¿Miedo? Existe en este momento, la verdad que no.
Podría decir que conocer a gran parte de la familia de Afrodita es algo tranquilo. Por el lado de Dione ha sido... muy buena conmigo.
—Así que... ¿Tú eres el novio de mi sobrina? —Pregunta el rubio que tengo frente a mí.
Asiento tranquilo y extiendo mi mano para estrecharla con la suya.
La toma mirándome fijamente a los ojos mientras intento mantenerme lo más sereno que pueda.
Menea la cabeza de un lado a otro. —Cuidado jovencito. Te metes con alguien de la familia y no sigues con tu felicidad.
Termina de estrecharme su mano mientras a la vez llega Dione, la madre de Afrodita.
—Déjalo Dean. Es un buen chico. —Me dedica una sonrisa la mujer de ojos dorados mientras le suelta una mala mirada a su hermano.
Haciendo un lado las amenazas de su tío, primos desde los más grandes que yo, hasta el más pequeño que Rea el cual me causo mucha gracia con su amenaza de no darme "galletas de la felicidad" que son las favoritas de las hermanas Galicia al igual que la mayoría de los infantes de esta familia.
Camino en busca de mi bello Sol, la cual no he visto desde que Soleil se la llevo a no sé qué. Se que son muy apegadas.
Afrodita me conto que siempre ha estado para ella y para sus hermanos. Es la única abuela que les queda con vida, los padres de Milo fallecieron hace años mientras que Dione perdió a su padre hace algunos años.
Es lógico que quieran estar juntas, lo más que puedan porque la familia no es eterna por más que uno quiera.
Voy a la cocina y a la única persona que encuentro es a Soleil dándole los últimos toques a unas lindas galletas navideñas. Es alta con el cabello rubio atado en un moño alto y muy arreglado, es una señora con porte, elegancia y eso que carga un mandil con restos de ¿harina? Tal vez.
—Sabe... ¿Dónde está Afrodita? —Pregunto a lo que ella niega con la cabeza y continua con sus galletas dándome la ignorada del año.
—Gracias.
—Sabes...—Deja el utensilio de cocina en un lado.
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Busco Un Giro Interesante [#1]
RomanceLlegas a los dieciséis años. Tal vez y ya empiezas a cansarte de tantas preguntas sin sentido. ¿A quién le interesa atormentarse? Solo quieres empezar a vivir el momento. Ya todos sabemos que la realidad de la vida. Es una cadena que no se detiene...