XXIII

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Ronnie y yo nos quedamos dormidas después de ver dos películas, nos reímos y la pasamos realmente bien, pude lograr el objetivo que era distraerla y verla sonreír nuevamente, el objetivo fue logrado.

Al otro día me desperté temprano, quería prepararle un desayuno delicioso a Ronnie, pero al despertarme ella no estaba a mi lado, algo confundida, me dirigí primero al baño, escuche ruido desde la cocina, al terminar fui hasta allá y me encontré con Ronnie haciendo panqueques.

−Se suponía que yo haría eso. −ella me sonríe y continua cocinando. −Te ves mejor. −asiente.

−Quizás solo necesitaba hablarlo. −se queda mirándome. −No quita que aún no me sienta mal, pero estoy mucho mejor ahora que lo conté. 

−Eso te deja como lección no ocultarme nada mas, Verónica. −ella se ríe y asiente. 

−No me digas así, siento que eres mi mamá regañándome. −asiento y ella me ve sorprendida. −Mi mamá te invito a casa, el viernes, se me olvido avisarte ¿Quieres venir? −le sonrió, me gustaba ir a su casa y hacia mucho que no veía a sus padres.

−Claro que si, Ronnie. 

El timbre sonó, ambas nos quedamos mirando hacia la puerta y voy hacia ella, sabiendo quien seguramente es.

Apenas abro la puerta, veo el rostro que esperaba acompañado del de Kendall, Will se acerca y me toma de la cintura para darme un ligero beso. 

− ¿Aún en pijamas? Son las 11, Ali. −me dice mi novio y entra al apartamento.

−Hola, Ali. −me dice Kendall sonriendo y lo invito a pasar, me da un ligero abrazo y sigue.

− ¿Por qué no me avisaste que vendrías? Ambas estamos en pijamas y destruidas, nos quedamos despiertas hasta tarde. −le pregunto a Will.

−Habla por ti, yo estoy en pijama, pero fabulosa ¿Cierto Kendall? −escucho la carcajada de Kendall y luego un si muy convincente de su parte.

Camino hacia la cocina y me paro al lado de Will, el toma mi mano y me sonríe, para luego cambiar su expresión por una maligna, suele hacer eso cuando esta listo para molestar a Ronnie. 

−Para mi siempre estas horrorosa, Verónica. −ella lo mira con los ojos entrecerrados y Will la ve expectante, últimamente Ronnie no le responde a los insultos, así que se lo devuelva, es el mensaje claro de que se siente mejor. 

−Tu también, sino fuera por esos músculos, nadie voltearía a verte. −Will sonríe complacido.

−Te recuerdo que tu me mirabas. −le dice de nuevo y Kendall y yo simplemente miramos entretenidos el pequeño debate. 

−Estaba loca, necesitaba terapia en esa época de mi vida.

−Aún lo estas. −le replica.

−Al igual que tu novia. −suelto una carcajada.

−Me devuelves los insultos sin pensarlo, supongo que ya te sientes mejor. −le dice Will y ella asiente sonriente.

−Me debes algunos insultos, así que no esperes que solo te los devuelva, porque recibirás varios. −Will le sonríe y la abraza, Ronnie abre los ojos sorprendida y busca mi mirada en busca de respuestas, me encojo de hombros, pero me agrada que Will se preocupe por ella.

−Es bueno saber que ya estas mejor, no te preocupes, también puedo devolverte los insultos Verónica. -se separa de ella y la despeina.

−Esta bien, déjame en paz, es escalofriante que me abraces. −Will abre sus brazos y Ronnie levanta una ceja. −Si vuelves a abrazarme no te haré panqueques. −Will baja los brazos y voltea a verme.

Por Un Beso Tuyo. (Hermanos Thomas #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora