Por Un Beso Tuyo. (Hermanos Thomas #1)

XVII

Después de que salí justo al poco tiempo Will salió de mi habitación, Ronnie lo saludo y le indico donde dejamos lo que cocinamos, el asintió y fue por él, pero estaba bastante callado, fui a mi habitación y estaba ordenada, me senté en la cama y tome mi móvil para responderle a mi tía, me preguntaba que cuando podría ir y la verdad no me sentía tan presionada por los estudios, le escribí que iría en la noche, así en la tarde repasaría un poco sobre lo que vimos el viernes y luego iría a que mi tía, evite el mensaje de mi papá y el de su secretaria. Iba a tomar una ducha, pero escuche como llamaban a la puerta, sabía que era Will.

−Entra. −le aviso, el entra a mi habitación y me mira tratando de ofrecer una disculpa. −Deja de mirarme así. −él se acerca a mí.

−Ali no puedo decírtelo, no quiero que las cosas se tornen raras para nosotros. −me tomo de las manos mientras me lo decía.

−No tienen que tornarse raras. −le digo dándole un apretón en la mano. − ¿Tan malo es? −el niega. − ¿Entonces porque no me lo dices? −se muerde los labios, pero de su boca no sale nada, así que quito mis manos de las suyas.

Es exasperante, más aun cuando quiero que me lo diga, más aun cuando quiero decírselo yo también, sus ojos se ven desesperados y sé que se muere por decírmelo, pero se también que tiene miedo por lo que paso la última vez, incluso esto para mi es como un tipo de karma, yo dije que no sentía nada cuando si lo hacía, no era tanto como ahora, pero seguía pensando más en mis inseguridades, además de repetirme la poca experiencia que tengo y como Will se podría aburrir de mi rápido, no quería que esas cosas pasaran, yo solo quería ser su amiga y tenerlo a mi lado todo el tiempo que se pudiera, pero ahora para mí, ser amigos no basta, quiero los besos de anoche, no quiero que me diga que me quiere solo porque es necesario, quiero que me lo diga cada vez que quiera, sin sentirse asustado por mi reacción, ahora simplemente lo quiero todo, pero no puedo hacer nada hasta que él se anime a decirme.

− ¿Qué paso anoche? −me pregunta ignorando mi pregunta y yo niego.

−Recuérdalo tú mismo. −le digo de manera seca y molesta.

−Ali. −alarga mi sobrenombre y me toma de las manos.

−No tengo porque contarte nada, cuando tu no me cuentas nada a mí. −me levanto de donde estaba sentada, me zafo de su agarre y él se levanta después que yo. −Ahora si me disculpas quiero tomar una ducha. −el asiente con una expresión de derrota en su rostro y sale de mie habitación.

~

Will no se quiso ir a su dormitorio por lo que se la pasó casi todo el día disculpándose, al principio trate de ignorarlo, pero es muy terco para rendirse, así que lo disculpe y trate de no pensar más en eso.

Como lo tenía pensado le pregunte si podía llevarme a casa de mis tíos y me dijo que si, además aprovecharía de ver a sus hermanos, por otra parte, Ronnie uso su auto para traernos en la noche y para ella regresar a casa, por lo que Will no tendría que buscarlo por todos lados.

Estuve un buen rato estudiando, no es fácil cuando tenía a Will pegado a mi como un chicle y es una de esas acciones que me dan nostalgia, cada vez que se portaba mal conmigo o simplemente peleábamos de niños, cuando me pedía disculpas y aun cuando lo perdonaba no se separaba de mí, me abrazaba, me tomaba de la mano y me perseguía a todos lados, cuando era niña era un poco fastidioso, pero a medida que fui creciendo me parecía un acto tierno, muy tierno, ya que lo hacía hasta cuando el problema o la pelea había sido por mi culpa, al disculparme yo, él siempre me hacía sentir como que no era mi culpa, me gustaba eso y me gustaba que eso no cambiara, pero era algo molesto mientras estudiaba, ya que me tomaba de la mano cuando iba a escribir o me abrazaba con algo de fuerza y me hacía desconcentrar.