Unas pequeñas cosquillas provocan que Zhan se remueva en su lugar, soltando un gruñido e intentando alejar lo que sea que le molesta de su espacio personal, el cual solo Yibo suele romper con demasiada frecuencia.
El toque lento de alguien le comienza a despertar.—Yiwanji quítate...
— ¿Yiwanji te despierta así? Al final sí me voy a poner celoso.
Abre los ojos de golpe, girando lentamente y abrazando al cuerpo sobre el como si fuera un koala.— Mi novio celoso, ah.—el castaño cae sobre el como un peso muerto, pero sujetándose con sus brazos para no aplastarlo.— Yo te amo, tonto.
Siente una mordida sobre su cuello, soltando un gemido ante la sensación.—Le daré una lección por pasarse de listo contigo.—murmura antes de seguir mordisqueando de forma juguetona.—¿Porque no me dices que quieres amor?
— Quiero...ah, q-quiero.—tartamudea sin poder terminar, jadeante con mayor intensidad.—Quiero a-amor.
Yibo sonríe al escuchar la forma en la que su novio le pide amor.
— No me lo digas dos veces, bebé.—besa el lóbulo de su oreja, haciendo un camino por su mandíbula hasta llegar a los labios.—¿Como puedes ser incluso hermoso por las mañanas?
El pelinegro ríe a mitad del beso, enviando vibraciones a ambos.—Es porque me haces feliz.
La mano de Yibo se cuela por debajo de la camiseta del menor, dejando caricias por su piel o esa fue la intención.
— No se les ocurra follar en mi cama.
Se alejan, uno molesto y resoplando y el otro sonriendo con diversión.—Unete a nosotros, Yiwanji.—propone Zhan.
— ¡Xiao Zhan!—le regaña su novio.
— Si mi hermano no participa, entonces me apunto.—echa a correr en cuanto nota que su gemelo a punto de lanzarle el reloj a la cabeza.—¡Agresivo de mierda!
El golpe contra la puerta del aparato calla el grito asustando de Yiwanji.—¡Espera a que te agarre, imbécil!
Zhan observa desde la cama como sale corriendo y escuchando las pisadas de ambos hermanos en la planta baja suelta un suspiro—¿Y ahora a mi quien me quita el calentón?
[...]
Durante el día, Zhan ves limita a observar a los gemelos en la cocina mientras intenta preparar un tarta. ¿Para que? No es como si fuera el cumpleaños de nadie. Pero en cuanto le escucharon decir la noche anterior que quería tarta de queso, ambos se propusieron darle lo que pidió y que mejor que una hecha en casa por ellos mismos.
A decir verdad todavía sigue frustrado porque Yibo lo dejó en la cama con un calentón y aunque no se lo dijo porque le daba vergüenza, sigue con las ganas de terminar lo que empezaron.
Verlos tan concentrados en utilizar las medidas correctas le hace bastante gracia y escucharles discutir sobre si es suficiente o no es digno de grabar. Pues Yiwanji lo hace todo en torno a la ciencia y física, mientras que Yibo sigue la receta al pie de la letra y cuando su gemelo lo regaña porque no tiene sentido echar la cantidad de dicha cosa, Yibo le grita que les la receta y la siga porque si no va salirse un churro feo y su novio merece lo mejor de lo mejor. Y si les sale mal se lo va a comer el solo y encima, pagar la tarta de la tienda porque no va a hacer a Zhan esperar para comérselo.
En cuanto escucha eso tiene que tapar la boca para no soltar una carcajada porque efectivamente, el propio Yibo es quien le ha dejado esperando por algo que nunca llegó.
Un rato más tarde su novio se da por vencido y deja a Yiwanji con la tarta porque siente que van q salirle arrugas antes de tiempo por tanta discusión con su hermano. Por lo que termina sentándose al lado de Zhan, sorprendiendolo pues estába viendo una película de zombies muy concentrado.
— ¿Te asusté?
— Creia que eras un zombie, si.– responde con unas ganas claras de bromear. — De hecho eres igualito a uno de ellos, mira. –señala la pantalla y luego a él. — Idénticos.
Finge una risa y sin ejercer demasiada fuerza lo sujeta, poniéndolo sobre el. — Wow, mi novio es todo un cómico. –aprieta su cintura contra su regazo y sonríe al escuchar el pequeño gemido que sale de entre los labios del pelinegro. — ¿Oh? ¿Acabas de gemir acaso?
— Idiota.–gira su rostro tras comprobar que Yiwanji esta distraído y lo besa por sorpresa. — Como me dejes otra vez con el calentón te corto el pene, ¿me entiendes?
— ¿Otra vez? –pregunta antes de darse cuenta a lo que se refiere. Es cierto que esa mañana tras despertar y meterle ganas se fue detrás de Yiwanji con intención de discutir. — Oh...lo siento mucho, Zhan-Zhan. No me di cuenta de que tenías ganas de hacerlo de verdad.
Zhan lo mira con una cara bastante divertida, no sabiendo como reaccionar. —Si te parece quiero hacerlo de mentira. –formó un puchero en sus labios. — Ya me lo puedes ir recompensando pronto o entonces seré yo quien te deje con las ganas la próxima vez.
— Perdón, perdón. Prometo no volver a hacerlo. –muerde su labio, levantándose con Zhan en sus brazos. — Wanji, nos vamos al baño. Volvemos en quince minutos. –le avisa, dejando a su gemelo confuso por varios segundos hasta que comprende lo que ha querido decir con esas palabras.
— ¡Pervertidos! ¡En mi cama no! –les advierte entre gritos y no puede hacer otra cosa que reírse.
— Ya has escuchado, en su cama no. –murmura contra sus labios. —La última vez nos hizo limpiar todo y eso que solo nos estuvimos besando. –ríe con gracia, siendo seguido por Yibo que lo deja en la cama con suavidad.
— Bueno, vamos a ello antes de que se nos pasen los quince minutos y Yiwanji venga a molestar otra vez.–se quita la camisa, lanzándola lejos. —Y no quieres que nos interrumpa otra vez, ¿hmm?
Niega con ganas, quitándose su propia camiseta.— Vamos a hacerlo que no nos va a dar tiempo.
••••
Hice unos pequeños cambios, espero les guste.
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He Or Me [YiZhan]
Hayran KurguWang Yibo y Wang Yiwanji solo tienen dos cosas en común, su apellido y sus caras, por que si, son hermanos gemelos. No son los tipos de gemelos que se amen o lleven bien entre ellos, para nada. Mientras Wang Yiwanji es alguien completamente tranqui...