la ciudad.

Vamos con el coche por las calles de Valencia, y he de admitir que son realmente preciosas.

Aparcamos el coche y empezamos a dar vueltas por las tiendas, por ahora, aunque parezca raro, yo llevo más bolsas que Iris, aunque tengo que aclarar que es por su culpa, no para de comprarme cosas que según ella son regalos suyos para triunfar en Los Ángeles... en fin, Iris.

Nos paseamos por unas cuantas tiendas y paramos en una heladería , mi helado favorito es el de Stracciatella, por lo que me pido una tarrina mediana de él.

De verdad que disfruto comiéndolo, en mi casa, todos los años compramos en el supermercado tarrinas grandes y no tardo ni dos días en comerme mínimo dos.

Todavía no entiendo porque estoy tan delgada.

Iris se ha pedido una mediana de oreo y kinder bueno , ella sí que sabe.

Disfrutamos de nuestros helados y después de un largo rato volvemos a las tiendas.

Iris ya ha cogido otra vez el puesto número uno, no vamos a tardar mucho en tener que ir al coche a dejarlo todo.

Vamos a dos tiendas más y acto seguido al coche, que por suerte no nos pilla muy retirado.

Estoy exhausta , de verdad, entre el calor y todas las vueltas que estamos dando, siento que me voy a morir.

Después de unas horas más de tiendas, vamos a comer al chino, hace mucho que no como allí y me apetecía bastante.

Pedimos lo mismo de siempre y mientras comemos hablamos de cuando nos vamos a ver y esas cosas.

-Vale, en navidad tú vienes aquí pero en semana santa voy yo allí . - dice Iris.

-Me parece bien.

-Y tenemos que hacer videollamada mínimo una vez por día .

- Está bien.

-Y me tienes que contar todo lo que te pase allí.

-Lo sé , Iris , no te preocupes que vas a ser la primera en enterarte de todo lo que me pase.

- Menudo peso me quitas de encima diciéndome eso.

- ¿Piensas que me voy a olvidar de ti estando allí?

-Bueno... eso es muy grande y hay muchas personas y no sé.

-Iris, conoceré a gente, eso seguro, pero tú eres mi mejor amiga , desde siempre, no podría cambiarte por nadie.

-Bella, se que apenas te lo digo, pero de verdad, te quiero mucho.

-Yo a ti también boba.

Después de esa bonita conversación nos traen los tallarines.

-Como me gusta la comida de este restaurante.

¿ Dónde quedó mi corazón ?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora