Mi otra mitad

Parte 13 - *Vergüenza*

Capítulo 13 - *Vergüenza?*

Tae sintió sus piernas flaquear al recibir el beso, hubiera querido responderlo intensamente, pero sería cobarde de su parte aprovecharse de la frágil situación, Kookie había bebido demasiado y no sabía lo que hacía en esos momentos, quizás lo confundió.

Suspiro aliviado cuando vio que Hoseok no se dio cuenta y le ayudo a recostarlo, cerró la puerta del coche y se encamino al otro vehículo.

En el trayecto, Tae iba saboreando sus labios recordando ese pequeño beso y agradeciendo a su suerte que lo puso ahí.

Hoseok por su parte iba preocupado, Jungkook era muy fiestero pero rara vez tomaba demasiado como esa noche, sabía perfectamente el motivo que lo había orillado a hacerlo.

– Kookie, en que te has metido, cabronsito. – y lo miraba con ternura, lo veía pequeño y desvalido, hecho bola en su asiento. – espero que tomes la decisión correcta para que no te arrepientas y sea cual sea yo estaré a tu lado. –

Le dolía que su amigo estuviera enamorado de un imposible, Tae no se veía interesado en nadie más que su novia. Como ayudarlo?

Llegaron al departamento, entre los dos prácticamente lo cargaron hasta su recamara, Jk empezó a querer vomitar y lo ayudaron a incorporarse para que no se ahogara, en esas condiciones no se podía quedar solo.

– Hyung, puedo quedarme con él para cuidarlo, no tengo nada que hacer mañana, así que puedo desvelarme sin problemas. – se ofreció Tae

– de verdad Tae? tengo un compromiso temprano, pero no me gustaría abusar, lo más correcto es que me quede yo que soy su mejor amigo. – y si eso empeoraba la confusión de Jk, dudo en aceptar la propuesta.

– si, ve tranquilo, me quedo en la sala al pendiente de él. – claro que lo cuidaría como a su vida misma.

– bien, pero si se complican las cosas o se ofrece una emergencia me llamas y vengo de inmediato eh. – sentía que podía confiar en él, se veía que era un buen chico y alevosamente no lastimaría a su amigo.

Cuando se fue Hoseok, se recostó en el sillón, pero luego se dio cuenta que si se le ofrecía algo a Kookie no alcanzaría a llegar o quizás si se quedaba dormido no lo escucharía, así que decidió meter una silla a la recamara y permanecer sentado a un lado de la cama.

Se le cerraban sus ojitos de sueño, mejor saco su celular para jugar y distraerse, no estaba en una posición muy cómoda así que no era fácil que se quedara dormido, aunque la realidad es que moría de ganas por acurrucarse con Jk, solo que eso sí sería muy atrevido. No podía dejar de verlo, por primera vez podía observarlo sin pena, lo tenía frente a él en toda su plenitud... Demonios, es guapísimo. – y se ruborizo al recordar el beso.

No supo cómo y en qué momento llego a la cama, pero cuando despertó se sobresaltó al verse ahí acostado a su lado, no podía moverse porque estaba envuelto en los brazos de Jk, le tenía encima su pierna y su brazo como si estuviera abrazando a su almohada, se quedó quieto, le dio pena que despertara y lo viera ahí, pero como quitárselo de encima sin despertarlo.

Empezó a ponerse nervioso, tenía miedo que despertara y lo viera en esa situación incómoda, y si Jk pensaba que se aprovechó de su vulnerabilidad? Empezó a moverse quedamente para intentar zafarse, pero por cada ligero movimiento que hacía, Jk se acercaba y lo abrazaba más fuerte, aprisionándolo. Estaba por entrar en un ataque de pánico, cuando empezó a mover su mano acariciando su espalda, ahora si era el momento de despertarlo.