VI

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Lily, Abby y Oliver jugaban en el patio, durante mucho rato y la verdad es que me gustaría estarlos acompañando un poco más, porque estuve con ellos durante un rato, pero ya era casi hora de que Will llegara.

Luego de vestirme, Ronnie arreglo mi cabello para que lo dejara suelto, pero algo que no iba en el trato, me tiene al borde de la paciencia.

−Ronnie no me maquilles. −le quito las manos de mi cara.

−Es un poco de polvo, déjate Ali. −me dice molesta y me dejo, cuando la veo tomar otra cosa.

−Ya es suficiente, te dije que era poco a poco, no todo de un tirón. −ella suspira molesta, pero asiente.

−Bien, tienes razón. −toma mi muñeca para ver la hora. −Me iré, es casi hora. −me da un beso en la mejilla y se me queda viendo. −Te ves hermosa Ali. −le sonrió un poco avergonzada. −La foto cuando eras niña al lado de Will, te veías tan feliz y resaltabas mucho, desde que llegaste te ves feliz, pero ahora resaltas tanto o más que en esa foto. −me abraza y se despide.

Me miro en el espejo un poco nerviosa, paso la mano por mi cabello pasándolo detrás de mi hombro y sonrió, me gusta más como se ve suelto y así arreglado, incluso ha crecido demasiado, como solía recogérmelo siempre, nunca me había mirado en el espejo con el cabello suelto, generalmente solo para recogerlo nuevamente, asiento nuevamente y escucho como Ronnie me llama desde abajo, tomo mi bolso y salgo de mi habitación.

− ¿Qué sucede Ronnie? −pregunto mientras camino a las escaleras. − ¿No te ibas? −vuelvo a preguntar en el pie de las escaleras y la veo parada al lado de Will.

Will al escuchar mi voz dirige su mirada hacia a mí, su boca se va abriendo poco a poco, para luego esbozar una sonrisa.

−Bueno yo me voy, que la pasen bien. −habla Ronnie y Will despega la vista de mí de manera dificultosa, voltea a ver a Ronnie y le habla.

−Gracias ¿Verónica? −ella asiente y me lanza una mirada picara antes de irse.

Bajo las escaleras y me poso frente a él, de nuevo su mirada se torna algo intensa y empieza a brillar ese verde tan hermoso, siento mis mejillas encenderse.

− ¿Nos vamos? −pregunto un poco incomoda, el asiente.

−Lo soltaste. −dice bajito y lleva su mano hacia mi cabello, lo acaricia para luego soltarlo.

−Si.

El sale un poco del estado en donde estaba y me hace una seña para que pase primero, salimos de casa y veo un auto estacionado al frente, pregunto si allí nos iremos y el asiente, voy hasta el asiento del copiloto y luego de entrar al auto, nos vamos.

El viaje estuvo en silencio ambientado por música, no se sintió incomodo, siempre solía pasarme cuando era pequeña, cada vez que se hacía un silencio, era incomodo con otros, pero si Will estaba no lo era. Llegamos al lugar y buscamos asiento, antes de que pudiéramos empezar a hablar, nos trajeron las cartas y advirtieron que cuando quisiéramos algo, solo avisáramos, no había mucha gente, así que para mí era más cómodo.

− ¿Por qué lo soltaste? −dice mordiéndose el labio.

− ¿No te gusta? ¿Quieres que lo recoja? −le pregunto divertida y el asiente rápido.

−Me encanta así, te ves hermosa. −asiento de nuevo sintiendo mis mejillas arder.

Él se veía muy bien también, siempre le han gustado los colores mostaza y no sé por qué, pero cada vez que los usa sus ojos se ven aún más verdes, cosa que lo hace ver muy atractivo.

Por Un Beso Tuyo. (Hermanos Thomas #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora