XI

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Los días pasaron nuevamente, todo estaba bien, a mis amigas les costó un poco aceptar que había perdonado a Will, pero cuando lograron aceptarlo y empezaron a llevarse con él, parecía como si hubieran olvidado todo, por parte de Will nos presentó a sus amigos, Joe y Kendall, que son sus mejores amigos y a veces se nos unen Andy y Eric, pero normalmente son Joe y Kendall, salíamos a la playa, al lugar donde Will y yo comimos la primera vez que salimos, allí trabajaba Kendall, íbamos al centro comercial o simplemente a la casa de Will. 

Los cuatro son bastante agradables, siento que Kendall es más amistoso conmigo que con las chicas, eso a veces me incomoda bastante, ya que siento que va por algo que yo no estoy buscando, por parte de las chicas les caen bastante bien los chicos. 

Andy y Joe estudiaban en la misma escuela que ellas, por lo que los conocían de vista, digamos que con ellos pasaba lo mismo que con Will, así que en cierta parte están bastante satisfechas.

Hablando de otras cosas, ya estaba por empezar mi semestre en la universidad y ya el apartamento en donde Ronnie y yo viviríamos estaba listo, por lo que tenía que mudarme ya, acomodarme allá. 

Ronnie y yo compramos algunas cosas para el apartamento, por lo que esas cosas fueron directamente allá, pero Ronnie quería llevar montones de sus cosas también, por mi parte en mi casa en Washington se quedaron muchas cosas, pero pensé en buscarlas luego, por lo que no tenía que hacer sacrificios, Lily no estaba aún muy feliz con el asunto, pero al Abby pasar por lo mismo el año pasado, ambas hablaban de eso y creo que se tranquilizaba, cuando recogí todas mis cosas y la habitación de visitas quedo vacía, Lily no lo soporto, ni siquiera quiso despedirse, aunque yo tampoco lo vi muy necesario, ya que después de instalar mis cosas en el apartamento, Ronnie tendría algo familiar que hacer y no me apetecía quedarme sola, por lo que pasaría un rato más, pero sé que no le gusta la situación y me hace sentir mal verla triste, al final decidí ir a su habitación antes de irme.

− ¿Sabes Lily que no me estoy yendo lejos? −le digo al entrar a su habitación.

Ella estaba tendida en la cama con la almohada sobre su cara.

−S-sí. −tartamudea.

− ¿Por qué lloras entonces? −me le acerco y me pongo de cuclillas enfrente de ella, mientras le acaricio la espalda.

−Quiero que te quedes conmigo. −se quita la almohada de la cabeza y me enseña su rostro lloroso.

− ¿Y cuando me gradué y empiece a trabajar? −me hace un puchero y le quito una lagrima del rostro. −Cuando tu empieces la universidad, me quedare yo aquí y tú te iras.

−No es verdad. −dice un poco alterada.

−No lo sabes Lily. −su rostro aún se veía triste. −No me voy porque este incomoda o porque no quiera estar contigo, yo te amo Lily. −ella se lanza a mis brazos y empieza a sollozar. −Pero todos debemos de crecer, además piensa que cuando estés aburrida, te llevare conmigo y podrás quedarte a dormir, comer lo que quieras, ver películas de Disney hasta tarde. −ella se separa y me mira sonriente. − ¿Ves que no todo es malo? −ella asiente. −Ahora deja de llorar que pronto viene Abby a jugar ¿Bien? −ella asiente y me deja ir.

Dejo a Lily más tranquila en su habitación y bajo las escaleras, me encuentro con mis tíos hablando con Will y mis maletas a un costado.

Me les acerco y ambos se despiden de mí, tomo dos de las maletas y Will me quita una, para luego irnos en su auto.

− ¿Se quedo Lily más tranquila? −asiento. − ¿Tu estas más tranquila?

−Lo estoy, no me gusta verla triste. −siento como su mano se posa sobre la mía, acariciándola con su dedo pulgar.

Por Un Beso Tuyo. (Hermanos Thomas #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora