El bar y son dos

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PUNTO DE VISTA DE EMMA SWAN

Le hice una seña a Kristin, ella se sentó al otro lado de mi morena y la acunó en sus brazos, me puse de pie y me paré frente a esa desafortunada mujer, mi miraba destilada odio y podía sentir mi cuerpo temblar de rabia.

Emma: Tenía muchas ganas de tener enfrente a la mujer que más desprecio en este mundo- Dije con los dientes apretados.

La mujer fría y arrogante desapareció dando paso a una mujer desconcertada y podría jurar que incluso algo asustada, pero intentó recomponerse.

Cora: Me intriga el motivo de ese sentimiento, hemos coincidido antes debido a mis negocios con tu padre y tu suegro, no recuerdo ningún desacuerdo, los últimos meses he estado de viaje, así que tu actitud me parece fuera de lugar- Alzó la barbilla.

Emma: La desprecio porque es el peor ser humano que he tenido el disgusto de conocer, lo que le hizo a Regina no tiene nombre, es usted un monstruo, pero a pesar de todo, mi Regina se convirtió en una mujer extraordinaria en todos los sentidos, ni usted ni su ex esposo pudieron apagar la luz que nació con ella.

Cora: ¿Tú Regina? No me digas que la adoptaste, eso es muy considerado de tu parte, aunque dudo que tu esposo y tus padres estén de acuerdo en esa obra de caridad.

Emma: No se equivoque señora, Regina es mi mujer, cosa que mis padres y mi ex esposo ya saben, tiene razón, no les gustó, gracias a Dios que me importa una mierda.

Cora: ¿De verdad quieres que crea que una mujer como tú puede fijarse en ella?- Señaló a Regina con desdén.

Emma: No solo me fije en MI Regina, estoy completamente enamorada de ella, le sorprendería saber la cantidad de personas que nos preocupamos por ella.

Cora: Me decepcionas, yo siempre quise que mis hijas fueran como tú, inteligente, hermosa, casada con un hombre de buen apellido, una magnate poderosa, que no se dejaba llevar por sentimentalismos, veo que Regina no es una idiota después de todo ¿Quién pensaría que atraparía a una mujer cómo tú?

Emma: Me da tanta lástima señora, me alegra tanto decepcionarla, me estaba convirtiendo en alguien como usted, pero gracias a Regina me di cuenta a tiempo que así nunca sería feliz, pero no se confunda, sigo siendo la misma mujer agresiva en los negocios, es por eso que le digo en su cara que la voy a destruir- Escupí con desprecio.

Regina: No es necesario mi amor, ella no vale la pena- No supe en qué momento se paró a mi lado.

Emma: Ella no vale la pena, pero tú sí, es una promesa que te hice en silencio, incluso antes de que aceptara por completo lo que siento por ti y yo soy una mujer de palabra.

Cora: Debió ser muy difícil aceptar que te enamoraste de alguien defectuoso como Regina.

Emma: Se equivoca como siempre, me costó trabajo por todo lo contrario, porque ella es perfecta y no creía merecerla, yo, una mujer mayor, fría, amargada y enojada con la vida, mientras mi Regina es dulce, generosa y agradecida con la vida, pero usted por su mezquindad no supo ver el hermoso ser humano que ella es y en el camino también perdió a Bette, porque a diferencia de usted, ella sí valora y ama a Regina, al igual que todas las que estamos aquí.

Cora: No me interesa Regina, estoy aquí por Bette.

Mi niña ya no lloraba, estaba en silencio con el semblante más tranquilo, sus ojos aún tenían una sombra de tristeza ante las palabras de su madre, pero también había paz, como si por fin dejara de lastimarla tanto.

Mi niña venenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora