A Irene lo único que le importa es el dinero, a Seulgi, una oportunidad.
Irene es una empresaria exitosa que a sus cortos veintiséis años heredo la empresa de su padre recientemente fallecido. Seulgi es una muchacha de veintidós años que estudia art...
nota: Holaa, ¿Cómo están? Primeramente este capítulo me quedó muy largo, pensé en dividirlo pero decidí dejarlo así. Quería editar el cap con los vestidos de ambas pero no encontré una buena foto de Seulgi para editar. El vestido al que hago referencia es el que llevaba en los Melon Music Awards 2015, para que puedan visualizarlo mejor~ Y el de Irene está en la foto, como siempre gracias por votar y comentar <3.
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−Esto es, literalmente, el vestido más corto que vi en mi vida. − Seulgi sacaba el vestido negro de la maleta de Joy, tirada sobre la gran cama del cuarto de hotel.
Seulgi mentiría si diría que no estuvo nerviosa por el viaje. Eran en total diez personas, y el hecho de que se dieran cuenta de su miedo a volar la aterraba. Aunque cuando subió, supo alivianar mucho mejor la sensación de vértigo. Tuvo que darle gracias especiales a Joy, quién ya sabiendo de su fobia, le sostuvo la mano todo el camino. A lo lejos, miraba a Irene, quién parecía hacer mil cosas a la vez y pensó que de vez cuando le echaba una mirada, o quizás era su imaginación.
Tenían un par de horas para arreglarse. Seulgi, a pedido de su jefa, había reservado en el mismo hotel de la última vez. Y allí estaba, en la habitación con su amiga, sosteniendo entre sus dedos un vestido negro, claramente corto, de mangas largas y cuello alto que le daban cierto toque de elegancia. Sobre la cama, unos tacones con lo que sabía que iba a matarse.
−Se estira. Ve a probártelo. − Joy prácticamente la empujo al baño. Seulgi pensó que realmente no tenía otra opción más que ceder.
−Joder, mi culo va a quedar a la vista de todos Joy. − Seulgi salía enojada, con el vestido puesto, pegado al cuerpo.
−Vaya.. − Joy exclama, sorprendida −Date la vuelta. − Seulgi hace caso, con la esperanza de que su amiga viera lo corto y casi rozando lo inapropiado que se veía. −¿Pero dónde tenías ese cuerpo? Estás buenísima.
−¡Joy! Parezco una.. una..
−Modelo. − concluyó su amiga −El vestido te queda pintado. Deja de quejarte. Vamos a pasarla bien.
−¿Pasarla bien? Esto es algo serio.
−Eso dice Irene. − Joy empezaba a preparar su propia ropa, sacando todo el maquillaje, plancha, etc. que había traído −Pero los japoneses son diferentes a nosotros, ¿O no?
−En eso tienes razón.
−Por cierto, ¿Quién es Jennie? Te llegó un mensaje de ella al móvil, lo vi por accidente. − suelta como si nada, aunque la delataban sus ojos curiosos.
−Oh, una amiga, la conocí aquí en realidad. Es una secretaria de no sé quién.
−¿Está buena? − Seulgi rueda los ojos mientras ríe. −Ahora posa para la cámara, tengo que atesorar este momento y compartírselo a Wendy.
Tres horas después, Seulgi y Wendy se dirigían a la fiesta "empresarial". Seulgi se moría por ver a Irene, pero Joy le informó que al parecer, iba a llegar un poco más tarde. Sunmi, quién se unió a ellas en la misma limosina, traía un vestido parecido al de Seulgi, aunque rojo, y dejaba ver sus largas piernas, a las que Joy no les podía sacar la vista.
