Capítulo 3

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Afrodita

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Afrodita

Cuando uno es adolescente lo primero que busca es desgastada aceptación popular.

Los primeros días en una nueva realidad son los más difíciles. Conocer personas nuevas no es algo que considere mi fuerte especial.

Las personas de las que me rodeaba anteriormente eran aquellas y las típicas que se codeaban con lo mejor. Son aquellas personas que tienden a ser tan superficiales, que se dejan influenciar por los demás y el qué dirán. No seré hipócrita al decir que no era parte de ello, que me volví una más al pertenecer a esa clase de grupos.

Todo por tal de querer encajar.

Los gramos de pequeñas tormentas internas que no te dejaban estar tranquila, que te hacían dependiente por más que quisieras alejarte y abandonarlo por completo.

Paso apenas un mes considerado lo peor o lo mejor. Es confuso escribir entre líneas ahora que me estoy sincerando conmigo.

Decirme que deje de ser esa pequeña cría que tanto amaba a la vida, esa pequeña que destilaba felicidad y dulzura por los poros.

Me caracterizaba desde niña como aquella chiquilla con melena cobriza hasta la cintura que corría por todos lados cuando agarraba confianza con los niños de su alrededor.

Aquella niña que conforme fue creciendo fue agarrando inseguridad y dolor a su pequeño corazón.

El pasado duele, por más que lo ocultes.

Dejar las cosas que amabas o las pequeñas y grandes cosas que ya no te hacían feliz. Es triste y decepcionante porque sabes que luchaste tanto para lograr destacar de maneras esplendidas hasta lograr la perfección absoluta con cada acto y decisión.

No necesitas de años para que tu mundo se venga abajo, solo una noche basto para que mi vida comenzara hacer una mierda.

Me volví temerosa con los demás y muy meticulosa con quien estar. A quien hablar y a quien darle confianza, pero como dice mi madre "primero confía en ti y luego veremos si se la puedes otorgar"

Al ser nueva siempre te toparas a tus amistades de conveniencia y a las que son verdaderas en ocasiones no es necesario llevar años conociéndolas para que te des cuenta de que valen la pena o bueno el tiempo siempre lo dice todo.

Conocí a Isabella en la clase de inglés es como el angelito bueno y temeroso que siempre le encuentra algo malo al asunto, pero siempre termina convenciéndose que fue lo mejor en cambio Millca considerándola por ser como el diablito malvibroso que vive el momento y no le importa decir las verdades en tu cara por más dura que sea.

En ocasiones nos dejamos llevar por las apariencias de los demás, son engañosas. Parecen rudas por fuera, pero al conocerlas te das cuenta que son una monada de persona. Mis amigas son hermosas, por fuera y por dentro.

Busco Un Giro Interesante [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora