Capítulo 16

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Finalmente mi padre nos dijo que le demos el resto del día para pensar sobre lo nuestro y se fue a su habitación.

Mi madre, al contrario de mi padre, estaba encantada con Nathan.

-Se nota que eres un buen muchacho.- Habló mi mamá con una sonrisa.

-Gracias, es usted muy amable.

-¡Oh por favor!, no me trates de "usted", dime Deborah.-

-De acuerdo.- Dijo riendo levemente.

-Bueno mamá, me voy a mi habitación con Nathan.

-Naila...- Dijo mi madre en tono de reproche.

-Deborah...- Dije imitándola.

Logré convencerla de que nos deje arriba solos.

Subimos rápidamente y cerré la puerta.

-¿Sabes?, te pareces mucho a tu mamá, pero definitivamente  sacaste los ojos claros de tu padre.- Me comentó Nathan mientras se sentaba en mi cama.

-Sí, todos dicen eso.-

Sonreí y me senté en sus piernas.

-¿Crees que le haya agradado a tu padre?- Preguntó cambiando de tema.

Yo intenté contener una risa.

-¿No viste el lío que se montó allá abajo?- Le dije. -Aunque, debo decir que si te dió una oportunidad es porque vió algo en ti.-

Apoyé mi cabeza en su hombro.

Suspiró.

-Nathan.-

Él me miró, esperando una respuesta.

-Ese mini-discurso que le has dado a mi padre allá abajo... ¿realmente piensas todo eso de mí?.- Pregunté un poco sonrojada.

-Por supuesto que sí. Eres increíble.-

Me sonrojé más aún.

-Fue muy bonito de tu parte decir todo eso.- Le dije. -Bueno, menos la parte de caprichosa y obstinada...-

Reí. Él rió también.

-Te amo.

Lo miré sorprendida. Era la primera vez que me lo decía.

-Yo te amo más.- Le dije con total sinceridad y dándole un beso.

Ustedes pensarán que era muy pronto para decir algo tan fuerte, pero era lo que sentía y estaba segurísima de ello.

Un rato después...

Y ahí estábamos ambos, besándonos sin respiro. Nathan estaba acostado en mi cama y yo sobre él.

En eso se abre bruscamente la puerta de mi habitación y escucho la voz chillona de Handan.

-Naila, ¿has visto mi secadora de cabello?

Se quedó helada al ver la escena.

-¿Por qué no tocas la puerta?- Le pregunté de muy mala manera incorporándome y arreglando mi ropa.

-¿Tú eres el novio de Naila?- Dijo entrando a la habitación con pequeños saltitos para sentarse finalmente al lado de Nathan.

-Esteee... sí, soy yo. Un gusto.- Contestó descolocado, intentando taparse con una almohada su evidente erección.

Mi hermana dió un pequeño gritito de felicidad.

-Yo soy Handan, la hermana menor de Naila.- Dijo presentándose.

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